Guanajuato, Michoacán y Jalisco encabezan la lista de los estados donde se han registrado el mayor número de asesinatos de policías, con 50, 39 y 27 casos, respectivamente. De acuerdo con cifras del organismo civil Causa en Común, que encabeza María Elena Morera, durante 2019 abatieron a 395 uniformados.
En 2018, masacraron a 420 elementos policiacos, entre federales, estatales y municipales, principalmente en Guanajuato, donde fueron hubo 64 casos.
En 2019, las entidades que presentan un menor número de incidencia de este tipo de crímenes son Nayarit, solo con dos casos; Colima, cuatro; mientras que Chiapas contabiliza cinco homicidios.
Según David Blanc, investigador de esa asociación civil, en promedio son asesinados 30 agentes cada mes, lo que es preocupante por la impunidad que existe con este tipo de crímenes.
“La impunidad es una de las causas por las que están matando policías. En la mayoría de los casos no hay detenidos, no hay culpables. Con el asesinato de 14 en Michoacán, el 14 de octubre pasado, se da una clara señal de que el Estado no los respalda y la desprotección que enfrentan los uniformados. Muchos de ellos, son asesinados cuando terminan su servicio. Parece que es una estrategia de que los están localizando y cazando”, dijo.
Agregó que además de tener salarios bajos, jornadas laborales extenuantes, capacitaciones exprés, falta de equipamiento y equipo de protección, tienen que enfrentar día con día el riesgo de ser asesinados.
“Como cualquier mexicano, pero mucho, mucho más; alrededor de cuatro veces más que un ciudadano que no es policía. En nuestro país matan en promedio a más de uno cada día”, precisó.
- Agregó que los asesinatos de elementos deberían ser una afrenta para el Estado, las autoridades y la ciudadanía; sin embargo, en la mayoría de los casos, esos crímenes quedan únicamente como registros en notas secundarias en periódicos locales.
- Indicó también que “como sociedad debemos indignarnos y exigir castigo para quienes de manera cobarde asesinan a policías. Bien o mal preparados, son los encargados de protegernos y no podemos permanecer indiferentes”.
En su reporte ¿Cómo vamos en seguridad?, el organismo precisó que “el principal indicador de la indefensión de las corporaciones, y de la indiferencia oficial y social, es el asesinato de policías, la mayoría de ellos sin consecuencias”.
Resaltó también que no existe un registro oficial de policías asesinados que permita realizar diagnósticos puntuales del problema, ni reformas en cuanto a formación y capacitación. Tampoco ha habido posicionamientos de gobiernos locales ni del federal respecto a estos asesinatos en el país.
La ONG destaca en su estudio ¿Qué piensa la policía?, que 52 por ciento de los uniformados percibe un salario de entre 10 y 15 mil pesos mensuales; 32 por ciento, menos de 10 mil; en tanto un 12 por ciento de los uniformados devenga más de 15 mil pesos al mes.
- Agrega que 48 por ciento de los elementos utiliza sus propios recursos para adquirir calzado o botas de trabajo; 43 por ciento, el uniforme; 37 por ciento, papelería para informes; 23 por ciento, cartuchos; 22 por ciento, reparaciones de la patrulla; 14 por ciento, chaleco antibalas, mientras que un ocho por ciento gasta su dinero para comprar gasolina de la patrulla.
- Además, en el sondeo aplicado a 5 mil 304 policías, se resalta que un 62 por ciento de los uniformados son empleados para realizar encargos personales; 32 por ciento, pagar una cuota; 31 por ciento, para realizar trabajos de mantenimiento en lugares públicos; 12 por ciento, ir de acarreado a un mitin político; 10 por ciento, votar por algún candidato, y 8 por ciento torturar a un detenido. /CONTRAREPLICA-PUNTOporPUNTO
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