Las calles de la Ciudad de México se encuentran menos transitadas ante la emergencia por COVID-19, sin embargo cada vez más motociclistas pierden la vida: las víctimas pasaron de 44 conductores de estos vehículos en el primer semestre de 2019 a 53 en el mismo periodo de 2020, un alza de 20%.
- También incrementó la proporción de motociclistas involucrados en hechos de tránsito: en el segundo trimestre (de abril a junio) de 2020 representaban el 41% según el segundo Reporte Trimestal de Hechos de Tránsito y para el cierre del tercer trimestre (de julio a septiembre) se acercan al 55%, de acuerdo con la Secretaría de Movilidad (Semovi).
“Para el tercer trimestre de 2020 vamos a cerrar en un 55%, entonces ha venido un aumento bastante importante de las motos que están involucradas en hechos de tránsito”, dice en entrevista Valentina Delgado, directora de Seguridad Vial.
- Aunque uno de los efectos de la pandemia ha sido menos vehículos en las calles una reducción del 30% en los incidentes viales, para Delgado hay señales de alerta sobre la seguridad de los motociclistas en la capital.
“Cuando comenzamos el año el usuario que tenía las cifras más altas (de mortalidad) era el peatón y se había mantenido desde hace mucho tiempo. El peatón es quien hace la mayoría de los viajes en la Ciudad de México
“Los conductores de motocicleta ahora superaron a los peatones y son la víctima número uno de hechos de tránsito fatales, esto para nosotros es un foco rojo”, indica la funcionaria de Semovi.
La Secretaría de Movilidad capitalina trabaja en la creación de una licencia específica para motociclistas, pues actualmente la licencia Tipo A –que hasta el momento no requiere de ningún tipo de examen práctico ni de conocimientos– permite manejar por igual tanto motos como autos.
- El diseño del proceso para obtener la nueva licencia se realiza con el Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (Conocer) y también se ha integrado el Comité de Gestión por Competencias de Movilidad de Vehículos Particulares de la CDMX, integrado por la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), el Observatorio de Transporte y Movilidad Metropolitana (OTMM) y el Instituto de Geografía de la UNAM.
En cambio, con la nueva licencia los motociclistas tendrán que aprobar un examen donde se les evaluará en tres áreas:
- Evaluación de conocimientos teóricos: Reglamento de Tránsito, límites de velocidad y vías de acceso controlado.
- Revisión mecánica y física de la motocicleta.
- Prueba de pericia presencial: equilibrio, circuitos en zigzag, 8 y rectángulos, frenado de emergencia.
La directora de Seguridad Vial asegura que no se trata de una medida recaudatoria sino que se busca disminuir la muerte de motociclistas en la ciudad.
“Creemos que muchos de estos hechos de tránsito pudieron haberse evitado si el conductor de motocicleta tuviera la pericia suficiente para manejar y tuvieran el equipo adecuado.
Durante años los motociclistas han quedado invisibilizados como usuarios de las vías y no se ha puesto atención suficiente sobre su vulnerabilidad, señala Adriana Silvia Peña, presidenta de Motociclistas Unidos de la CDMX y Área Metropolitana.
“Legisladores y autoridades de todos los niveles no entendían lo que es usar una motocicleta y a los riesgos que se tiene cuando la usas en una ciudad en donde no hay una educación vial”, comenta.
- La falta de señalización vial que visibilice a los motociclistas, colocación de mobiliario como macetas para dividir carriles que se convierten en un riesgo, así como no ser considerados como usuarios vulnerables de la vía y la falta de capacitación de los motociclistas –en especial los nuevos conductores– son algunos de los problemas que destaca.
“Esa licencia nos debe favorecer, nos debe legitimar y acreditar como usuarios preparados porque conocemos un reglamento, conocemos las vialidades y hoy podemos exigir que estén a favor de nosotros y no sea simplemente un medio recaudatorio”, afirma Silvia Peña.
Motociclistas Unidos de la CDMX es una de las organizaciones que ha participado junto a la Semovi para crear el estándar de los conocimientos y habilidades básicas con las que deben contar los motociclistas para salir a rodar de forma segura.
Si los motociclistas cumplen con esta responsabilidad, también tendrán más derecho de exigir ser tomados en cuenta para el diseño de las calles, los reglamentos así como exigir que se deje de criminalizarlos a través de operativos y revisiones injustificadas por parte de la policía capitalina.
Silvia Peña destaca la necesidad de hacer obligatorio el registro de las motocicletas desde que son adquiridas, pues se pueden comprar en supermercados o tiendas departamentales y salir a circulación sin placas.
“Esto deriva en problemas de seguridad ciudadana. Entonces hay delitos donde no hay un registro o la moto con la que se cometió el delito no trae placas.
“Cuando nos roban una moto se comete un segundo delito que es robar en una moto robada; se vuelve una cadena de hechos que no fueron regulados en su momento y nos estigmatiza como que todo el que compra una moto lo hace para robar”, sostiene.
- La creación de la nueva licencia dará paso también a la apertura de más escuelas de manejo para motociclistas. Mientras la Secretaría de Movilidad considera abrir cursos de capacitación gratuitos para motociclistas vulnerables como los repartidores de apps, quienes no cuentan con ninguna prestación laboral y pueden pasar de 8 a 14 o más horas diarias en las calles.
La licencia A1, exclusiva para motociclistas, deberá ser tramitada hasta que se venza la licencia Tipo A con la que actualmente circulan los motociclistas, así como por los nuevos conductores y el examen sólo tendrá que ser aprobado en la primera ocasión, detalla la directora de Seguridad Vial.
“Es una licencia que ya existía en nuestra normatividad pero nunca se había puesto a andar. (…) Son los mismos motociclistas quienes están definiendo estas pruebas básicas que se tienen que hacer”, agrega Valentina Delgado./EXPANSIÓN-PUNTOporPUNTO