Acapulco, amaneció el día miércoles 25 de octubre devastado tras el paso del huracán Otis. Gran parte de los habitantes, así como visitantes, continúan aislados, incomunicados, sin energía eléctrica.
- El emblemático puerto tiene por delante un largo camino para levantarse, entre un cúmulo de dudas por la extinción de fideicomisos que estaban destinados para atender este tipo de desastres.
- Asfixiado por la violencia y la inseguridad en los últimos años y con signos de abandono oficial, el huracán le asestó un golpe del que será difícil levantarse sin dificultad.
- Palmeras, techos, cableado tirado por las calles, mezclados entre agua y lodo se podía apreciar en la Costera Miguel Alemán mientras se veía a turistas con maletas deambular de un lado a otro.
El hotel Princess, uno de los emblemas de Acapulco, lucía destruído con varios de sus pisos completamente inutilizables.
“Acaba de pasar lo más cañón, literal estuve en el ojo del huracán. Me acaban de rescatar, se fue la luz y los vientos estuvieron a más de 260 kilómetros. Me escondí en el clóset y comencé a rezar, el pánico se apoderó de mi que lo único que pedía era otra oportunidad. (…) Está completamente destruido, en mi cuarto se cayó el techo, los vidrios se quebraron, los pisos estaban inundados, sin luz”, narró una turista que se encontraba hospedada en el hotel Princess tras el paso de Otis.
#México #Acapulco «Está devastado»: Una turista narra los momentos de terror que vivió dentro del icónico Hotel Princess de la Zona Diamante del puerto, durante el paso del Huracán Otis. pic.twitter.com/5boZycKfNt
— Anonymous Hispano (@anonopshispano) October 25, 2023
Otis dejó una huella imborrable en Guerrero, por ser uno de los huracanes de rápida intensificación más grandes del mundo, dejando de lado al huracán Pauline, que azotó a Acapulco, siendo categoría 4, en 1997.
- Fue el primer huracán categoría 5 en tocar tierra en alguna costa del Pacífico Nororiental y su rápida intensificación lo convirtió en un fenómeno meteorológico sin precedentes en la región.
- Un caso similar ocurrió en 1992 con el huracán Andrew que azotó a Florida también siendo categoría 5.
La tragedia fue mayor ya que Otis tocó tierra en una ciudad con más de un millón de habitantes. En total, 2 millones de personas fueron las afectadas, contando a los habitantes de los municipios aledaños.
Especialistas meteorológicos además coincidieron en que ningún modelo de pronóstico pudo prever con anticipación que Otis crecería de intensidad tan aceleradamente.
“Entre los factores que dificultaron las predicciones precisas sobre la intensidad de Otis el martes se encuentran: hubo solo un vuelo de los Cazadores de Huracanes (con solo dos penetraciones) en Otis, y no se contó con un radar meteorológico Doppler, ya sea terrestre o desde vuelos de reconocimiento. Además, en los días previos a Otis, los modelos de pronóstico tuvieron dificultades para determinar si Otis tocaría tierra en absoluto. Algunos de los principales modelos mantuvieron a Otis en el mar durante días, lo cual coincide mucho más con el comportamiento típico de los huracanes en esta región en lugar de lo que realmente sucedió”, escribió al respecto la Universidad de Yale.
- Un motivo del crecimiento es que las aguas donde se desarrolló tenían temperaturas entre 30 y 31 grados centígrados cuando la temperatura mínima necesaria para su formación es de 26.5 grados centígrados.
- A la par de Otis, en el Pacífico se está desarrollando una nueva zona de baja presión, que se encuentra ubicada frente a la costa de Centroamérica pero que se desplaza hacia el sur del Golfo de Tehuantepec que podría impactar en las próximas horas de las costas de Chiapas hasta las de Guerrero.
De acuerdo con el sitio de noticias meteorológicas de la Universidad de Yale “Climate Connections”, en un artículo llamado “Escenario de pesadilla: Huracán Otis arrasa Acapulco”, escrito por Bob Henson y Jeff Maters, la intensificación rápida de Otis es extremadamente peligrosa porque deja a las personas con poco tiempo para prepararse.
Lamentablemente, alertan, escenarios como el de Acapulco, serán más recurrentes, por el calentamiento global.
“El factor clave en la rápida intensificación de Otis fue la presencia de una fuerte banda de vientos, conocida como una corriente en chorro (jet streak), incrustada en la corriente de aire de la corriente en chorro que fluía rápidamente al norte de Otis. Mientras Otis tomaba aire cálido y húmedo desde la superficie y lo elevaba en su pared del ojo, los fuertes vientos de esta corriente en chorro actuaron como un sistema de ventilación para el huracán. Este es un proceso similar a cuando se ventila un fuego”, explica el artículo.
Los científicos alertan que estos fenómenos serán cada vez más frecuentes, muestra de esto es que de los huracanes más poderosos que han tocado el Pacífico, dos de ellos ocurrieron este año: Lidia y Otis.
Habrá un antes y un después tras el paso de Otis por las costas de Guerrero.
El papel de las autoridades
El presidente Andrés Manuel López Obrador y su Gabinete de Seguridad se trasladaron por carretera al estado de Guerrero tras el paso del huracán Otis por la costa de Acapulco. Informando que por el momento no ha recibido datos de personas fallecidas y que se buscará reabrir las carreteras lo más antes posible.
- Tras ofrecer su conferencia mañanera el día de ayer en Palacio Nacional, donde habló del impacto de Otis y dijo que era posible que asistiera a la zona damnificada, López Obrador salió del recinto pasadas las 10:00 de la mañana a bordo de una de las camionetas Suburban que utiliza para viajar por carretera.
Cerca de las 3:00 de la tarde, el primer mandatario y la caravana de su equipo de colaboradores fueron vistos cargando gasolina mientras cruzaban el estado de Morelos para acercarse a Acapulco.
Vamos allá ahora, eso es lo que les puedo decir”, respondió a reporteros del medio local Central de Noticias MX.
Al ser cuestionado sobre si se había confirmado la pérdida de vidas humanas en la zona de Acapulco o la Costa Grande por el impacto del huracán, que ayer por la tarde se degradó hasta tormenta tropical, López Obrador se limitó a responder que todavía no tenía el reporte de fallecidos, puesto que la región estaba incomunicada desde la madrugada.
También se refirió al cierre de la autopista y la carretera libre de peaje México-Acapulco por los derrumbes y daños que dejó Otis.
“Vamos a dejar ya maquinaria. Trae el Ejército maquinaria, Comunicaciones y Transportes. Vamos a buscar que se reabra lo más pronto posible la autopista”, refirió sobre los esfuerzos para volver a comunicar la zona.
- Acompañando al presidente López Obrador se vio al general Luis Cresencio Sandoval y al almirante José Rafael Ojeda, secretarios de Defensa Nacional y Marina. Así como a Jorge Nuño, secretario de Infraestructura, a quien se le vio dándole instrucciones sobre cómo proceder con el despeje de vías.
- Más tarde en el municipio de Juan R. Escudero, pasando Chilpancingo, una funcionaria de Presidencia dijo que con dirección a Acapulco el camino estaba completamente cerrado y que comenzarían a liberar la vialidad rumbo a la Ciudad de México.
“Está totalmente cerrado, no hay manera de pasar, solo que sea con maquinaria”, dijo.
Más de la devastación. Acapulco amaneció sin luz, red telefónica ni internet, tras #Otis, como Huracán Categoría 5.
También devastador el silencio del Gobierno, 12 horas después del impacto del meteoro, sin un solo balance oficial pic.twitter.com/wmdBkOefb1
— Joaquín López-Dóriga (@lopezdoriga) October 25, 2023
Incompetencia del Estado mexicano frente a la devastación dejada por Otis
De acuerdo con un análisis de Código Magenta, la imagen del presidente Andrés Manuel López Obrador, atascado en un vehículo militar en una carretera deslavada en medio de Guerrero, rodeado del secretario de la Defensa, el secretario de Marina y la secretaria de Seguridad Ciudadana, representa la metáfora más adecuada para describir la incompetencia del Estado mexicano frente a la devastación que ha dejado a su paso el huracán Otis.
La estimación que hizo la directora federal de Protección Civil, Laura Velázquez. El huracán de categoría 5, el de mayor rango en la escala Saffir-Simpson, es el más severo que haya tocado alguna costa mexicana del Pacífico en la historia reciente.
El huracán Otis ha puesto de relieve la capacidad del Estado mexicano para responder a un desastre natural de esta magnitud. Hasta la noche del miércoles, no había ninguna instancia oficial que pudiera hacer un recuento medianamente confiable de los daños humanitarios y materiales que han dejado la lluvia y los vientos de Otis. Ni el gobierno federal, ni el gobierno de Guerrero, ni Protección Civil han podido medir el impacto de la destrucción. “No tenemos datos”, admitió el presidente Andrés Manuel López Obrador.
- Evelyn Salgado, la gobernadora del estado, tardó horas en emitir un primer pronunciamiento. Se presume que no se encontraba en Guerrero. Después de 19 horas de que el huracán tocó tierra, no había ningún registro documental que comprobara la presencia de Salgado en la entidad.
Otra estampa del fracaso institucional: los reporteros de Milenio llegaron primero a Acapulco que la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde. Ante esta situación, emergió un cuestionamiento natural: ¿Por qué el presidente y su gabinete no utilizaron un helicóptero para trasladarse a la zona afectada? Optaron por una alternativa: trasladarse por tierra desde la Ciudad de México a través de una carretera que las autoridades sabían de antemano que estaba bloqueada por los deslaves.
- El gobierno mexicano no estaba preparado para reaccionar a Otis. “Ninguno de los modelos matemáticos había advertido que tendríamos este huracán categoría 5”, dijo Laura Velázquez, titular de Protección Civil. Esta es una verdad a medias.
La administración de Andrés Manuel López Obrador tuvo más de veinte horas para anticipar una respuesta al desastre. El martes 24 de octubre, a las 4 de la mañana, los servicios meteorológicos tuvieron conocimiento de que un huracán tocaría las costas de Guerrero.
El martes a las 3 de la tarde se actualizó la información: el huracán tocaría tierra como un fenómeno categoría 4. A las seis de la tarde del mismo día, las autoridades elevaron el pronóstico: estimaron que Otis alcanzaría la categoría 5. Seis horas después, a la media noche del miércoles 25 de octubre, el huracán tocó tierra.
- Inevitablemente, la pobre respuesta del gobierno mexicano puso al centro de la conversación el debate sobre la desaparición del Fonden. En el 2020, Morena aprobó la extinción de 109 fideicomisos del gobierno federal, entre ellos el fondo destinado a financiar la reacción y reconstrucción a desastres naturales.
- La administración de Andrés Manuel López Obrador creó una partida paralela de 17 mil millones de pesos para sustituir al Fonden. Sin embargo, estos recursos no están sujetos a las reglas del fideicomiso y pueden ser utilizados discrecionalmente por el gobierno federal. Esto también implica que los remanentes de la partida no se son reinvertidos.
De acuerdo a una solicitud de transparencia que la Secretaría de Hacienda respondió al analista Juan Ortiz, el 40 por ciento de los recursos del Fonden se destinó al financiamiento de la construcción del Tren Maya.
La Secretaría de Hacienda reaccionó tarde para intentar corregir esta narrativa. El miércoles en la noche, la dependencia publicó un comunicado en el que informó que se activó un “Bono para Catástrofes” que ofrece una cobertura de hasta 485 millones de dólares. Agregó que el gobierno cuenta con una Estrategia de Gestión Integral de Riesgos que incluye el acceso a financiamiento inmediato por 17 mil millones de pesos del Ramo 23 del presupuesto federal.
No obstante, en el fondo, la realidad es que el gobierno mexicano seguía sin tener datos claros sobre las víctimas de Otis casi 24 horas después de que el huracán tocó tierra. Un fracaso con costos altísimos que ha exhibido, con creces, las limitaciones de la administración de Andrés Manuel López Obrador.
¿Dónde quedaron los planes DN-III y GN-A?
Con un estado de fuerza de 8 mil 391 efectivos el Ejército y la Fuerza Aérea, así como personal de la Guardia Nacional activaron los planes DN-III-E y GN-A en apoyo de la población afectada por el huracán Otis.
- Se trata de 7 mil 671 elementos de las Fuerzas Armadas y 720 de la Guardia Nacional, además de seis aeronaves y seis helicópteros. También se trasladaron vía terrestre 3 mil despensas y 3 mil litros de agua embotellada del Centro Estratégico de Acopio de la Base Aérea Militar Número 1 ubicada en Santa Lucía, Estado de México para ser distribuidas a la población de los municipios afectados.
- El coordinador de los senadores del PRI, Manuel Añorve Baños, se solidarizó con los habitantes del Puerto de Acapulco por el devastador paso del huracán Otis y lamentó la falta de recursos disponibles para estados y municipios que se requieren para enfrentar los daños causados por fenómenos naturales con la desaparición del Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales (Fonden) por parte del Gobierno federal.
“Sin duda alguna, la desaparición del Fonden es un lastre más en el largo camino de decadencias que ha promovido el Gobierno de Morena”, condenó el legislador al asegurar que esta mala decisión ha dejado desamparada la atención de desastres naturales.
El legislador guerrerense señaló que este tema no debe subestimarse, por lo que destacó la importancia del Fonden como un fondo crucial para hacer frente a las necesidades derivadas de fenómenos hidrometeorológicos y otros desastres, como terremotos.
“La desaparición del Fonden dejó a estados y municipios en una situación precaria frente a los fenómenos hidrometeorológicos, y la población se encuentra desamparada sin la posibilidad de recibir apoyo adecuado en momentos de necesidad”.
- Gran parte de Acapulco, con cerca de 780 mil habitantes, sigue sin energía eléctrica y las comunicaciones son inestables por el paso de Otis, refirió el legislador al comentar que es lamentable que a ello se suma que Guerrero es uno de los estados más pobres y que padece altos índices de inseguridad.
“Los guerrerenses no nos doblamos ante las adversidades”, indicó al recordar que, gracias al Fonden, en el sismo de 2017 se pudo llevar a cabo la reconstrucción de Chiapas, Oaxaca, Morelos y municipios de Guerrero que resultaron afectados, especialmente aquellos cercanos a Puebla.
Sin embargo, dijo que hoy la situación se complica con la desaparición del Fonden, porque los apoyos a estados y municipios se redujeron, lo que afecta directamente a la población.
“No podemos permitir que decisiones políticas dejen en vulnerabilidad a nuestros ciudadanos; por ello, es necesario exhortar a las autoridades competentes a que se garantice la pronta respuesta y apoyo a las comunidades afectadas por desastres naturales. Es nuestro deber moral y ético asegurar el bienestar y seguridad de todos los mexicanos”.
Huracán ‘Otis’ deja 27 personas fallecidas y 4 desaparecidas
El huracán Otis dejó 27 personas fallecidas y cuatro desaparecidas en el estado de Guerrero, indicó esta mañana la secretaria de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez.
- López Obrador explicó minutos más tarde que las muertes fueron registradas “básicamente” en el municipio de Acapulco, según el informe brindado por los gobiernos local y estatal.
- “Eso es lo que más duele porque lo material se puede atender y lo vamos a hacer con mucha responsabilidad, un pésame a todos los familiares”, comentó.
- De acuerdo con el mandatario, las cuatro personas desaparecidas son elementos de la Secretaría de Marina (Semar). Uno de ellos ya fue hallado sin vida, según un reporte que recibió el miércoles por la noche.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó que con la puesta en marcha del Plan DN-III en el estado de Guerrero se realizará un despliegue de 8 mil 391 efectivos del Ejército para cooperar en las labores humanitarias tras el paso de ‘Otis’.
Serán 750 elementos de la Guardia Nacional y 7mil 671 de la Sedena los que se dirigirán al estado en los municipios de Chilpancingo, General Heliodoro Castillo, San Miguel Totolapan, Ajuchitlán del Progreso, Petatlán, Tecpan de Galeana, Atoyac de Álvarez, Benito Juárez, Coyuca de Benítez y Acapulco./Agencias-PUNTOporPUNTO