A lo largo de casi un año, la postura de México ante la invasión de Rusia a Ucrania ha registrado diferentes matices que van desde pedir la no intervención y autodeterminación de los pueblos, condenar el despliegue de las tropas rusas y hasta proponer la creación de un comité encargado de alcanzar la paz entre ambos países.
Dos días antes del 24 de febrero, fecha en que comenzó la invasión de Rusia a Ucrania, el
presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que el gobierno federal estaba en contra de que un país invada a otro al ser cuestionado sobre el conflicto.
“Nosotros somos partidarios de la política de no intervención y autodeterminación de los
pueblos, no queremos invasiones, no aceptamos que un país invada a otro”, sentenció el mandatario.
- Sin embargo, el despliegue de tropas rusas en ciudades como Kiev, Odesa, Jersón y Donetsk generó una ola de rechazo entre los países de Occidente y México no fue la excepción, pues el canciller Marcelo Ebrard condenó “enérgicamente” la invasión y
demandó el cese de las hostilidades para dar pie a una fase de diálogo.
En ese sentido, el Presidente ordenó que México condenara en el Consejo de Seguridad de
Naciones Unidas cualquier tipo de invasión.
“En este caso de Rusia, pero lo mismo si se tratara de China o Estados Unidos”, dijo.
En los meses siguientes, Estados Unidos, países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y de la Unión Europea aplicaron sanciones económicas
contra Rusia, a las que el gobierno de México no se sumó.
Pese a no participar en los embargos comerciales, la representación mexicana ante el Consejo de Seguridad de la ONU mantenía su postura de condenar la invasión militar y redactó, junto con Francia, una resolución que exigía a Rusia el retiro de sus tropas.
Parálisis de Naciones Unidas: La guerra amplió sus reflectores para abarcar más allá del territorio ucraniano; la atención mundial se incrementó al darse cuenta de que el conflicto estaba generando incrementos inflacionarios en gran parte de los países, entre ellos México.
Por tal motivo, López Obrador trazó un proyecto de paz que terminara las hostilidades y disminuyera los efectos negativos de la guerra en la economía.
El plan consistía en crear una comisión encabezada por el papa Francisco, el primer ministro de la India, Narendra Modi, y el secretario general de la ONU, António Guterres, que fungirían como mediadores del conflicto; además, este proyecto sería presentado ante la Asamblea General de la ONU por el canciller Marcelo Ebrard.
- El plan no recibió el apoyo deseado y en su discurso el pasado 16 de septiembre en el Zócalo, López Obrador arremetió contra las grandes potencias y la ONU por no actuar con firmeza en los meses previos al inicio de la guerra
Habría que empezar por preguntarnos si no se pudo evitar la guerra y si la ONU y los políticos de las principales potencias no fallaron en la responsabilidad de promover el diálogo”, señaló.
Una semana después, Ebrard sostuvo ante la Asamblea General de la ONU que México propuso el plan de paz ante la “parálisis” del Consejo de Seguridad.
Desde entonces, el gobierno de México se ha mantenido en su postura de exigir un alto al fuego y de condenar cualquier tipo de intromisión de otras naciones en el conflicto, como lo fue la entrega de tanques Leopard 2 a Ucrania por parte de Alemania en enero pasado.
Colombia y México rechazan el envío de armas a Ucrania
Los presidentes de Colombia y México han dejado clara su posición sobre la guerra de Rusia en Ucrania: no están de acuerdo con ella, se debe buscar la paz y no participarán de ninguna manera en el conflicto bélico. Y en su intento de mantenerse alejados de la guerra, e incluso rechazarla, Rusia terminó saludando, por separado, su no intromisión a favor de ninguno.
En un momento clave de la guerra de Rusia y Ucrania, en que Occidente ha anunciado que enviará tanques de guerra a Kyiv —Alemania dijo que enviará tanques Leopard 2 y EE.UU., tanques Abrams— Colombia y México han rechazado tal medida.
- Lo que dijo Petro sobre las armas a Ucrania: La primera declaración en este sentido la dio el presidente de Colombia, Gustavo Petro, este martes en su intervención en la Cumbre de Jefes y Jefas de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac). Petro dijo que Colombia tiene armas de fabricación rusa adquiridas por gobiernos anteriores, y que en «alguna conversación» con representantes del Gobierno de Estados Unidos, le pidieron que entregara esas armas para enviárselas a Ucrania, a lo que él dijo no.
«Yo le dije que nuestra constitución tiene como orden, en el terreno internacional, la paz. Y así quedara eso como chatarra en Colombia, no entregábamos las armas rusas para que se llevaran eso a Ucrania a seguir una guerra», dijo Petro esta semana en Buenos Aires.
«No significa que no estemos preocupados por una agresión», agregó Petro, asegurando que el camino a seguir debe ser una acusación ante la Corte Penal Internacional por la invasión de Rusia a Ucrania. «La agresión debe ser un delito internacional», dijo.
Y, apoyando una salida negociada al conflicto, y diciendo que su apoyo es a la paz, Petro aseguró que su gobierno no está alineado con ninguno de los dos países en guerra.
«No estamos con ninguno. Estamos con la paz. Por eso es que ningún arma rusa existente hoy inservible va a ser usada en ese conflicto», puntualizó.
📢 Valoramos mucho las declaraciones del Presidente Gustavo Petro de que los equipamientos militares rusos utilizados por el Ejército Nacional🇨🇴 no serán entregados a Ucrania.
Consideramos que tal postura es realista y corresponde plenamente a los intereses nacionales de Colombia pic.twitter.com/SosF8dAMy5— Rusia en Colombia (@RusiaColombia) January 25, 2023
En respuesta, la embajada de Rusia en Colombia «valoró» que el país no entregara armas que fueran destinadas a Ucrania. «Consideramos que tal postura es realista y corresponde plenamente a los intereses nacionales de Colombia», comentó la embajada rusa, en un tuit.
- Lo que dijo AMLO sobre los tanques alemanes: Entre tanto, un comentario similar hacía eco en México este miércoles, esta vez rechazando el envío de tanques Leopard 2 a Ucrania por parte de Alemania.
Un breve comentario del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, al principio de su habitual rueda de prensa matutina resonó en la embajada de Rusia en México. AMLO, que estaba hablando sobre «el poder» que tienen los medios de comunicación sobre los gobiernos, aseguró que fue por «presión» de estos que Alemania terminó enviando tanques de guerra a Ucrania.
«No quería, por ejemplo, Alemania involucrarse mucho en la guerra de Rusia y Ucrania, y en contra de la población de Alemania, o de la mayoría de los alemanes, decide el gobierno mandar más armas a Ucrania, por la presión de los medios de comunicación alemanes», dijo AMLO este miércoles.
Las palabras de AMLO le valieron un comentario de la embajada de Rusia en México en la que agradecía al mandatario su posición sobre el envío de armamento a Ucrania.
👏Agradecemos a @lopezobrador_ por su posición abierta y clara sobre el suministro de tanques alemanes al territorio de Ucrania
Esperamos que nadie tenga dudas de que actualmente hay un choque directo entre el Occidente libre y Rusia
Usted sabe lo que va a pasar con estos tanques pic.twitter.com/PTfHhALdMd— Embajada de Rusia en México (@EmbRusiaMexico) January 25, 2023
«Agradecemos a @lopezobrador_ por su posición abierta y clara sobre el suministro de tanques alemanes al territorio de Ucrania. Esperamos que nadie tenga dudas de que actualmente hay un choque directo entre el Occidente libre y Rusia. Usted sabe lo que va a pasar con estos tanques», tuiteó la embajada rusa.
Durante meses, López Obrador ha rechazado la guerra de Rusia en Ucrania y ha dicho que la postura de su gobierno es «rechazar, condenar cualquier invasión».
- En septiembre de 2022, el canciller de México, Marcelo Ebrard, expuso ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas la iniciativa anunciada por López Obrador para encontrar una solución a la guerra de Rusia en Ucrania.
- Ebrard habló de un «comité para el diálogo y la paz en Ucrania con la participación de otros jefes de Estado y de Gobierno», y dijo que el objetivo sería generar nuevos mecanismos para el diálogo y crear espacios de mediación «que fomenten la confianza, reduzcan las fricciones y abran el camino hacia una paz duradera».
Alemania y Estados Unidos anunciaron esta semana que empezarán a enviar tanques de guerra a Ucrania para su lucha contra Rusia.
Como escribió Nick Paton Walsh de CNN, la decisión es muy importante porque «a diferencia de los sistemas sistemas de defensa antiaérea o los misiles antitanque, no son armas defensivas», sino que están pensados para «golpear con fuerza» a las tropas rusas en una ofensiva terrestre, algo que hace un año era inimaginable y que ahora puede ser el escalamiento mucho mayor de una guerra en la que Occidente está entrando poco a poco.
Países latinoamericanos se han negado a enviar armas a Ucrania
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, se convirtió en el último líder en América Latina en oponerse públicamente a enviar armamento a Ucrania, que lleva casi un año combatiendo una invasión rusa.
- Durante un encuentro con el canciller alemán Olaf Scholz, de visita esta semana por varios países latinoamericanos, Fernández aclaró que Argentina «no está pensando en enviar armas» a la zona de conflicto, según informó el 29 de enero la agencia oficial argentina de noticias, Télam.
Unos días antes, sus pares de Colombia, México y Brasil habían realizado afirmaciones similares.
Los anuncios presidenciales fueron en respuesta a la jefa del Comando Sur del Ejército de Estados Unidos, la general Laura Richardson, quien unos días antes había revelado que Washington les pidió a seis países de América Latina que donen a Ucrania su equipamiento militar comprado a Rusia.
¿Por qué está EE.UU. particularmente interesado en el armamento de origen ruso?
Porque es el que más conocen los soldados ucranianos, quienes próximamente, cuando pase el invierno, podrían enfrentar una nueva ofensiva rusa, lo que les daría poco tiempo para entrenarse con las armas más modernas que proveen los socios de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
«Rusia tiene aliados en los gobiernos de] Cuba, Venezuela y Nicaragua, pero otros seis países tienen equipamiento militar ruso. EEUU está tratando de que esos seis países donen el equipamiento militar ruso a Ucrania y reemplazarlo con armamento estadounidense», dijo la militar durante una evento del think tank estadounidense Atlantic Council (Consejo Atlántico), a mediados de enero.
Los seis países en cuestión son Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador, México y Perú.
- Del rechazo absoluto al silencio: El presidente colombiano Gustavo Petro fue el más tajante en su respuesta a Richardson.
Hablando desde la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), en Buenos Aires, el 25 de enero, Petro reconoció que «Colombia, en los años que han pasado -no en mi gobierno- compró material de guerra ruso, helicópteros, etcétera, para sus propios fines al interior del país».
«Ese material está ahí, tiene problemas de sostenimiento porque la asistencia ahora es imposible para arreglar, para cambiar partes», detalló.
En cuanto al pedido de Richardson, dejó en claro su oposición.
«Yo le dije que nuestra constitución tiene como orden en el terreno internacional la paz, y así quedara eso como chatarra en Colombia, no entregábamos las armas rusas para que se llevaran eso a Ucrania a seguir una guerra», sentenció.
Igual de duro fue el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien se refirió al tema el mismo día, aunque desde su país, ya que no asistió a la cumbre de la Celac por tener «compromisos en el país».
Lejos de aceptar el pedido de enviar armas a Ucrania, AMLO criticó la decisión de Alemania de enviar tanques de guerra Leopard-2 a ese país en conflicto.
«El poder mediático es usado por las oligarquías en el mundo para someter gobiernos. No quería por ejemplo Alemania involucrarse mucho en la guerra de Rusia y Ucrania y en contra de la población de Alemania o de la mayoría de los alemanes, decide el gobierno mandar más armas a Ucrania por la presión de los medios de comunicación alemanes», denunció durante su conferencia matutina en el Palacio Nacional.
Aunque no realizó comentarios públicos sobre el tema, el flamante mandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva también se habría negado a enviar armas a Ucrania.
- Así lo afirmó el pasado 27 de enero el diario Folha de Sao Paulo en un reportaje que señaló que Lula «rechazó una solicitud del gobierno alemán para que Brasil suministre municiones para los tanques que serán entregadas por Berlín a Ucrania».
Según Folha, Lula se negó a enviar las municiones para los tanques Leopard a Ucrania «argumentando que no valía la pena provocar a los rusos».
Ni Perú ni Ecuador se han referido oficialmente al tema y, hasta el momento, ningún país de América Latina ha enviado armas para apoyar a Ucrania.
¿Apoyo tácito a Rusia? ¿Puede interpretarse esta renuencia como un guiño de América Latina a Rusia?
Pues el gobierno de Vladimir Putin claramente cree que sí.
En los últimos días, medios rusos en español como Sputnik y RT resaltaron el rechazo de los diversos gobiernos latinoamericanos a los pedidos de Washington y Berlín.
«La carrera armamentista en Ucrania no tiene el apoyo de Sudamérica», resumió el primero en uno de sus títulos el 30 de enero.
Sin embargo, los propios mandatarios que descartaron el envío de armas han condenado la invasión rusa, y no han apoyado a Moscú en foros internacionales como la Organización de Naciones Unidas (ONU).
No obstante, a la hora de tomar partido en el conflicto ruso-ucraniano, la mayoría de los países latinoamericanos -salvo Cuba, Venezuela, Nicaragua y Bolivia, que apoyan abiertamente al Kremlin- se han declarado «neutrales».
- ¿Por qué? Adam Isacson, director de supervisión de la Defensa en la Oficina de Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA), le dijo a BBC Mundo que la región tiene un largo historial de «no alineamiento» en los conflictos de las grandes potencias.
«No creo que sea un acto de solidaridad con Vladimir Putin, sino un deseo de tomar distancia del conflicto y no ser visto como el hermano pequeño de la OTAN», señaló.
Isacson no cree que el rechazo al pedido de enviar armas afecte las relaciones entre la región y EE.UU. o Europa.
«En todo caso me parece más probable que Washington esté descontento con la general Richardson por hablar públicamente sobre esa solicitud. Si realmente era algo que querían, lo hubieran negociado de forma privada», dice.
En cuanto a la gira de Scholz por América Latina, el experto de WOLA considera que el principal objetivo en relación a la guerra no era conseguir más armas, sino votos contra Rusia en la ONU.
«La cantidad de armas rusas o soviéticas que América Latina podría aportar sería pequeña, vieja y estropeada», resalta.
Incluso considera improbable que los países con más armamento ruso -los proMoscú como Venezuela, Cuba y Nicaragua- envíen armas para apoyar la invasión.
«Si Rusia les pidiera armas sería una gran admisión de debilidad», analiza.
Vladimir Putin y Rusia ponen la lupa en México
Rusia tiene la mira puesta en México y Vladimir Putin, su presidente, ya empezó a mover sus piezas de ajedrez para avanzar en sus intenciones de expansión de influencia en varias partes del mundo; en ese tenor, México y América Latina son clave para mostrar a Estados Unidos que también ellos pueden acercarse “a su vecindario”, como lo hacen los aliados de los estadounidenses, a nombre de la OTAN, se acercan a territorios de influencia histórica rusa.
- El presidente de Rusia, Vladímir Putin, designó a Nikolái Sofinski como nuevo embajador ruso en México, que reemplazará a Víktor Koronelli, quien estuvo a cargo de la legación diplomática rusa desde el 2018.
El correspondiente decreto fue publicado este viernes en el portal de informaciones legales del Gobierno ruso.
Además, en otro decreto presidencial publicado este mismo viernes, Sofinski fue designado como embajador concurrente de Rusia en Belice.
Sofinski, que cumple hoy 65 años, cuenta con una experiencia diplomática de más de tres décadas y fue embajador en Perú y Uruguay, además de ser consejero delegado en la Embajada de Moscú en España y cónsul general en Houston, Texas.
«El gobierno mexicano afrontó la campaña militar rusa de Ucrania con cierta pasividad, sin imponer represalias económicas a Rusia y apostando por el diálogo y la mediación para frenar la guerra», afirmó en un cable la agencia EFE.
Para Rusia, el trato con México y América Latina en general son de gran importancia, declaró el pasado 18 de enero el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, quien destacó que «las relaciones con América Latina están en auge».
- Posición de México: En octubre de 2022, en la página de Facebook de la embajada rusa en México, se comunicó la ratificación de “un acuerdo intergubernamental entre Rusia y México” sobre “exploración y uso del espacio ultraterrestre con fines pacíficos” y “la posible instalación de estaciones Glonass en territorio mexicano”.
La noticia fue revelada por el Kremlin y el gobierno de AMLO quedó descolocado por el entorno de la guerra. ¿Tema decir que Rusia es su aliado?
Un mes antes, el 16 de septiembre, López Obrador se enfocó en criticar el papel de las Naciones Unidas; el presidente Andrés Manuel López Obrador y dijo que presentaría un plan para la paz mundial, ante la ONU.
El presidente adelantó la propuesta que el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, presentará en la asamblea general de las Naciones Unidas.
«Se trata de buscar con urgencia un acuerdo para detener la guerra en Ucrania”, dijo; y precisó que propondrán una tregua de 5 años a nivel internacional para resolver problemas económicos y sociales en el mundo.
López Obrador detalló que este comité estaría integrado, de aceptarse por una mayoría en el consejo de Seguridad de la ONU, por el papa Francisco, el secretario general de la ONU, António Guterres, y el primer ministro de la India, Narendra Modi, entre otros.
“La misión pacificadora debe de buscar, de inmediato, el cese de hostilidades en Ucrania y el inicio de pláticas directas con el presidente (Volodímir) Zelenski, de Ucrania, y con el presidente (Vladímir) Putin, de Rusia”, detalló.
También planteó que la ONU debe analizar sí falló en su intento de diálogo para detener la guerra. «La ONU permanece inactiva y como borrada, presa de un formalismo, una ineficacia política que la deja en un papel meramente ornamental».
El presidente de México también criticó la actuación de la ONU y de las principales potencias globales para evitar el más reciente conflicto bélico.
Dijo que el envío de armas y la imposición de sanciones comerciales y económicas a Rusia solo agravaron el conflicto, produjeron más sufrimiento de víctimas, extendió la crisis de refugiados y migración, así como el desabasto de alimentos y de energía y para impulsar la inflación mundial a niveles no vistos en más de dos décadas.
- El enojo de Ucrania: El asesor del Jefe de la Oficina del presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, criticó el plan “pacificador” del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador y advirtió que para el mandatario la intervención en Rusia es sólo un tema para sus propias relaciones públicas.
En un tuit de respuesta directo a López Obrador, Mijalio Podilyak le cuestionó si su plan es mantener a millones bajo ocupación, aumentar el número de entierros masivos y dar tiempo a Rusia para renovar las reservas antes de la próxima ofensiva.
AMLO calla ante las violaciones de DH en el gobierno de Nicaragua
Una veintena de expresidentes de España y Latinoamérica expresaron el lunes preocupación por el silencio de la región y, específicamente, del mandatario mexicano Andrés Manuel López Obrador ante las recientes acciones adoptadas por el gobierno de Nicaragua contra opositores, que han sido rechazadas por varios gobiernos extranjeros y organizaciones humanitarias.
- El grupo de exjefes de Estado y de gobiernos, mayoritariamente de tendencia de derecha y centro, afirmó que lamentaba “el silencio” de la mayoría de los gobiernos de la región, con excepción de los presidentes de Chile y Ecuador, ante lo que califican de “arremetida dictatorial” de Nicaragua.
- La semana pasada el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, declaró “traidores a la patria” a 94 opositores y críticos a quienes les quitó la nacionalidad y ordenó confiscarles sus bienes inmuebles. La medida se anunció pocos días después de la condena a 26 años de prisión que se impuso contra el obispo Rolando Álvarez y de la excarcelación y destierro de 222 opositores presos.
En el comunicado del foro internacional no gubernamental Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), los exmandatarios destacaron el rol del presidente mexicano López Obrador, a quien interpelaron porque “calla ante el ejercicio y las violaciones de derechos humanos” que ocurren en Nicaragua, mientras cuestiona abiertamente la administración de la presidenta peruana Dina Boluarte.
- Entre los nombres de exgobernantes que respaldan el comunicado de IDEA figuran el español José María Aznar, el costarricense Óscar Arias, los colombianos Iván Duque y Andrés Pastrana, los chilenos Eduardo Frei y Sebastián Piñera, el argentino Mauricio Macri, los panameños Nicolás Ardito Barletta, Mireya Moscoso y Ernesto Pérez Balladares, los ecuatorianos Lenín Moreno, Lucio Gutiérrez y Jamil Mahuad y los mexicanos Vicente Fox y Felipe Calderón, ambos fuertes críticos de López Obrador, entre otros.
- El grupo IDEA fue creado en el 2015 y se define en su web como “un foro” que “desde la sociedad civil y en sede de la opinión pública internacional, observa y analiza los procesos y experiencias democráticos iberoamericanos”. Desde su constitución, ha hecho diferentes pronunciamientos sobre Venezuela, Cuba, Colombia, Perú, Bolivia, Chile, Ecuador y El Salvador.
AP solicitó a la Cancillería mexicana una reacción sobre el pronunciamiento de los expresidentes en contra de López Obrador, pero no hubo comentarios de momento.
Respecto a lo que ocurre en Nicaragua, los gobiernos de Chile, Ecuador y Colombia se han pronunciado en los últimos días. “No sabe el dictador que la patria se lleva en el corazón y en los actos, y no se priva por decreto”, dijo el sábado el mandatario chileno Gabriel Boric al solidarizarse con los escritores Gioconda Belli y Sergio Ramírez, la activista Sofía Montenegro y el periodista Carlos Chamorro luego de que les retiraran la nacionalidad.
También la Cancillería ecuatoriana hizo el pasado viernes un llamado al gobierno de Ortega para “rectificar” y “liberar a los presos políticos y a devolver a este país a la vida democrática”.
Colombia manifestó, asimismo, preocupación por la decisión de Ortega de retirar la nacionalidad a grupo de críticos, y exhortó, en un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores, a “generar medidas de confianza que contribuyan a la reconciliación nacional, al respeto del Estado de derecho y al bienestar del pueblo nicaragüense”. Asimismo, el gobierno del izquierdista Gustavo Petro dijo que seguirá con atención las decisiones de Nicaragua sobre un importante grupo de nicaragüenses detenidos.
El gobierno de López Obrador no se ha pronunciado frente a los acontecimientos de Nicaragua, aunque a mediados del 2021 llamó a consultas a su embajador en Managua por “las preocupantes acciones políticas” de Ortega, que llevó a la cárcel a líderes opositores y aspirantes a la presidencia del país centroamericano.
- En enero del año pasado, el mandatario mexicano anunció que pediría el beneplácito para un nuevo embajador en Nicaragua. López Obrador sostuvo en esa oportunidad que su administración tiene “buenas relaciones con todos y no queremos ser imprudentes”. Y añadió que “no se puede hacer a un lado nuestra política de autodeterminación de los pueblos”.
En el caso de Perú, López Obrador se ha distanciado de la habitual postura mexicana de no injerencia en los asuntos internos de otros países y, en contraste, ha explicitado su respaldo al destituido presidente peruano Pedro Castillo, quien está encarcelado en Lima y enfrenta cargos de presunta corrupción, organización criminal y lavado de activos.
La semana pasada el mandatario mexicano consideró como “espurio” el gobierno de Boluarte y anunció que no entregaría a Perú la presidencia de la Alianza del Pacífico, que integran Chile, Colombia, Perú y México./Agencias-PUNTOporPUNTO