TEXTO ÍNTEGRO: ENFERMEDADES No TRANSMISIBLES dominan los Censos de MORTANDAD en Mundo

Las diferencias en la mortalidad no solo se observan a nivel global, sino también dentro de regiones específicas como las Américas. Un informe reciente de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) resalta las disparidades en la mortalidad por enfermedades no transmisibles dentro de esta región.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reveló que las enfermedades no transmisibles (ENT) dominan las estadísticas de mortalidad a nivel mundial, constituyendo 7 de las 10 principales causas de muerte desde 2021.

Estas enfermedades, que incluyen condiciones como las cardiopatías isquémicas, el cáncer de pulmón y la diabetes, han superado a las enfermedades infecciosas y otras causas, consolidándose como las principales amenazas para la salud global.

  • Sin embargo, explicó el estudio de la OMS, los patrones de mortalidad varían según el nivel de ingresos de los países, lo que resalta la desigualdad en el acceso a la atención médica y la prevención.
  • En las naciones de ingresos bajos, las enfermedades transmisibles, como las infecciones respiratorias, la malaria y el VIH/SIDA, siguen siendo las principales causas de muerte. Ocho de las diez principales causas de muerte en estos países fueron enfermedades transmisibles.
  • “El mayor asesino en los países de bajos ingresos desde 2021 fue las infecciones respiratorias, mientras que la COVID-19 ocupó solo el sexto lugar”, detalla el informe de la OMS.

Por otro lado, en los países de ingresos medios y altos, las ENT son las predominantes. En los países de ingresos medios-bajos, la situación es más equilibrada, con una mezcla de cinco causas transmisibles y cinco no transmisibles.

En estos países, el impacto de la COVID-19 fue más notorio, ubicándose como la principal causa de muerte en 2021, con más de 4 millones de muertes. Sin embargo, también se observó un aumento en las muertes por enfermedades como la diabetes, que ascendió al octavo lugar en la lista de causas de muerte.

  • En los países de ingresos altos, las enfermedades del corazón, los accidentes cerebrovasculares y el Alzheimer ocupan los primeros lugares, reflejando el impacto del envejecimiento de la población y los estilos de vida urbanos.
  • La OMS subraya que “la mortalidad por enfermedades cardíacas isquémicas y accidentes cerebrovasculares sigue siendo alta, aunque el número total de muertes por estas causas ha disminuido entre 2000 y 2021″.

–Las diferencias en la mortalidad no solo se observan a nivel global, sino también dentro de regiones específicas como las Américas.

–Un informe reciente de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) resalta las disparidades en la mortalidad por enfermedades no transmisibles dentro de esta región.

–Por ejemplo, la tasa de mortalidad por ENT en el Caribe Latino es aproximadamente 1,5 veces mayor que en la subregión Andina.

  • Estas diferencias se atribuyen a diversos factores, incluyendo el acceso desigual a los servicios de salud, las condiciones socioeconómicas y la prevalencia de factores de riesgo como la obesidad y el tabaquismo.

El informe de la OPS también señala una preocupante diferencia de género en las tasas de mortalidad y discapacidad por enfermedades no transmisibles en las Américas.

“Los hombres experimentaron tasas consistentemente más altas de muerte y discapacidad que las mujeres debido a una mayor carga de enfermedades cardiovasculares y cánceres, así como a altas tasas de violencia interpersonal”, explicó el doctor Anselm Hennis, Director de Enfermedades No Transmisibles y Salud Mental de la OPS.

  • Sin embargo, se observa que las mujeres tienen una mayor probabilidad de sufrir violencia de pareja, y en el ámbito de la salud mental, los trastornos de ansiedad y depresión son más prevalentes entre ellas.

10 causas más comunes de muerte en el mundo y como evitarlas:

  1. Enfermedad isquémica del corazón: mantener una dieta equilibrada y baja en grasas saturadas, realizar ejercicio regular, evitar el consumo de tabaco y controlar enfermedades como la hipertensión y la diabetes.
  2. COVID-19: seguir prácticas de higiene como el lavado de manos frecuente y vacunarse.
  3. Accidente cerebrovascular: llevar una alimentación saludable, realizar actividad física, evitar el tabaco y el alcohol, y seguir tratamientos para controlar la presión arterial y la colesterol.
  4. Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC): dejar de fumar, evitar la exposición a contaminantes ambientales y seguir un régimen regular de ejercicio respiratorio.
  5. Infecciones respiratorias inferiores: vacunarse contra enfermedades como la influenza y el neumococo, practicar una buena higiene de manos y evitar el contacto cercano con personas que presenten síntomas.
  6. Cáncer de tráquea, bronquios y pulmón: evitar el tabaco y la exposición a lugares contaminados, y protegerse de la exposición a sustancias cancerígenas en el ambiente laboral.
  7. Enfermedad de Alzheimer y otras demencias: mantener el cerebro activo con actividades cognitivas, llevar una dieta saludable, realizar ejercicio físico regularmente, y mantener interacciones sociales.
  8. Diabetes mellitus: adoptar una dieta equilibrada, mantener un peso saludable, realizar ejercicio físico y monitorear regularmente los niveles de glucosa en sangre.
  9. Enfermedades renales: beber suficiente agua, controlar la presión arterial, limitar el consumo de sal y proteínas, y evitar el abuso de sustancias que puedan dañar los riñones, como ciertos medicamentos.
  10. Tuberculosis: seguir un régimen de vacunación, mejorar la ventilación en espacios cerrados, y asegurar un diagnóstico y tratamiento temprano de los casos activos para cortar la cadena de transmisión.

Aumento de la esperanza de vida y las enfermedades no transmisibles

A pesar de las diferencias regionales y socioeconómicas, un patrón común es el aumento en la esperanza de vida y la prevalencia de enfermedades no transmisibles (ENT).

Según la OPS, la esperanza de vida en las Américas ha aumentado, pero este avance viene acompañado de un incremento en el número de personas que viven con ENT.

El envejecimiento de la población ha sido un factor clave en este aumento, contribuyendo a una mayor prevalencia de enfermedades crónicas y discapacidades.

  • Entre 2000 y 2019, el número total de muertes en las Américas aumentó en un 31%, y las ENT fueron las principales responsables de este incremento. La tasa de mortalidad por enfermedades no transmisibles en la región fue de 412 muertes por cada 100.000 habitantes en 2019, afectando tanto a hombres como a mujeres.

“Las ENT y sus causas externas siguen siendo un gran desafío, no sólo para los sistemas de salud, sino también para el desarrollo social y económico de las Américas,” afirmó el doctor Hennis.

  • El informe también destaca que, aunque el número absoluto de muertes ha aumentado, la tasa de mortalidad por enfermedades no transmisibles y lesiones ha disminuido en un 17,2% y un 8%, respectivamente.
  • Esta disminución ha contribuido al aumento en la esperanza de vida, pero también ha resultado en un mayor número de personas viviendo con ENT, lo que representa un reto significativo para los sistemas de salud que deben adaptarse a esta nueva realidad demográfica.

Comprender las causas de muerte es crucial para mejorar la salud pública y orientar las políticas y recursos de manera efectiva.

  • La OMS enfatiza que “medir cuántas personas mueren cada año y por qué es esencial para evaluar la efectividad de nuestros sistemas de salud y dirigir los recursos a donde más se necesitan”.
  • Los datos sobre mortalidad no solo ayudan a enfocar las actividades en el sector salud, sino también en otros sectores como el transporte, la alimentación y la agricultura, y el medio ambiente.

La pandemia de COVID-19 subrayó la importancia de contar con sistemas robustos de registro civil y estadísticas vitales, que permitan un recuento diario de las muertes y enfoquen los esfuerzos de prevención y tratamiento.

  • Sin embargo, la OMS advierte sobre la fragmentación inherente en los sistemas de recolección de datos en muchos países de bajos ingresos, donde los responsables de las políticas aún no saben con certeza cuántas personas mueren y por qué causas.

“El desarrollo de estándares y mejores prácticas para la recolección, procesamiento y síntesis de datos, como la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11), es fundamental para que los países generen y utilicen rutinariamente información sanitaria que cumpla con los estándares internacionales”, concluye la OMS.

Estudio revela causa número 1 de enfermedades en el mundo

  • Las patologías que afectan al sistema nervioso como las demencias, las migrañas o los accidentes cardiovasculares son la principal causa de problemas de salud en el mundo, según un amplio estudio.
  • El trabajo, recogido por la revista Lancet Neurology, señala que un 43 % de la población mundial (unos 3.400 millones de personas) sufrió problemas de salud neurológicos en 2021.
  • El estudio corrió a cargo de cientos de investigadores bajo la supervisión del Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME), un organismo de referencia en cuanto a estadísticas de salud.
  • El nivel de afectación de este tipo de patologías es mucho más elevado de lo que se estimaba. Desde 1990, ha aumentado en más del 50 %, superando así las enfermedades cardiovasculares que eran las más expandidas hasta ahora.
  • Los investigadores ven en estas cifras un reflejo del envejecimiento poblacional, puesto que la gran mayoría de estas patologías no tiene curación y pueden perdurar hasta el deceso del paciente.

Ictus o ACV, los más problemáticos

Esta realidad responde por otro lado a una evolución de los criterios de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ahora cuenta los ictus como una patología neurológica y no cardiovascular, una elección aplicada por los autores de este estudio.

  • Precisamente, dentro de esta categoría global de patologías neurológicas, los ictus o accidentes cerebrovasculares (ACV) son los que generan más problemas.
  • Según el estudio, hicieron perder un total de 160 millones de años de buena salud a las personas afectadas.
  • Después se sitúan la encefalopatía neonatal, las demencias del tipo alzhéimer, las consecuencias neurológicas de la diabetes, la meningitis y la epilepsia.

En cuanto a mortalidad, se calcula que las patologías neurológicas mataron a más de 11 millones de personas en 2021. En este aspecto siguen por debajo de los 19,8 millones de decesos por enfermedades cardiovasculares.

Cada día fallecen 4500 jóvenes

Las probabilidades de que un adolescente o un adulto joven vivan hasta etapas posteriores dependen en gran medida del lugar del mundo donde residen. En 2021, la probabilidad media de que un niño de 10 años falleciera antes de cumplir 24 años era 6 veces superior en el África subsahariana que en América del Norte y en Europa.

  • En el grupo etario de 10 a 24 años, las tasas de mortalidad más bajas corresponden a la franja de los 10 a los 14 años y las más elevadas, a las del grupo de 20 a 24 años. En estas edades, las tasas entre las mujeres suelen ser más bajas que entre los hombres.

En la horquilla de 10 a 14 años, entre las causas de mortalidad predominan las enfermedades infecciosas, mientras que entre los adolescentes de mayor edad y los adultos jóvenes esa causa es menos frecuente y se registran más defunciones debidas a accidentes, traumatismos, conductas autolesivas y agresiones. En la adolescencia también se observan diferencias en función del sexo.

Principales problemas de salud

Las lesiones y los traumatismos no intencionados, como los accidentes de tránsito y los ahogamientos, son algunas de las principales causas de mortalidad y discapacidad entre los adolescentes.

  • Accidentes de tránsito: En 2021 fallecieron más de 100 000 adolescentes (en inglés) de 10 a 19 años a consecuencia de accidentes de tránsito. Muchos de ellos eran usuarios con un mayor grado de vulnerabilidad, es decir, peatones, ciclistas o usuarios de vehículos motorizados de dos ruedas.
  • Ahogamientos: El ahogamiento es una de las principales causas de mortalidad entre los adolescentes: se calcula que, en 2021, se ahogaron más de 40 000 adolescentes, de los que más de tres cuartas partes eran hombres.
  • Violencia: La violencia interpersonal es una de las principales causas de mortalidad entre adolescentes y jóvenes en el mundo, aunque su importancia varía sustancialmente según la región. En la Región de las Américas de la OMS, los actos violentos causan casi un tercio de las muertes de varones adolescentes.

La violencia durante la adolescencia también acrecienta el riesgo de sufrir traumatismos, infecciones por el VIH y otras infecciones de transmisión sexual, problemas de salud mental, mal rendimiento y abandono escolares, embarazos precoces, problemas de salud reproductiva y enfermedades transmisibles y no transmisibles.

  • Consumo de alcohol y sustancias: En muchos países, el consumo de bebidas alcohólicas en la adolescencia suscita gran preocupación. En todo el mundo, más de una cuarta parte de las personas de entre 15 y 19 años —unos 155 millones de adolescentes—consumen alcohol. Se ha calculado que, en 2016, el 13,6% de los adolescentes de entre 15 y 19 años —en mayor medida, hombres— consumían ocasionalmente grandes cantidades de alcohol.

Entre las sustancias psicoactivas, la que más consumen los jóvenes es el cáñamo (cannabis): alrededor de un 4,7% de los adolescentes de 15 y 16 años lo hicieron al menos una vez en 2018. (1) El consumo de alcohol y drogas en la infancia y la adolescencia causa alteraciones neurocognitivas que, en etapas posteriores de la vida, pueden generar problemas conductuales, emocionales, sociales y académicos.

  • Consumo de tabaco: La inmensa mayoría de las personas que consumen tabaco hoy empezaron a hacerlo en la adolescencia. Se ha calculado que, en 2018, al menos uno de cada 10 adolescentes de entre 13 y 15 años consumía tabaco, si bien en algunos lugares esta proporción era mucho mayor. (2) Los cigarrillos electrónicos son especialmente peligrosos para los niños y los adolescentes. La nicotina es una sustancia muy adictiva y es importante tener en cuenta que el cerebro sigue desarrollándose hasta mediada la veintena.
  • Salud mental: La depresión y la ansiedad son algunas de las principales causas de enfermedad y discapacidad (en inglés) en los adolescentes, y un número considerable de defunciones entre los adolescentes de 15 a 19 años son por suicidio. Aunque la mitad de los trastornos mentales en la edad adulta ya han empezado a los 14 años, en su mayoría ni se detectan, ni se tratan.

Entre los muchos factores que inciden en el bienestar y la salud mental de los adolescentes, la violencia, la pobreza, la estigmatización, la exclusión y la vida en entornos frágiles o de crisis humanitaria pueden aumentar el riesgo de que surjan problemas de salud mental.

  • Sobrepeso: En todo el mundo, más de uno de cada seis adolescentes de 10 a 19 años tenía, en 2016, sobrepeso, (7) con una prevalencia variable en función de la región de la OMS: mientras que en la Región de Asia Sudoriental esta prevalencia era inferior al 10%, en la de las Américas superaba el 30%.
  • Nutrición: Muchos niños y niñas de países en desarrollo sufren desnutrición cuando llegan a la adolescencia, lo que los hace más propensos a contraer enfermedades y a fallecer a una edad temprana.

En 2021, la anemia ferropénica figuraba entre las causas principales de años de vida saludables perdidos a causa de la discapacidad entre los adolescentes de 10 a 19 años. La administración de suplementos de hierro y ácido fólico puede ayudar a mejorar la salud de los adolescentes.

En las zonas donde suele haber helmintos intestinales, como los anquilostomas, se recomienda administrar regularmente a los adolescentes un tratamiento vermífugo a fin de prevenir las deficiencias de micronutrientes (como el hierro). /PUNTOporPUNTO

Documento Íntegro a Continuación:

Las 10 principales causas de muerte

Recibe nuestro boletín informativo, suscríbete usando el formulario