Al menos 11 millones de niños y niñas corren el riesgo de no desarrollar las habilidades necesarias para el resto de su vida, ante el recorte al presupuesto del próximo año para la Atención de la Primera Infancia.
No hay ni siquiera un peso asignado para establecer una instancia dentro de la SEP, encargada de coordinar la Estrategia Nacional de Atención a la Primera Infancia que debe ser presentada la siguiente semana y que, al menos, necesitaría 25 millones de pesos para operar, según cálculos de organizaciones de la sociedad civil.
- Con ello, se dejarían descobijados a 2 millones 169 mil 955 niños menores de un año y 8 millones 792 mil 330 de entre uno y cuatro años, que durante esta etapa de su vida desarrollan conexiones neuronales, inteligencia, personalidad y creatividad.
- El próximo año, sin embargo, en el proyecto de presupuesto se plantea un recorte de 5.7% para el desarrollo integral en la primera infancia, al pasar de 3 mil 64 millones de pesos que se asignaron este año a 2 mil 992 millones de pesos para 2020.
“Las consecuencias son súper delicadas porque tienen que ver con todo el desarrollo posterior de las personas. Aquí sí ya es jugar con fuego, es pegarle a lo muy, muy elemental, permitiendo que se perpetúe el ciclo de la pobreza y que sigamos teniendo bajos resultados educativos; es una gran incongruencia y un descuido histórico”, advirtió David Calderón, presidente de la organización Mexicanos Primero.
Organismos como el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y organizaciones como la Red Nacional por los Derechos de la Infancia (Redim) han señalado que las desigualdades en el acceso a oportunidades para el desarrollo de la primera infancia abren brechas prácticamente imposibles de cerrar.
Esto porque quien inicia la educación preescolar sin haber tenido una atención a su desarrollo integral en los primeros tres años de vida, enfrentará grandes desafíos durante su trayectoria educativa.
Pese a las advertencias, el recorte propuesto para 2020 a educación básica, en términos reales es de 11% y sólo viene a agravar la situación que se ha presentado desde la administración pasada, pues entre 2012 y 2018 el presupuesto autorizado a educación básica tuvo un recorte de 23 mil millones de pesos, que también toca a la primera infancia.
“Es una tendencia que ya acumulada ha venido quitándole recursos a temas de primera infancia y es chocante porque justamente esto contrasta entre lo que implica el cambio a la Constitución que fue aprobado el 15 de mayo, en donde como uno de los transitorios se manda la creación de una Estrategia Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia, pero en lugar de ponerle dinero, le recortan lo que ya de por sí era insuficiente, del año anterior”, reprochó Calderón./EXCELSIOR-PUNTOporPUNTO