El jefe de Gobierno, José Ramón Amieva, admitió que aún se está midiendo el impacto ambiental de las obras del Tren Interurbano México-Toluca, pese a que tienen un avance de casi 50 por ciento, según datos de la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse). Interrogado sobre las acusaciones de vecinos por el daño al sistema hidrológico de la zona poniente de la ciudad, respondió que derivado de ese estudio se aplicarán las medidas de mitigación para que no se causen daños o se eliminen los que se pudieran generar en materia ambiental. Me parece que todavía se está integrando el tema de la determinación de impacto, y todo impacto siempre debe conllevar medidas que son de mitigación, señaló el titular del Ejecutivo local, quien agregó que la Secretaría de Medio Ambiente es la encargada de determinar tanto el daño como la remediación del mismo. –¿Todavía no hay medidas de mitigación? –se le preguntó –Creo que ya tienen el bosquejo; vamos a pedir que lo actualicen –respondió./LA JORNADA