En la Ciudad de México se estima que diariamente son robados unos 2 mil teléfonos celulares, lo que significa un daño patrimonial de casi 10 millones de pesos, según datos del gobierno capitalino con base en la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública.
Ante este escenario, el gobierno local puso en marcha una estrategia cuyo propósito es inhibir la comisión de este delito, la cual consiste en promover el bloqueo de los dispositivos hurtados y prohibir su comercialización en tianguis.
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, presentó ayer una campaña para que los usuarios de telefonía celular registren en Locatel, en la aplicación para dispositivos móviles denominada Alameda Central o en la página web www.bloqueatucelcdmx.gob.mx, el número de identificación internacional del equipo móvil conocido como IMEI.
El propósito es que en caso de robo o extravío, el usuario pueda solicitar el bloqueo del aparato llamando a Locatel o al operador de telefonía con que se tiene contratado el servicio, para que de esta forma ya no se pueda utilizar y así evitar su venta.
Acompañada de representantes de las empresas telefónicas, así como del presidente del Instituto Federal de Telecomunicaciones, Gabriel Contreras Saldívar, Sheinbaum explicó que para conocer el IMEI sólo se tiene que marcar en el teléfono el código *#06# y se desplegarán en la pantalla 15 dígitos y proceder a su registro para facilitar su bloqueo en caso de ser necesario.
En ese acto, realizado en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, la titular del Ejecutivo local también anunció que hoy se publicará en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México un decreto por el que se prohíbe la venta de teléfonos móviles en tianguis, principalmente robados.
Asimismo, agregó, se trabaja en la creación de un mecanismo para que en los establecimientos mercantiles formales donde se expenden estos equipos se lleve un registro con los nombres de las personas que los adquieren.
Según datos del gobierno capitalino, al día se roban mil 972 aparatos telefónicos móviles, es decir, casi 720 mil unidades al año; sin embargo, sólo uno por ciento de los casos es denunciando, por lo que la cifra negra de ese delito es de 99 por ciento.
Lo anterior implica un daño patrimonial de 9 millones 800 mil pesos diarios, considerando un precio medio de 5 mil pesos por teléfono, aunado a que el hurto de este objeto significa también el robo de identidad de la víctima, por la cantidad de datos personales que se almacenan en esos dispositivos.
Si bien la medida de solicitar el bloqueo de los aparatos en caso de robo se comenzó a implementar en la anterior administración, el gobierno capitalino señaló que el propósito de esta campaña es hacer más fácil el procedimiento.
Para tal efecto, los operadores de telefonía Telcel, AT&T y Telefónica asignaron cada cual un número telefónico para atender las llamadas que ingresen a Locatel. Además de que Apple y Google apoyaron con la generación de información útil para el bloqueo del aparato./LA JORNADA-PUNTOporPUNTO