Será relevante identificar si los mexicanos que salieron de la pobreza en México entre el 2018 y el 2022 llegaron a la clase vulnerable o si lograron avanzar hacia una clase media más consolidada, advirtió el Jefe de Protección Social y Salud del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Pablo Ibarrarán.
- Esto permitirá estructurar políticas públicas de atención, pues si quedaron en una posición vulnerable, aún se encuentran en riesgo de volver a caer en la pobreza, observó.
Precisó que de ser el caso que estén en una posición vulnerable, siguen expuestos a choques adversos como puede ser una nueva pandemia, un nuevo aumento de precios en los alimentos por la guerra de Rusia y Ucrania o un evento asociado al cambio climático como inundaciones, sequías o calor extremo.
- Si casi todos los que antes eran pobres, están ahora en una clase vulnerable, habrá que estar preparados para que no vuelvan a caer en pobreza ante cualquier choque. Hay que tener mecanismos para que cuando vengan esos choques, puedan apoyarles.
El también autor de la investigación titulada “Pobreza, vulnerabilidad y la clase media en América Latina”, del BID, precisó que tras los años de bonanza que vivió la región entre el 2000 y 2016, quedó claro que hay un grupo de personas que están entre la clase media y la pobreza.
- Son quienes tienen satisfechas sus necesidades básicas, pueden comprar una canasta alimentaria, pero por su fuente de ingreso, por el nivel de ingreso, o bien, por la estructura de su hogar, son susceptibles de caer de nuevo en pobreza ante cualquier choque.
- El experto subrayó que “ha sido una gran noticia el éxito del aumento gradual del salario mínimo y las transferencias sociales (de México)”. Éxito subrayado por la salida efectiva de estos 5.4 millones de personas de la pobreza absoluta.
- Puso de relieve que la teoría de economía más básica dice que al subir el salario mínimo, se encarece el empleo y las empresas limitan la generación de nuevas plazas, pero con los resultados difundidos por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política del Desarrollo Social, México queda como uno de los países que consiguieron fortalecer el ingreso con alzas graduales del salario mínimo sin alimentar el desempleo.
Tal como lo explicó en entrevista, en la citada investigación donde participó, establecen que pese a los extraordinarios avances en la reducción de la pobreza y la desigualdad logrados en América Latina en aquellos años, “la mayoría de quienes lograron salir de la pobreza pasó a integrar la clase vulnerable y aún se encontraba en riesgo sustancial de caer en la pobreza”.
Lujos por encima de necesidades básicas
Ibarrarán explicó que la clase media en los países de América Latina, suele tener un alto grado de movilidad, que está vinculada a la formalidad del empleo.
Incluso dentro de la clase media, hay un estrato de clase media consolidada, que es mucho menos inerme a choques de ingreso familiar, como son el desempleo de uno de los pilares económicos del hogar, una enfermedad discapacitante o incluso la muerte de alguno de los sostenes.
- Definió a las clases medias de América Latina, como el grupo de personas que tienen satisfechas sus necesidades básicas y además tienen acceso a algunos bienes y servicios que están encima de lo necesario como son servicios de alimentos, salud, cultura y esparcimiento.
- Cuentan con capacidad económica para contratar algún tipo de ayuda para llevar las actividades del hogar, pagar por servicios educativos del sector privado y pueden tener entre uno y dos automóviles.
- El experto observó que las clases medias de la región tienen patrones de conducta muy similares, pues aún cotizando en algún tipo de seguro de salud pública, prefieren pagar por servicios de medicina privada. Además es muy simbólico que suelen enviar a los hijos a escuela privada, por la percepción de que la calidad es mayor en estos servicios.
Este rasgo representa un contraste con las clases medias de economías avanzadas, pues en países como Estados Unidos, prefieren aprovechar los servicios públicos de educación, aún contando con ingresos que les permite ser de clase media consolidada o alta.
Resiliencia económica
El experto del BID detalló que la clase media en la región cuenta con cierta resiliencia económica, ahorro suficiente para que, si pierden el empleo puedan estar dos o tres meses viviendo al mismo nivel, sin que genere una tensión muy grande.
Agregó que tener acceso al sistema financiero formal es la diferencia entre la clase media y la más vulnerable.
- Las personas en este segmento de ingresos tienen acceso a servicios financieros formales como seguros y tarjetas de crédito que otorgan cierta flexibilidad para responder mejor a choques. Así, si hay un evento inesperado pueden recurrir a algún crédito y suavizar el impacto.
- Matizó que tener un microcrédito o un microseguro puede ser un riesgo cuando se otorgan irresponsablemente como fue el caso en Estados Unidos de los créditos hipotecarios subprime que se otorgaron sin garantías previo a la crisis del 2008.
- Si una persona tiene tarjetas de crédito, que no acarrean deuda de un mes a otro, ahí si podemos referirlas como herramientas que permiten a la familia gestionar mejor su consumo sin que se vuelva un lastre. Si sólo pagan el mínimo necesario, demuestra vulnerabilidad.
La cultura financiera y la educación, son también características de la clase media, resaltó.
La pobreza laboral en México se estanca
Cerca del 40% de los mexicanos siguen sin poder cubrir sus necesidades básicas alimentarias con su ingreso, según datos publicados este martes por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
- Después de dos caídas trimestrales consecutivas, el Índice de la Tendencia Laboral de la Pobreza registró un ligero incremento de 37,7% a 37,8% en el segundo trimestre de este año.
En su comparación interanual, es decir, en comparación con el mismo trimestre el año pasado, el Índice bajó 0,5%.
- La inflación es uno de los factores clave para entender este tipo de carestía. Entre abril y junio, el costo de vida incrementó entre 6% y 4%, con una inflación particularmente alta en los precios de los alimentos.
- El Coneval encontró que el ingreso laboral real per cápita (es decir, ya descontando la inflación) tuvo un incremento anual de 6,8%, al pasar de 2.880 pesos a 3.076 pesos mensuales.
Además, más de un millón de personas se incorporaron al mercado laboral durante el semestre pasado, aunque la mayoría en el sector informal. El 51,4% de los mexicanos trabajan en informalidad, según muestran los hallazgos publicados.
“Se estima que hay 48,9 millones de mexicanas y mexicanos que viven en una situación en la que los ingresos laborales de su hogar no son suficientes para adquirir la canasta alimentaria básica para todos sus integrantes”, escribieron especialistas del centro de investigación sin fines de lucro México ¿cómo vamos?, en respuesta a la información del Coneval.
- “Únicamente 15 entidades federativas tienen un porcentaje de su población en situación de pobreza laboral menor que el observado en el primer trimestre de 2020 (previo a la pandemia)”. Los 17 estados restantes registraron un porcentaje mayor que antes de la pandemia.
- Los sueldos en México son de los más bajos en comparación con otros países latinoamericanos, por lo que Estados Unidos y Canadá, sus principales socios comerciales, abogaron por un incremento en el salario mínimo que “empareje la cancha” entre los trabajadores del bloque comercial conocido como TMEC.
- A partir de la implementación del acuerdo, México ha incrementado el salario mínimo de manera anual. Este mes, una de las mayores patronales del país, Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) informó que, según sus estimaciones, un “sueldo digno” en el país es de 12.400 pesos mensuales.
Alertan alza de pobreza tras el paso de huracán
- El huracán Otis podría traer desafíos económicos e incrementar la pobreza en Guerrero, por lo que las autoridades deben establecer planes estratégicos para realizar una recuperación sostenible, sostuvieron expertos consultados.
- Ana Bertha Gutiérrez, coordinadora de Mercado Laboral y Comercio Exterior en el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) destacó que, debido al enfoque turístico de la zona y la afectación de dicho ramo, por el fenómeno natural, se espera que la actividad económica sufra un impacto sustancial, además de un proceso de recuperación prolongado.
- Además que, debido a que las tasas de pobreza en Guerrero son de las más altas en México, Otis podría aumentar la pobreza reduciendo los ingresos y agravando la carencia social.
La especialista destacó, también, que la destrucción de viviendas e infraestructura básica, como suministro de agua y electricidad, tiene el potencial de incrementar la pobreza en la población afectada.
Incluso afirmó que la población que ya estaba cerca del umbral de la pobreza moderada podría verse empujada hacia la pobreza extrema, ante esta falta de servicios básicos.
“Las carencias por calidad y espacios de la vivienda, y la de por acceso a los servicios básicos en la vivienda (…) creo que esas son las que más peligro tienen de incrementar (…) Entonces, sí hay aquí una proporción de la población que está en pobreza moderada pero cerca de la pobreza extrema (…) este impacto en la economía y en la infraestructura puede llevar, lamentablemente, a la pobreza extrema”, advirtió la miembro del IMCO.
- Por su parte, Adriana García, coordinadora de Análisis de Datos en México ¿cómo vamos?, subrayó que la implementación de programas gubernamentales en la región debe servir para responder de manera eficaz a la emergencia humanitaria.
- Consideró que el plan de reconstrucción en la entidad debe de enfocarse en promover más empleo formal ya que, en Guerrero, siete de cada 10 personas trabajan en la informalidad y con salarios bajos.
La experta detalló que, como plan a corto plazo, las autoridades deben de privilegiar la reconstrucción de vialidades con el fin de agilizar el arribo de víveres y la ayuda que requiere Acapulco y las zonas aledañas que se vieron afectadas, aunado a que se debe enfocar una mejor articulación entre el sector privado y público para que la ayuda llegue a la entidad.
- Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, en 2022, Guerrero contaba con 2 millones 173,300 personas en calidad de pobreza, lo que significó un total del 60.4% de la población de la entidad.
- De este total, 1 millón 372,800 personas se encontraban en una situación de pobreza moderada mientras que, 800,500 sufrían de pobreza extrema (22.2% de la población.
- El Coneval, en su Informe de Pobreza en los Municipios de México 2010-2020, el más reciente, mostró que con 394,861 personas en situación de pobreza, de sus 757,367 habitantes, Acapulco se ubicó en el noveno lugar a nivel estatal.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, Acapulco representaba, hasta el inicio de la pandemia de Covid, 65.8% del Producto Interno Bruto de Guerrero.
Impacto de la pandemia elevó el porcentaje de población en pobreza
El impacto de la pandemia por Covid-19 significó un incremento en el porcentaje de población en condiciones de pobreza en casi todas las regiones de México, señala el estudio «Evolución del crecimiento económico, la pobreza y la desigualdad de ingresos en las regiones de México”, de la Dirección General de Finanzas del Instituto Belisario Domínguez (IBD).
- Elaborado por el investigador Jaime Del Río Monges, el análisis apunta que si se considera una subdivisión de cuatro regiones económicas, las del norte y occidente “mantuvieron una tendencia creciente en su participación dentro del PIB de México; mientras que la región centro fluctuó en su participación, y la región sur-sureste mantuvo una tendencia decreciente”.
Además, sostiene que en las regiones sureste (Campeche, Quintana Roo, Tabasco, Yucatán) y centro sur (Ciudad de México, Estado de México, Morelos) “se registraron los mayores incrementos de población en condiciones de pobreza al comparar 2020 respecto a 2018”.
Agrega que en la región sureste “el incremento en el porcentaje de población en pobreza podría asociarse a la drástica caída en los ingresos por turismo durante la etapa inicial de la pandemia, en la cual se tuvieron confinamientos y se redujo considerablemente la afluencia de turistas.
Respecto a la región centro-sur, el porcentaje de población en pobreza podría asociarse a un fenómeno migratorio de personas de otras entidades federativas en búsqueda de oportunidades de empleo tanto en la Ciudad de México como en el Estado de México”.
- El BID reconoce que hay una reducción de la desigualdad de ingresos en todas las regiones de México (clasificación de cuatro regiones económicas). Ello, al comparar 2020 respecto a 2008. Esto incluye a la región sur-sureste, a pesar del incremento del porcentaje de población en condiciones de pobreza al comparar el mismo periodo.
- La investigación destaca que es necesario diseñar e instrumentar políticas públicas y proyectos que impacten de forma sostenible y sustentable en el desarrollo de esas regiones que han quedado rezagadas en el aprovechamiento de la integración económica con Estados Unidos.
Ello, con el fin de hacerle frente a los retos de fortalecer el crecimiento económico y reducir el porcentaje de población en pobreza y desigualdad./Agencias-PUNTOporPUNTO