De acuerdo con el Índice de Seguridad Vial, sólo el cinco por ciento de los cruces peatonales en la Capital cuentan con criterios de accesibilidad para los discapacitados. De 500 cruceros evaluados por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Camina AC y Centro Geo, este tema fue el peor calificado. Ruth Pérez, socióloga de la UAM y una de las autoras del estudio, explicó que la accesibilidad en los cruces no sólo depende de rampas adecuadas, sino también de pavimento podotáctil -texturas para bastones- y señales audibles o vibratorias, para personas con discapacidad visual. El 95 por ciento de los pasos peatonales no cuentan con este último requisito. Sólo 27 por ciento de las esquinas tiene rampas, pero no todas son funcionales. Casi la mitad tiene desniveles muy empinados o angostos, y no pueden usarse por una persona con discapacidad motriz. También se encontraron obstáculos que, para cualquier peatón representan un riesgo, pero que potencializan el peligro en personas con discapacidad. En el 81 de los cruces hay postes de luz, jardineras o señales de tránsito./REFORMA