Numerosos incendios registrados en los últimos días han afectado la calidad del aire en el Valle de México. Se han presentado condiciones meteorológicas que propician la acumulación de contaminantes, debido a un sistema de alta presión que ocasiona estabilidad de la atmósfera, caracterizada por una limitada ventilación. La Comisión Ambiental de la Megalópolis recomienda a la población proteger su salud con diversas medidas.
El C5 de la Ciudad de México ha informado que, hasta este sábado a las 10 de la noche, se habían registrado 13 incendios en pastizales, cuatro en lotes baldíos, dos en casa habitación, un incendio forestal y el incendio de una nave industrial, que fueron atendidos por 258 combatientes.
- Además, Probosque del Gobierno del Estado de México ha reportado 30 incendios en 27 municipios, atendidos por 992 combatientes en todo el estado; también se reportó el estallido de un polvorín en Tultepec. Sumado a lo anterior, la presencia de incendios en los estados de Guerrero y Oaxaca, que están siendo atendidos por la CONAFOR. Todo ello contribuye también al transporte de contaminantes hacia el Valle de México.
Los datos reportados por el Sistema de Monitoreo Atmosférico de la Ciudad de México (SIMAT) muestran que los niveles de partículas respirables se han incrementado en las últimas horas en todo el Valle de México. A las 9 de la mañana de este domingo, las concentraciones de partículas respirables PM10 alcanzaron un máximo de 116 puntos en la escala del Índice de Calidad del Aire.
Con base en lo anterior la Comisión Ambiental de la Megalópolis recomendó a la población proteger su salud aplicando las siguientes medidas mientras se mantenga la presencia de humo en la Zona Metropolitana del Valle de México:
- Cierre puertas y ventanas y permanezca en ambientes interiores.
- Evite realizar actividades y ejercicios intensos al aire libre.
- En caso de que se encuentre cerca de los incendios y la concentración de humos sea elevada: Aléjese del lugar en sentido contrario a la dirección del viento. Cierre con trapos húmedos las rendijas de puertas y ventanas y permanezca en ambientes interiores. Use cubre-boca de forma permanente o trate de respirar a través de una prenda húmeda.
- Si tiene irritación de los ojos, evite usar lentes de contacto.
- Acuda al médico en caso de haberse expuesto al humo, especialmente si tiene problemas en las vías respiratorias.
- Las personas con más probabilidades de verse afectadas son los adultos mayores, las mujeres embarazadas, los niños y las personas con afecciones respiratorias y cardiacas preexistentes.
Además, solicitaron mantenerse atento e informado de manera constante con las fuentes oficiales y evitar propagar rumores.
Es fundamental que la población participe previniendo los incendios y dando aviso a las autoridades acerca de incendios forestales, agrícolas y de pastizales, quemas de basura, de llantas, fogatas, pirotecnia y otras actividades y eventos que generen emisiones ostensiblemente contaminantes, a través de los siguientes números telefónicos: Ciudad de México, Locatel: 5658-1111; Estado de México, Centro de Atención Telefónica: 01-800-6969-696, Comisión Nacional Forestal: 01 800-INCENDIO (4623-6346).
Sigue nuestras recomendaciones en caso de presenciar humo cerca de tu localidad y evita que pueda dañar tu salud. #LaPrevenciónEsNuestraFuerza pic.twitter.com/5wni6Eu6fI
— Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y PC (@SGIRPC_CDMX) May 10, 2019
Piden a la población no intervenir
Por su parte la Comisión Nacional Forestal pidió a la población que no tenga preparación como combatiente a que por su seguridad no intervengan y mejor avisen a la autoridad correspondiente.
- “Proteger nuestros ecosistemas forestales del fuego es importante, pero es más importante la seguridad e integridad de las personas, ya sean combatientes o civiles. Por esta razón, ante un incendio forestal, la prioridad de las autoridades es garantizar la seguridad del ser humano”.
Quienes enfrentan al fuego profesionalmente se llaman combatientes, tienen una amplia preparación y cuentan con un equipo especializado. Algunos de los peligros a los que se enfrentan las personas que combate un incendio forestal son:
Radiación, quemaduras, golpes, asfixia por exposición al humo, deshidratación, picaduras de animales ponzoñosos, caída de árboles muertos, rodamiento de piedras, caídas de varios metros de altura por la topografía accidentada, agotamiento, desorientación.
Otro de los grandes riesgos es que la combinación de combustible, oxígeno y el fuego puede provocar una explosión, por lo que es indispensable que la persona conozca de rutas de escape y protección./EL ECONOMISTA-PUNTOporPUNTO