Mientras que las colecciones de arte popular del Estado padecen descuido y abandono, como el Acervo de Arte Indígena del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), resguardado en un edificio tomado por la comunidad otomí desde octubre del 2020, la Secretaría de Cultura (SC) desembolsó una suma millonaria en un desfile de moda en nombre de los artesanos de México.
- En noviembre del año pasado, la dependencia que encabeza Alejandra Frausto otorgó 5 millones 883 mil pesos en contratos, todos por adjudicación directa, para llevar a cabo Original, un evento de cuatro días en el Complejo Cultural Los Pinos cuyo atractivo principal fue una serie de pasarelas con prendas provenientes de diversas comunidades.
Descrito por la SC como un espacio de encuentro que reunió a maestros artesanos, diseñadores tradicionales y empresas nacionales e internacionales, la iniciativa requirió de dicha cantidad de recursos mayormente en su componente de espectáculo, asemejando las producciones de las casas de moda.
- Llevado a cabo del 18 al 21 de noviembre, Original contó con un programa de pasarelas, un salón de negocios y una sala de exhibición y venta, además de la realización de foros, con la intención de beneficiar a los artesanos presentes.
- No obstante, contrario a las directrices de austeridad del Gobierno Federal, la mayoría de una treintena de contratos consultados por REFORMA en Compranet se utilizó para la producción del evento de cuatro días, especialmente para las pasarelas.
Desde su apertura al público, Los Pinos se ha convertido en uno de los espacios de la SC con mayor programación constante, entre presentaciones artísticas, venta de arte popular y gráfica, y talleres para el público en general, todo en infraestructura ya existente.
Además, la Secretaría ya contaba con un contrato de servicios de arrendamiento, mobiliario, equipo y contratación de personal para sus eventos especiales de 2021, por un monto de 111 millones 960 mil pesos, con un calendario que ya incluía a Original, por lo que el gasto de 5 millones 883 mil pesos salió de lo programado.
- Tan sólo el proyecto ejecutivo del evento, a cargo de la empresa En Línea Cubo, tuvo un costo de 472 mil pesos, a lo que hay que añadir pagos a otros proveedores por el proyecto ejecutivo del concepto gráfico, que costó 350 mil pesos; la energización y montaje, por 157 mil pesos; la planeación y calendarización, por 209 mil pesos; la integración de expedientes, por 125 mil pesos, y la coordinación de actividades artísticas, por 236 mil pesos.
La SC no escatimó tampoco en la imagen de sus pasarelas, adjudicada de manera directa al artista Demian Flores, quien recibió la encomienda de hacer un camino «que deberá ser el cuerpo y cabeza de una serpiente, como representación del uso de dicha imagen en artesanías y textiles elaborados por las comunidades de los pueblos originarios», según se detalla en el contrato.
Por sus servicios de diseño gráfico, que se mostró en la pasarela de la Casa Miguel Alemán, Flores recibió 209 mil 790 pesos.
Otro encargo artístico ex profeso para el evento fue para el músico Juan Pablo Villa, a quien se le pidió musicalizar con la composición de «una obertura y final, considerando los géneros tradicionales de música mexicana, desarrollo de las pasarelas, ambientación de acuerdo a cada tiempo de la pasarela».
El contrato para Villa estipula un pago de 220 mil 279 pesos.
Para el evento, la SC incluso contrató servicios que duplican funciones que sus propias áreas ya llevan a cabo, como el manejo de las redes sociales del evento, por 41 mil 958 pesos, y la elaboración de comunicados de prensa y estrategia de medios, por 131 mil 118 pesos, ambas tareas que ya realiza la Dirección General de Comunicación Social.
- Entre la treintena de contratos, que asciende a 5 millones 883 mil pesos, también se incluye la curaduría de las piezas artesanales que se exhibieron, servicios especializados para el cuidado de las obras y sesiones de fotos con artesanos y modelos para el catálogo de Original.
- Todo el material gráfico y de video, no obstante, no ha sido usado en su totalidad para promover la iniciativa, como lo muestra la cuenta oficial de Original México en Instagram, que dejó de actualizarse en diciembre del año pasado, u otra llamada Catálogo Original, que no ha sido verificada y apenas cuenta con 10 publicaciones.
Ninguno de los contratos, además, se otorgó a través de una licitación pública, sino que se decidió adjudicar de manera directa cada uno de ellos.
«En el mercado existen diversas ofertas de servicios similares al requerido, sin embargo, en dichos servicios se puede observar que tanto el objeto como el alcance de los servicios, son completamente distintos a los requeridos por las áreas requirentes, de la Secretaría de Cultura», se lee en la justificación para saltarse las licitaciones.
- No obstante, salvo por lo realizado por artistas y por especialistas en arte popular, existen servicios análogos en el mercado mexicano para todo lo que tiene que ver con la producción de eventos como Original.
- En lo que respecta al pago de modelos que participaron en el desfile, Compranet no arroja contratos específicos por dicho servicio.
El evento, de acuerdo con lo estipulado en los canales oficiales de la SC, se realizará de manera anual.
ALEJANDRA FRAUSTO GASTA EN ¡OLLAS DE COCINA!
A pesar de que la Secretaría de Cultura adeuda pagos a músicos, cineastas, actrices y demás creativos en la recta final del año, sí tiene dinero para hacer compras que nada tienen que ver con su misión en el gobierno federal.
- El medio EMEEQUIS, quien posee copia de un contrato elaborado en la Secretaría de Estado que encabeza Alejandra Frausto, gastó miles de pesos para comprar casi mil ollas de aluminio –922 unidades– para hacer guisados.
Se trata del contrato 2021-A-A-NAC-A-C-48-410-00002692 que tuvo un costo, con cargo al erario público, de 337 mil 476 pesos. El objetivo: regalar esos enseres domésticos como parte del festejo del Día de las Madres.
- La empresa ganadora de ese contrato se llama Innovación Milenium, S.A. de C.V., cuyo giro comercial no es la venta de objetos de cocina, sino servicios en materia de tecnologías de la información y la venta de objetos de cómputo, como impresoras, cartuchos con tinta, computadoras y teclados, según su propia página de internet.
- Sin embargo, en el contrato la empresa asegura que también se dedica al “comercio al por menor de enseres domésticos”, lo que contradice a su propia página de internet. En el caso de proporcionar información falsa se haría acreedora a una inhabilitación por parte de la Secretaría de la Función Pública, de acuerdo al Artículo 60 de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público (LAASSP).
A pesar de la inconsistencia en el giro mercantil de Innovación Milenium S.A. de C.V., la Secretaría de Cultura federal le entregó el contrato por adjudicación directa, es decir, la empresa no tuvo que competir con otra compañía ni comprobar que ofrecía el mejor producto al mejor precio.
UNA EMPRESA BAJO SOSPECHA
Pero las irregularidades no terminan ahí. Innovación Milenium S.A. de C.V. no tiene directorio en internet o teléfono activo. Y sus redes sociales, como Facebook, no tienen una publicación nueva desde 2013, algo raro en una empresa que se dedica a la tecnología o que es actual proveedora del gobierno federal.
- De acuerdo con el sitio oficial Compranet, su dirección está registrada en una casa precaria en la calle 2 Legión del Norte, colonia Ejército de Oriente, en la alcaldía Iztapalapa, pero su representante asentó en el contrato con la Secretaría de Hacienda que su dirección está en una casa en la calle Anáhuac en la colonia Roma Sur, alcaldía Cuauhtémoc.
- La casa de la colonia Roma, sin embargo, luce abandonada. EMEEQUIS acudió en tres ocasiones distintas y nadie abrió. Hay publicidad vieja tirada en el piso, hojas secas en la entrada y los vecinos dicen no conocer quién vive en el número 92.
El sitio de internet QuiénEsQuién.Wiki, de la organización PODER, ubica que Innovación Milenium S.A. de C.V. ha obtenido tres contratos en el paso con el gobierno federal: uno en 2010 y dos en 2014, todos relacionados con cómputo y enseres de oficina.
Ninguno por equipo de cocina. Y menos por cientos de ollas “horno milagro” con tapa de aluminio y tapa de cristal./Agencias-PUNTOporPUNTO
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