Las negociaciones de la Cumbre del Clima que se celebra en Madrid, conocida por las siglas COP25, avanzaban este jueves en medio de la “tensión”, como ha descrito la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. Porque, como ocurre en todas las citas de este tipo que organiza la ONU, los intereses contrapuestos de los países frenan el desarrollo de la negociación. De esta cumbre, considerada de transición, tenía dos objetivos fundamentales: uno más técnico y el otro más político.
Por un lado, se debe terminar de desarrollar el artículo del Acuerdo de París que hace referencia a los mercados de carbono. Mientras que la Unión Europea y otros países desarrollados mantienen una posición dura para que los controles de esos mercados sean robustos, otros países —encabezados por Brasil, India y China— no comparten esa visión.
- Esta división de bloques es muy parecida a la que se mantiene con el otro objetivo de esta cumbre, el más político. Estas citas terminan con una “decisión” en la que se plasman las conclusiones y deberes para los próximos años. Y la intención de la ONU y del bloque europeo es que se urja en ese texto a los países a presentar planes de recorte de emisiones más ambiciosos a partir de 2020.
- Sin embargo, ese otro bloque de países en desarrollo aboga por retrasar ese momento. De hecho, India ya ha anunciado que no tiene intención de hacerlo hasta 2023. La ministra Ribera, sin citar a ningún país, ha acusado a alguno de los Estados que negocian en esta cumbre de utilizar como excusa la “letra pequeña” del pacto climático para avanzar de forma más lenta.
Los fondos para la adaptación también sobrevolaban el atasco de la COP25. “Entiendo las preocupaciones de los países en desarrollo sobre los costes que tendrá para ellos adaptarse al cambio climático y que deben ser apoyados por los países desarrollados”, ha señalado a EL PAÍS este jueves en tono conciliador el vicepresidente de la Comisión Europea para el Pacto Verde, Frans Timmermans. Pese a todas estas tensiones, Timmermans confía en que se alcance un acuerdo en la COP25. Eso sí, todas las señales apuntan a que la cumbre no se rematará este viernes, como estaba previsto oficialmente, sino el sábado; salvo sorpresa./EL PAÍS-PUNTOporPUNTO