Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador colocó el rescate de Petróleos Mexicanos (Pemex) como una de las prioridades de su gobierno, la compañía sigue arrastrando una pesada carga de deuda.
- La petrolera ha conseguido impulsar la producción de hidrocarburos, pero analistas y calificadoras siguen viendo problemas con la estrategia de negocios. Lo anterior se suma a la incertidumbre sobre lo que pasará con el respaldo a la compañía tras el cambio de gobierno.
- El Pemex que López Obrador recibió de la administración previa tenía una producción a la baja y una deuda financiera al alza. En el primer año de su sexenio, logró una reducción que se frenó con la irrupción de la pandemia en 2020 y 2021, para volver a bajar al año siguiente.
Sin embargo, la deuda de corto plazo ha sido ‘el dolor de cabeza’ constante para la petrolera y en más de una ocasión le ha llevado a recurrir al gobierno para poder cumplir sus obligaciones.
Al cierre de septiembre, este rubro tuvo un crecimiento de 51.9% anual a 31,436 millones de dólares, el monto más elevado para un periodo similar en al menos una década, según los reportes financieros de Pemex.
Además, en 2024 tiene que enfrentar vencimientos por 10,900 millones de dólares, que también representan la cifra más alta a pagar en los siguientes 10 años.
Uno de los motivos que mantuvieron a la deuda de corto plazo como ‘piedra en el zapato’ fue el cambio en la estrategia de financiamiento durante la actual administración para reducir la necesidad de recurrir al mercado de bonos para pagar los vencimientos y en su lugar buscar líneas de crédito bancarias.
- Esta alternativa ha expuesto a Pemex al riesgo de refinanciamiento con tasas que se mantienen elevadas a nivel global en el corto plazo, comentó el director de Analítica de Datos en el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Víctor Gómez Ayala.
- En octubre, la compañía dijo a analistas que estaba renegociando un combo de líneas de crédito por 9,500 millones de dólares con bancos y hace unos días informó que logró renovar un monto de 8,300 millones.
El economista comentó que el diferencial entre lo que Pemex pretendía acordar y lo que logró sugiere que tendrá que salir a buscar otras fuentes de financiamiento, y aunque no está claro cuál será, es probable que haya un proceso de negociación adicional de líneas revolventes y en segundo lugar, una emisión de deuda.
Aunado al entorno de tasas de interés elevadas, el grado de inversión que perdió la empresa desde 2020 implica que acudir a los mercados a emitir bonos elevará el costo financiero a futuro, dijo previamente Héctor Villareal, académico de Tecnológico del Monterrey.
- En enero, por ejemplo, Pemex emitió 2,000 millones de dólares en bonos a 10 años a una tasa que habría sido de 10.37%, casi el doble de las emisiones del gobierno federal al mismo plazo y de la tasa a la que originalmente se colocaron los bonos.
- Por ahora, se prevé que la mayor parte de los vencimientos puedan cubrirse con la transferencia de capital por 145,000 millones de pesos (8,500 millones de dólares) que el gobierno dará a Pemex, así como la reducción de la carga fiscal.
- Aunque este apoyo, incluido en el Presupuesto de Egresos 2024, fue visto positivamente por instituciones como Bank of America Securities y más recientemente por Fitch Ratings, hay inquietudes sobre el espacio o la voluntad que tendrá la siguiente administración federal para mantener un nivel similar de respaldo a la estatal.
El IMCO estima que entre aportaciones de capital y la reducción del Derecho de Utilidad Compartida (DUC), de 65% a 30% a lo largo del sexenio, el gobierno ha apoyado a Pemex con 1.32 billones de pesos de enero de 2019 a junio de 2023, lo que abona a las presiones sobre las finanzas públicas.
“Puedes no cobrarle impuestos a Pemex, pero vas a abrir un boquete en las finanzas públicas y vas a quedarte sin renta petrolera. En las condiciones actuales, parecería una locura seguirle reduciendo la carga”, dijo Carlos Ramírez, consultor económico y político de Integralia, en una entrevista previa.
Otro año como la petrolera más endeudada del mundo
El pasado lunes 18 de diciembre se dio a conocer que la paraestatal renovó sus líneas de crédito bancario, con valor de 8.3 millones de dólares, como parte de su estrategia para hacer frente a sus obligaciones de pago que se le avecinan en el 2024, año en que se le vencen 10.9 millones de dólares de deuda en bonos.
- Los bancos que lideran la renovación serían Bank of America, Bank of China, BBVA, Citi, JP Morgan, Mizuho, Scotiabank y SMBC, reporta Bloomberg Línea.
- En total, Pemex tendrá que arreglárselas con una deuda vencida de 16,400 millones de dólares en el próximo año, considerando obligaciones en moneda nacional y extranjera.
Además de la renovación de créditos bancarios, la petrolera ya “amarró” la inyección presupuestaria de 145 mil millones de pesos por parte del gobierno federal por medio de la aprobación de la Ley de Ingresos de la Federación para el ejercicio fiscal de 2024. En la que, aparte de este desembolso, se dicta la disminución de 40 a 30 porciento en la tasa de utilidad compartida; es decir, el porcentaje que Pemex tiene que pagar a la federación por cada barril producido.
Aun con lo anterior, las deudas y obligaciones de Pemex se perfilan como un riesgo principal para el marco fiscal del 2024. Víctor Gómez Ayala, director de analítica de datos del IMCO, dice en una declaración recogida por Expansión:
- No necesariamente tiene que salir mal, pero la gestión del pago de los vencimientos va a ser un tema de tensión en los próximos meses y lo vamos a ver en las tasas. Lo ideal sería que la administración saliente deje un terreno sólido para los que lleguen, pero también vendrá una importante curva de aprendizaje de estos últimos.
- Dentro de la combinación de factores que han provocado los muy marcados problemas y deficiencias de Pemex, encontramos fenómenos recientes, pero hay otros que se vienen cocinando desde la década de los 70.
- En un artículo publicado en octubre del presente año, The Economist rastrea el inicio de la decadencia de la petrolera en el descubrimiento del yacimiento de Cantarell, en el golfo de México. Con este suceso, Pemex se convirtió en el motor de la economía mexicana, pero el poder federal la “ordeñó hasta la muerte“, dice el analista Jorge Castañeda.
Administraciones posteriores le impondrían impuestos a tazas desorbitantes, limitando su capacidad de invertir. Además, se tomaron decisiones que no siempre llevaban una perspectiva de negocios. Como resultado, Pemex nunca emprendió apropiadamente la exploración en busca de gas natural, y sus operaciones petroquímicas se han visto subdesarrolladas en el panorama internacional.
“Patea” pago de deudas hacia la siguiente administración
El reciente refinanciamiento de deudas por 8.3 mil millones de dólares que anunció Pemex, no resuelve el problema de los pasivos y solo hereda el problema a la siguiente administración, dijo Gabriela Siller, directora de análisis de Grupo Financiero Base.
“Con el refinanciamiento solamente están aplazando el pago hasta 2025, que implica que será la siguiente administración la que tendrá que enfrentar el pago de deuda”, consideró la experta.
- También señaló que Pemex no dio a conocer si la tasa de interés del refinanciamiento fue igual o mayor que la emisión inicial, además de que no todos los bancos que estuvieron en la primera emisión habrían aceptado el refinanciamiento.
- Pemex dio a conocer que el 5 de diciembre concluyó la renovación de sus líneas de crédito sindicadas de su filial PMI Trading DAC, con la participación de 30 bancos.
- De acuerdo con el comunicado, el monto de las líneas de crédito renovadas es de 1.8 mil millones de dólares con vencimiento en 2024 y 6.5 mil millones de dólares con vencimiento en 2025.
“Pemex es una de las petroleras más endeudadas a nivel global y su situación financiera no se va a resolver hasta que se modifique el modelo de negocio”, consideró la especialista.
- Opinó que una empresa privada que tuviera una situación financiera similar a la de Pemex, la solución sería la venta de activos no estratégicos para el pago de deuda y hacer más delgada la organización para reducir costos operativos.
- “De seguir con el modelo actual, Pemex seguirá siendo un lastre para las finanzas públicas de México y un riesgo para la calificación crediticia de la deuda soberana de México”, añadió Siller.
6 años en ‘quiebra técnica’
- A pesar de la promesa del presidente de salvar a Pemex y los recursos masivos que recibió del gobierno, la compañía petrolera se encuentra en “quiebra técnica”, con un patrimonio negativo de un billón 895 mil millones de pesos para fines de 2022.
El año pasado, los activos de Pemex ascendieron a 2 billones 406 mil millones de pesos, mientras que los pasivos fueron 4 billones 301 mil millones de pesos.
- De acuerdo con el estudio “El empobrecimiento de las empresas públicas” realizado por México Evalúa, han pasado 6 años, desde 2017, que las obligaciones financieras de la empresa han engullido los activos de la empresa.
Esto significa que la deuda de la petrolera es 1,8 veces el valor de sus activos, lo que no permite que a la compañía le vaya bien, mostró el análisis.
- La producción de crudo promedia 1.621.000 barriles diarios en 2022, teniendo en cuenta socios; su tasa de utilización de la capacidad de refinación es inferior al 50%, en comparación con el promedio del 90% en los Estados Unidos, con una producción de fueloil (combustóleo) en aumento.
- Jorge Cano, investigador del Programa de Gasto Público y Rendición de Cuentas de México Evalúa, dijo que a pesar de que rescatar a Pemex y mejorar su posición financiera es una de las metas de esta administración, aun con la transferencia de un millón de dólares por 772 mil millones de pesos entre 2019 y 2022, no se han logrado los resultados esperados.
“Pese a todas esas transferencias, la deuda financiera de la petrolera solo ha disminuido 5.9 por ciento o 270 mil millones de pesos (…) Pemex no representa riqueza para el país, sino una carga para las finanzas públicas”.
- “Esa limitada disminución de la deuda frente a lo que se le ha otorgado de transferencias financieras se debe a que la petrolera sigue teniendo pérdidas operativas, es decir, sus ingresos son menores que sus egresos, pero también a que las pensiones siguen presionando fuertemente los pasivos de la empresa”, apuntó.
Cano enfatiza que la complicada situación de Pemex no es solo resultado de su gestión bajo este gobierno, sino, sino desde anteriores, resultado del régimen fiscal en el que opera.
- Sin embargo, en lo que va de su gestión, Pemex ha registrado diversas exenciones tributarias, entre las que destacan el Derecho de Utilidad Compartida para sus operaciones de manufactura. El último año que la petrolera tuvo capital positivo fue en 2013, 184 mil millones de pesos.
- En 2016, el gobierno federal reconoció las deudas laborales de Pemex luego de un cambio en las condiciones laborales, a las que Pemex contribuyó directamente, lo que resultó en activos por 772 mil millones.
- Al comparar a Petróleos Mexicanos (Pemex) con otras petroleras latinoamericanas con una alta dependencia de apoyo gubernamental, como lo son Petrobras (Brasil), Ecopetrol (Colombia), Empresa Nacional del Petróleo (Chile) y Petróleos del Perú (Perú), se puede observar que la empresa mexicana es la peor calificada por parte de las agencias Moody’s y Fitch Ratings.
Apenas la semana pasada, la agencia Fitch Ratings rebajó la calificación de Pemex a B+ con una perspectiva negativa, lo que la ubicó como la peor petrolera calificada de la región. En lo que va del sexenio, la calificación de Fitch a la petrolera mexicana ya bajó cuatro escalones.
Lastre para las finanzas
Luis Miguel Labardini, socio de Marcos y Asociados, Consultora Energética, consideró que el endeudamiento de Pemex se debe, principalmente, a que la paraestatal “encuentra sus verdaderos problemas en el sistema de refinación”.
“Ahí las inversiones se realizan para construir la nueva refinería y no en exploración y producción, dónde sí es rentable”, dijo el experto.
“Pemex no ha logrado reducir su perfil de vencimiento del siguiente año y, en general, su deuda financiera, debido a que tiene un perfil de empresa política. No es una compañía que busque la producción de valor, y esto se ve reflejado en su falta de liquidez con sus acreedores y proveedores”, dijo a su vez Abril Moreno, experta en el sector por la consultora Perceptia 21.
- El gobierno federal ha señalado que desde 2019 hasta el cierre de septiembre de 2023 ha apoyado a Pemex con 806 mil millones de pesos. No obstante, de ese total, 416 mil millones de pesos han ido al pago de deuda y 312 mil millones de pesos para la construcción de la refinería en Dos Bocas, Tabasco.
- Los expertos coinciden que esta situación de endeudamiento financiero ha recortado el margen de maniobra que Pemex tiene en su operatividad, y por eso también se observa un incremento de más de 100% en cuanto a la deuda con proveedores, los cuales incluso le han señalado en meses previos que Pemex debe apresurar los pagos.
Un riesgo más que debe considerar la empresa es que cada vez más las instituciones financieras observan los parámetros medioambientales sociales y de gobernanza, de acuerdo con Roxana Muñoz, analista de Moody’s.
“Si estos aspectos no mejoran en la compañía, el financiamiento que puede encontrar puede ser más costoso”, señaló la experta en octubre pasado.
Gabriela Siller explicó que la situación financiera de Pemex no se va a resolver hasta que se modifique el modelo de negocio.
- En el marco de esta renovación de las líneas de crédito de Pemex, ha trascendido que no todas las instituciones han retomado los créditos de Pemex, ante las donaciones de crudo a Cuba.
- Pero Pemex ha negado dicha situación, aunque las dudas aún continúan sobre los efectos de las transferencias de crudo a la isla, que incluso, el presidente AMLO confirmó semanas antes./Agencias-PUNTOporPUNTO