INCENDIOS FORESTALES son más DEVASTADORES en el PAÍS; hay 1 MILLÓN de HECTÁREAS DAÑADAS

Este año, uno de los incendios más fuertes ha sido el de la región de Los Chimalapas, en Oaxaca, donde, según las autoridades, después de 33 días (del 24 de marzo al 26 de abril), el fuego destruyó aproximadamente 34,000 hectáreas.

Potenciados por la sequía prolongada, las altas temperaturas y el fenómeno de El Niño, los incendios forestales de este año son los más devastadores que se hayan registrado en el país.

  • Datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) indican que en la presente temporada se han contabilizado siete mil 627 siniestros, la mayor cifra desde 2017, cuando fueron ocho mil 651 incendios. Además, la superficie forestal que afectaron entre el 1 de enero y el 2 de agosto de este año es la mayor registrada: un millón 269 mil 858 hectáreas.

A este panorama se suma que, entre 2018 y 2024, el presupuesto de la Conafor disminuyó casi 50% en términos reales, al pasar de cuatro mil 441 millones de pesos a dos mil 672 millones.

  • En el marco del Día Mundial de la Prevención de Incendios Forestales, este 18 de agosto, el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible ha alertado que la falta de recursos impide a la dependencia cumplir con sus funciones para combatir los incendios, controlar plagas, favorecer la restauración de áreas degradadas, reforestar e impulsar el manejo sustentable de selvas y bosques.

Estadísticas oficiales señalan que los combatientes del fuego son principalmente del sector privado social, es decir, brigadas comunitarias o de la sociedad civil que, la mayoría de las veces, no tienen el equipo ni los apoyos necesarios para hacer frente a los incendios forestales.

Incendios forestales consume México

La temporada 2024 de incendios forestales rompió todos los récords a nivel nacional, debido a la presencia de una sequía prolongada ocasionada por el cambio climático y el fenómeno de El Niño, así como las altas temperaturas y la reducción del presupuesto para atender las emergencias.

  • De acuerdo con el Monitor de Sequía de México, el 31 de mayo de 2024 se alcanzó el punto máximo, cuando el 89.58% del territorio nacional reportó afectaciones por la falta de lluvias y escurrimientos, desde la categoría de anormalmente seco hasta sequía excepcional.
  • Un factor importante que también jugó en contra fue la temperatura, ya que 2024 es considerado como uno de los años más cálidos registrados en el planeta hasta ahora, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

Tan sólo en la Ciudad de México, el pasado 25 de mayo, se estableció una nueva marca histórica por altas temperaturas, al registrar 34.7 grados en el Observatorio de Tacubaya.

Además, entre 2018 y 2024, el presupuesto de la Conafor disminuyó casi 50 por ciento en términos reales, al pasar de cuatro mil 441 millones de pesos a dos mil 672 millones de pesos.

Según el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS), la falta de recursos impide a la Comisión Nacional Forestal cumplir con sus funciones establecidas en la Ley de Desarrollo Forestal Sustentable, para combatir incendios forestales, controlar plagas, favorecer la restauración de áreas degradadas, reforestar e impulsar el manejo sustentable de selvas y bosques.

El país se convirtió en un infierno

Datos preliminares de la Conafor establecen que en la temporada 2024 se presentaron siete mil 627 incendios forestales, cifra que no se alcanzaba desde 2017, cuando se registraron ocho mil 651 siniestros.

Pero tal vez el dato más revelador es que este año la superficie afectada rompió todos los récords al sumar un millón 269 mil 858 hectáreas, entre el primero de enero y el 2 de agosto de 2024.

  • El lunes 14 de mayo fue el día que más incendios forestales activos se presentaron en 24 horas con 214 conflagraciones en 22 estados de la República Mexicana y 107 mil 443 hectáreas afectadas.
  • En los registros históricos, 2023 ocupa el segundo lugar en superficie impactada por el fuego con un millón 23 mil 373 hectáreas, seguido por 2011 con 899 mil 491 hectáreas; 1998 con 847 mil 127 hectáreas y 2022 con 728 mil 180 hectáreas.
  • Este año, los estados del país más afectadas por superficie siniestrada son: Veracruz (14 mil 109 hectáreas); Colima (10 mil 290 hectáreas); Tamaulipas (9 mil 108 hectáreas); Sonora (7 mil 202 hectáreas); Baja California (6 mil 208 hectáreas); Morelos (3 mil 775 hectáreas); Hidalgo (3 mil 606 hectáreas); Guanajuato (3 mil 41 hectáreas), y la Ciudad de México (2 mil 864 hectáreas).
  • En el caso del número de incendios forestales en 2024, el Estado de México encabeza la lista con mil 182 siniestros; la Ciudad de México con mil 35; Jalisco 947; Michoacán 851; Chihuahua 477; Puebla 428; Chiapas 414; Durango 348; Oaxaca 262; Veracruz 222; Guerrero 212; Hidalgo 175; Tlaxcala 162 y Morelos 124.

Las estadísticas oficiales señalan que los combatientes del fuego fueron principalmente del sector privado social, es decir, brigadas comunitarias o grupos de la sociedad civil, que en la mayoría de las ocasiones no cuentan con el equipo ni los apoyos necesarios para hacer frente a los incendios forestales.

Entre las causas de los siniestros aparece en primer lugar, origen desconocido; en segundo lugar, intencional; en tercer lugar, actividades agrícolas, y en cuarto lugar, actividades pecuarias.

Al conmemorarse este 18 de agosto, el Día Mundial de la Prevención de Incendios Forestales, es importante concientizar a la población sobre la necesidad de cuidar y preservar los bosques, que sirven para regular la temperatura, atrapar los gases de efecto invernadero y proveer oxígeno.

Datos sobre los incendios forestales

  • En 1998 se registraron 14,330 con una afectación de 847,127 hectáreas.
  • En 2017 hubo 8,651 con 701,489 hectáreas dañadas.
  • En 2021 reportaron 7,194 con 647,686 hectáreas consumidas.
  •  En 2023 se contabilizaron 7,455 y 1,023,373 hectáreas afectadas.
  •  En 2024 se tienen 1,269,858  hectáreas consumidas con 7,627 incendios.

¿Cuántas hectáreas se han perdido por incendios forestales?

El total de hectáreas perdidas por incendios forestales en México ha crecido tres años consecutivos.

  • Sólo en 2023 se perdieron 1 millón 047,493 hectáreas, un nivel 42% mayor en comparación con el año previo, de acuerdo con cifras de la Conafor (Comisión Nacional Forestal).
  • En lo que va del 2024, en México se han registrado un total de 1,699 incendios con 68,539.07 hectáreas afectadas.
  • Las entidades federativas con mayor presencia de incendios fueron: Estado de México, Ciudad de México, Puebla, Tlaxcala, Durango, Veracruz, Morelos, Chiapas, Jalisco y Guerrero, que representan el 87 % del total nacional.

Los estados con mayor superficie afectada fueron: Guerrero, Chiapas, México, Oaxaca, Durango, Puebla, Chihuahua, Yucatán, San Luis Potosí y Tlaxcala, que representan el 92 % del total nacional.

Este año podría haber más incendios forestales que en 2023

De acuerdo con datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) en 2022 hubo, en promedio, 20 incendios por día. En 2023 también (20.85), ya que se registraron 7,611 casos.

Hasta mayo de 2024 se presentaron, hasta el día 2 de ese mes, 28 casos diariamente (28.59 en promedio por día, 3,517 en total), ocho más que el año previo. Si se compara el mismo periodo del 2023 con el de este año (enero-primeros días de mayo) el panorama era peor el año pasado, con 38 incendios diariamente (4,774, en total).

  • En cuanto a las hectáreas afectadas, en 2023 el promedio diario fue de 2,869 (hubo un millón 47,493 siniestradas en total) y este año, hasta ahora, el promedio por día descendió a 1,462 (ha habido, en total, 179,849 perjudicadas). Si se comparan periodos idénticos (enero-primeros días de mayo de cada año), en 2023 el promedio diario de las siniestradas fue de 2,864 (352,297 en total), mientras que en 2024 ha sido de las 1,462 mencionadas más arriba.

“Con todo, si las condiciones meteorológicas imperantes hasta el momento (sequía extrema, precipitación escasa, así como temperaturas altas) persisten resulta probable que el número de incendios supere este año el que se registró en 2023”, asegura Lilia de Lourdes Manzo Delgado, investigadora del Laboratorio de Análisis Geoespacial del Instituto de Geografía de la Universidad Nacional.

Este año, uno de los incendios más fuertes ha sido el de la región de Los Chimalapas, en Oaxaca, donde, según las autoridades, después de 33 días (del 24 de marzo al 26 de abril), el fuego destruyó aproximadamente 34,000 hectáreas.

“Habría que estar atentos a lo que pasa durante el resto de mayo, porque la temporada de incendios va de febrero a junio, principalmente en las regiones centro y sur sureste, pero los meses con el mayor número de ellos y hectáreas afectadas son abril y mayo. Insisto: si la precipitación escasa, la sequía extrema y las temperaturas altas persisten, podrían seguir presentándose incendios en regiones importantes del país”, comenta Manzo Delgado.

La temporada de incendios de 1998 y la de 2011 eran consideradas dos de las más críticas de las últimas décadas; sin embargo, la afectación que trajo la de 2023 fue superior a la de esos años.

  • Por lo que se refiere a la década 2010- 2019, 2011, 2017 y 2019 fueron años con temporadas críticas de incendios. Ya en esta década, el número de incendios en 2020 no fue tan importante, pero en 2021, 2022 y 2023 creció con respecto al año anterior y si las condiciones meteorológicas actuales no varían, la superficie de afectación podría ser igual a –o un poco mayor que– la de 2023, o sea, la tendencia al alza continuaría.

“Con respecto a 2024, ya se preveía que marzo iba a ser un mes con un riesgo de incendios muy grande, lo cual se confirmó porque durante ese mes se presentaron varios, incluso en algunas regiones donde no es tan común que los haya, por ejemplo, Veracruz, las cercanías de Acapulco y algunos lugares de Puebla e Hidalgo”, añade la investigadora.

Intencionales

Según las autoridades forestales, entre el 27 % y el 3 % de los incendios en México son intencionales, 25 % están asociados a quemas agropecuarias que se salen de control y el resto se desata debido a la precipitación escasa, a la sequía extrema y a las temperaturas altas. En lo que va de este año, se han registrado en el Estado de México, Oaxaca, Chiapas, Jalisco, Nayarit, Zacatecas y Yucatán, y, de manera excepcional, en Veracruz, Puebla e Hidalgo.

“A veces se reporta el número de incendios, pero no la superficie de afectación. Entonces debemos ser cuidadosos, pues una cosa es el número de incendios reportados y otra el número de hectáreas dañadas. También es fundamental establecer si afectaron sólo pastizales y matorrales o también zonas boscosas”, explica Manzo Delgado.

  • Asimismo, hay que tener en cuenta que las personas que combaten los incendios son las que, en un primer momento, efectúan un estimado aproximado de las hectáreas afectadas; pero el número de éstas puede modificarse cuando se hace una cuantificación más precisa con otros recursos, como imágenes satelitales.

“Por otro lado, yo puedo suponer que los medios de comunicación siguen oportunamente estos eventos y que, de algún modo, esto influye en todas las personas para que hagan un uso más consciente del fuego y formen parte de los planes de prevención de incendios.”

¿Cómo evitarlos?

¿Qué se puede hacer para tratar de contener los incendios en el país y así evitar que se pierdan cientos de miles de hectáreas de pastizales, matorrales y, sobre todo, bosques?

“Mis colegas y yo, como expertos en monitorear incendios en el Laboratorio de Análisis Geoespacial del Instituto de Geografía de la UNAM, necesitamos estar muy atentos para ver dónde se presentan”, responde la investigadora universitaria.

  • En cuanto a las autoridades, deben planear bien la distribución de sus recursos económicos y contribuir a que las brigadas contra incendios lleguen con rapidez a los lugares donde sean requeridas.

“De hecho, sé que están cumpliendo con su tarea. La Conafor, la Comisión Nacional de Áreas Protegidas y otras dependencias gubernamentales brindan un apoyo invaluable en la lucha contra los incendios. No obstante, es necesario que tanto las personas que se dedican a preparar sus tierras de cultivos con quemas agropecuarias como los paseantes hagan un uso más consciente del fuego bajo estas condiciones extremas que vivimos hoy en día”, señala Manzo Delgado.

Regeneración de bosques

¿Cuánto tiempo tarda un bosque quemado en regenerarse? Depende de las especies afectadas, del grado de daño que hayan sufrido y del cuidado y de la conservación que se le preste, pero se puede afirmar que en promedio de 15 a 20 años.

“Hace poco, mis colegas y yo visitamos la Selva El Ocote, en Chiapas, que fue arrasada por un incendio muy severo en 1998 y, al recorrerla, los pobladores nos dijeron que, después de más de 20 años algunas partes del bosque comienzan a verse como antes de 1998. Claro, los bosques templados resisten el fuego un poco más, porque dependen de él para la germinación de muchas semillas.”

  • En opinión de la investigadora, es imprescindible darle seguimiento al fenómeno de los incendios porque, a consecuencia del cambio climático, las temporadas críticas son cada vez más frecuentes, y realizar más estudios para conocer con qué recurrencia se presentan los incendios en determinadas áreas.

“En México, la investigación de los últimos 20 años en torno a los incendios es considerable, pero falta más por descubrir, por ejemplo, si los combustibles forestales (material leñoso, hojas, ramas…) aportan un elemento que no se ha considerado en la aparición de un incendio y, por lo tanto, tiene que haber un control de ellos”, concluye.

Incendios afectan a ciudades en Brasil

El estado brasileño de Sao Paulo informó el viernes por la noche de que 30 de sus ciudades estaban afectadas o cercadas por focos de incendios forestales, y que dos personas que intentaban contener las llamas en una planta industrial habían muerto.

  • Las ciudades se han visto afectadas por el clima seco y caluroso de los últimos días, informó el gobierno en un comunicado.
  • El gobierno estatal también advirtió de que los incendios forestales podrían propagarse rápidamente debido a las ráfagas de viento y arrasar grandes extensiones de vegetación natural.
  • Por el momento, el gobierno no ha informado de que las llamas alcancen directamente la ciudad de Sao Paulo, la mayor de América Latina por población, con más de 11 millones de habitantes.

Sin embargo, los medios de comunicación locales informaron de que el humo cubría algunas partes del cielo de la capital del estado.

El gobierno dijo que dos empleados de una planta industrial en la ciudad de Urupes habían muerto el viernes mientras luchaban contra un incendio, sin dar más detalles.

  • El gobierno del estado de Sao Paulo ha creado un comité de emergencia para hacer frente a los incendios, que también han bloqueado total o parcialmente unas 15 carreteras.

La temporada de incendios forestales en Brasil suele alcanzar su punto álgido en agosto y septiembre.

2 millones de hectáreas dañadas en Bolivia

Las llamas, impulsadas por una sequía extrema y fuertes vientos, han consumido casi 2 millones de hectáreas, principalmente en la región de la Chiquitania, una vasta área de bosques y sabanas.

  • El coordinador del Comité de Operaciones de Emergencia Departamental de Santa Cruz (COED), Jhonny Rojas, advirtió que la situación es aún más grave que la de 2019, cuando Bolivia sufrió incendios devastadores que arrasaron grandes extensiones de bosque.

En respuesta a la emergencia, el gobierno central ha desplegado un helicóptero Z-9 del Ejército equipado con un sistema Bambi Bucket y una avioneta Cessna de la Fuerza Aérea Boliviana para descargar agua en las áreas más inaccesibles.

Sin embargo, estos esfuerzos han sido insuficientes para detener el avance del fuego.

El impacto de los incendios no solo se refleja en la devastación de la flora y fauna, sino también en la calidad del aire, que ha empeorado significativamente en las zonas afectadas, incluida la capital cruceña. Esta situación está afectando especialmente a grupos vulnerables como niños, ancianos y personas con enfermedades respiratorias.

  • La crisis continúa escalando y empeora cada día. Solo en los últimos cuatro días, las llamas han arrasado con casi un millón de nuevas hectáreas, elevando el total de la destrucción a cerca de dos millones.

Ante la gravedad de la situación, se ha incrementado el personal dedicado a combatir el fuego, pasando de 6,446 a 7,229 personas, pero los incendios siguen fuera de control.

Municipios como San Ignacio de Velasco, San Matías, Santa Ana y Concepción (en el este de Santa Cruz) permanecen en estado crítico, con condiciones que favorecen la propagación de las llamas.

  • Un informe reciente de la gobernación cruceña señala que los incendios ya han consumido más de 1.9 millones de hectáreas de bosque en el departamento de Santa Cruz, afectando gravemente a comunidades, fauna y flora.
  • Según datos estadísticos de la gobernación, entre julio y noviembre de 2023, más de 3.3 millones de hectáreas de zonas boscosas, matorrales y pastizales secos han sido consumidas por al menos 160 incendios forestales registrados en todo el país.

El año con mayores afectaciones fue 2019, cuando se quemaron 5.3 millones de hectáreas, mientras que en 2022 la superficie dañada alcanzó las 4.46 millones de hectáreas. /Agencias-PUNTOporPUNTO

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