Más de la mitad de la Ciudad de México es peligrosa y los delitos van en aumento. En total, 10 alcaldías, equivalentes al 62% del territorio, concentran 90% de los delitos de mayor incidencia cada mes.
Aunque vivir en demarcaciones como Iztapalapa, Cuauhtémoc o Gustavo A. Madero significa ya un latente riesgo para ser víctima de algún crimen, pues concentran el mayor número de actos criminales; pero de acuerdo a las cifras oficiales, se están extendiendo a zonas que reportaban una menor criminalidad.
• Cuando asumió el gobierno, Claudia Sheinbaum reconoció que la inseguridad era el problema que debía resolver en poco tiempo. Sin embargo, en los primeros cinco meses de su gestión en la Ciudad de México, los principales delitos de alto impacto y patrimoniales —incluyendo homicidios dolosos, secuestros, extorsiones y diversas modalidades de robo como son a transporte público, a transeúntes y los hurtos a negocios—, reflejan los mayores incrementos en su incidencia de los últimos cinco años.
• Apenas el 20 de mayo pasado, durante su participación en la Convención Nacional de Industriales 2019, Sheinbaum reconoció lo complicado que ha sido enfrentar el fenómeno de la violencia e inseguridad: “Nos encontramos una ciudad en mucho peores condiciones de lo que nos imaginamos”. En ese sentido, señaló que tanto la Policía como la Procuraduría capitalinas, encargadas de velar por la seguridad, “estaban en un proceso de descomposición muy, muy fuerte” del cual dijo ha costado tomar el control.
• A partir del análisis que ejecentral hizo en las estadísticas del comportamiento de 13 delitos que la propia Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CDMX) registra y reporta al Sistema Nacional de Seguridad Pública, tanto de la cantidad de víctimas como del número de carpetas de investigación abiertas por cada delito, permitió realizar una radiografía sobre cómo ha evolucionado el hampa en la capital del país.
• Una revisión de los datos recabados de diciembre a abril de cada año, desde 2015 hasta 2019, reflejó que entre los delitos con las mayores tasas de crecimiento se encuentran los robos en transporte público colectivo e individual, robo en transporte individual, así como las investigaciones por robos a casa habitación, robo a transeúnte y robo a negocio, incluyendo en todos los casos las modalidades “con y sin violencia”, los cuales tuvieron un alza drástica en las 10 alcaldías que acumulan el mayor número de delitos.
Aunque Salvador Guerrero Chiprés, consejero presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública y Procuración de Justicia de la Ciudad de México, sostiene que no existe ese crecimiento:
• “No tenemos datos de que hubo u boom de la delincuencia en la Ciudad de México, después de que toma posesión Claudia Sheinbaum. Nosotros advertimos ese boom que fue hace tres años con la administración anterior, particularmente en los meses de abril, septiembre y octubre. En ese periodo fue cuando más sentimos la presencia de ese boom. Ahí lo que ocurrió, creemos, es que hubo una falsificación de datos. Nosotros como la procuraduría lo hemos identificado”.
• Aunque la constante evidencia en redes sociales de videos donde se muestran asaltos a automovilistas o pasajeros del metro; así como secuestros exprés o asaltos en joyerías, por ejemplo, son pequeños testimonios de lo que ocurre cada día en la capital del país.
• Hoy día, por ejemplo, existen mayores posibilidades de que te asalten en el transporte público en la alcaldía Miguel Hidalgo que en alguna otra, pues este ilícitos registró un incremento del 963%, entre diciembre de 2018 y abril de este año, en comparación con el mismo lapso de 2015. Es decir, hace cinco años se reportaba una tasa de seis expedientes por cada 100 mil habitantes y ahora es de 63.8.
• En Benito Juáez, por ejemplo, es mucho más probable sufrir un robo en casa, que alguna de las alcaldías vecinas, porque ese delito registró un aumento superior a 92 por ciento.
• Mientras que en Tlalpan un conductor tiene bastantes más posibilidades de perder su automóvil o su motocicleta por un asalto, a diferencia de Xochimilco, acaldía con la que colinda. Esto porque en el territorio tlalpanense la incidencia de robo a vehículo de cuatro puertas registró un 21% de aumento y el de motocicletas (modalidad que se incluyó en la nueva metodología de conteo de delitos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública) creció 240 por ciento.
• Y en Coyoacán, Álvaro Obregón y Benito Juárez también las motocicletas son artículos muy deseados por los delincuentes, porque también reportaron un crecimiento exponencial del 224%, 210% y 133 por ciento, respectivamente.
Casi todas las modalidades de robo tuvieron despuntes graduales en el periodo analizado, respecto a las tasas por cada 100 mil habitantes en las carpetas de investigación que se abrieron hasta llegar a los altos índices en el arranque de la actual administración.
En estos casos los porcentajes de aumento de estos crímenes varía entre 100 y prácticamente mil por ciento.
Sin embargo, para Salvador Guerrero se trata más de una cuestión de percepción que de incidencia delictiva, porque sólo existen “focos de preocupación” por varios delitos.
Sí, sí hubo problemas de seguridad en 2018, pero ya se empiezan a ver inflexiones relativas, modestas en homicidios dolosos, en robo a casa habitación y en robo de vehículos. Esos son los datos en este momento que tiene el Secretariado, la Procuraduría y el Consejo Ciudadano (…) Y sí hay focos de preocupación y el más importante es el robo a transporte en las autopistas. También el robo a transporte individual es muy importante, daño en propiedad, el robo a transeúnte en vía pública también. Allí es necesario identificar o reconocer que sí existe”, comentó.
En entrevista con este periódico, Guerrero Chiprés señaló que en abril de este año hubo una disminución de 15% en cuanto a la incidencia de robo de vehículos, “según los datos que están ahí”, así como una reducción de homicidios dolosos de 22%, al comparar abril y diciembre.
En el caso de los homicidios intencionales “con violencia” (aunque el registro oficial no distingue este delito en las modalidades de con o sin violencia), Guerrero Chiprés refirió que es “persistente por grupos que se están disputando territorios delictivos; sin embargo, la cifra total es menor que en diciembre”, sostuvo.
• Al respecto, el titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la capital (SSC), Jesús Orta Martínez —a quien este semanario le solicitó una entrevista sin que al cierre de edición se haya tenido una respuesta—, públicamente reconoció en recientes declaraciones que la presencia de grupos del crimen organizado impacta directamente en los índices de asesinatos de la Ciudad de México, por lo que ante esas condiciones los datos son “muy variables”.
• Es necesario considerar que el crecimiento en la incidencia delictiva se da en la capital del país al mismo tiempo en que el nivel de desempleo creció en la Ciudad de México. De diciembre 2018 a marzo de 2019, la desocupación fue de 5.3%, la segunda más elevada desde 2016 cuando fue de 5.6 por ciento.
• Como complementos, además del desempleo, los niveles de bajo ingreso salarial también tuvieron una alza; es decir, los mexicanos vieron cómo disminuyó su capacidad adquisitiva. En el primer trimestre de 2019, uno de cada cinco trabajadores en todo el país cobran como máximo 103 pesos.
• Además, el robo de camiones de carga en las autopistas de todo el país, alcanzó un nuevo máximo histórico, con cinco mil 277 unidades en el periodo diciembre-abril, 10% más respecto a igual periodo del año pasado. Eso fue el equivalente a 35 camiones diarios.
• El robo de mercancía requiere un mercado para la venta ilícita de esos productos. Esto explica que en el primer trimestre de 2019, las personas a nivel nacional ocupadas en el sector informal registren un nuevo máximo histórico, con más de 15 millones de personas. Para tener un punto de referencia de lo que significa esa población, es que equivale a todos los habitantes actuales de 10 entidades federativas: Querétaro, Morelos, Durango, Zacatecas, Quintana Roo, Aguascalientes, Tlaxcala, Nayarit, Campeche y Baja California Sur.
Otro elemento que influye, es el menor dinamismo en la contratación de personal en la economía formal, medido a través de los asegurados en el IMSS. En el periodo, diciembre-abril el empleo formal en la Ciudad de México aumentó 1.5%, cifra que fue el menor incremento en los últimos cuatro años.
Además, el incremento de precios (inflación), en la capital del país se mantiene en niveles elevados con 4.6%, en el periodo de análisis. /EJE CENTRAL-PUNTOporPUNTO