El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que está trabajando una reestructura de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y otras dependencias, con la que la Guardia Nacional pasará a la Secretaría de la Defensa por acuerdo presidencial; es decir, previo a la reforma constitucional que anunció que enviaría al Congreso de la Unión.
- López Obrador afirmó que desea que sea la secretaría de la Defensa la que se haga cargo de la Guardia Nacional y adelantó que el desfile militar del día 16 de septiembre va a ser “predominantemente orientado” a la Seguridad Pública, donde los actores principales van a ser los integrantes de la Guardia Nacional.
- El presidente hizo el anuncio al ser cuestionado sobre personas que fueron víctimas de tortura y/o que son inocentes y que están detenidas, o aún no reciben sentencia. “Se avanza poco para liberar a personas que estuvieron en la cárcel y que fueron torturados, hubo las pruebas. Yo le voy a pedir a Rosa Icela que ella se haga cargo de esto y si estoy pensando [transformar] en que sea la Secretaría de Seguridad Pública y Justicia, porque he estado apoyándome y han trabajado, pero quiero algo especial. Me han estado ayudando en Gobernación, pero voy a pedirle a Rosa Icela Rodríguez, que aparte de su tarea de coordinar lo de Seguridad, vea estos casos de Justicia”, añadió el presidente.
“Les adelanto, por lo mismo, que ya, por acuerdo de la Presidencia, pasa la Seguridad que tiene que ver con la Guardia Nacional (completa) ya pasa a la Secretaría de la Defensa. Ya la cuestión operativa está a cargo de la Secretaría de la Defensa, pero voy a emitir un acuerdo para que ya, por completo, la Guardia Nacional dependa de la Defensa, y esperamos nada más el resultado de la reforma [constitucional]”, añadió el mandatario.
Tras las elecciones federales de 2021, López Obrador dijo que tenía tres pendientes en materia de reformas electorales para la segunda mitad de su administración: la reforma eléctrica, la reforma electoral y la reforma de la Guardia Nacional, con la que pasaría a depender de la Sedena.
Tortuguismo burocrático, el principal pendiente
El presidente señaló que esta semana enviará el acuerdo a las dependencias y añadió: “Voy a hacer una reestructuración de la Secretaría de Seguridad Pública y voy a incluir esta función especial, porque llevo ya tiempo expidiendo indultos, amnistías, dando instrucciones de libertad y no avanzamos. Y claro, no es nada más un asunto del Ejecutivo, pero en una época de Transformación, no se puede actuar con tortuguismo burocrático, y menos cuando se trata de Justicia”.
López Obrador no especificó el método que utilizará para concretar este acuerdo. “Lo voy a analizar en la esfera de mis atribuciones. Puedo modificar, si es necesario, el reglamento interno en el Gobierno, puede ser por decreto, puede ser una reforma a la Ley de la Administración Pública, independientemente de lo que resulte sobre la Reforma Constitucional. Pero sí hacen falta estos cambio y ya no quiero que vaya pasando el tiempo, porque la verdad no faltan cosas y no quiero que se nos quede nada. Y entre más pronto se haga, mejor, para que el tiempo que nos queda, la decisiones que todavía se están tomando, terminen consolidadas al fin de mi gobierno”.
- El presidente afirmó que debe de utilizar los márgenes legales que tiene para avanzar, mientras no se viole la Constitución. “Tengo un problema [de inseguridad] que resolver, tengo que entregar buenas cuentas al pueblo. Y tengo un bloque opositor que no ayuda en nada”, añadió, y puso como ejemplo la discusión de la reforma eléctrica.
- Cuestionado sobre si este acuerdo sería brincarse al Poder Legislativo, el presidente lo descartó, pues de todas maneras presentará la iniciativa para Reforma Constitucional correspondiente, la cual consideró necesaria para que la oposición no pueda revertir esta decisión y consolidar a la Guardia Nacional.
“Yo ya voy a estar jubilado, pero no quiero que pase un sexenio -toco madera-, o dos o tres años, y que ya vuelva la Guardia Nacional a Gobernación, así como estaba antes. O a la Secretaría de Seguridad Pública y ahí están los políticos e ingenieros como García Luna, que inmediatamente quieren resolver todo con cámaras. Pura transa, la compra de los equipos”, finalizó.
El Ejército de AMLO no es distinto al de gobiernos anteriores: TWP
«El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), durante su campaña electoral se comprometió a sacar al Ejército de las calles, el cual desde 2006 hace labores policiales en el país. Sin embargo, ahora el mandatario ve en las Fuerzas Armadas a la única parte confiable y disciplinada del Estado mexicano, y aliada en su lucha contra la corrupción», refirió Jorge Javier Romero, columnista del medio The Washington Post.
- «Antes de asumir la presidencia, López Obrador fustigaba frecuentemente que las Fuerzas Armadas realizaran estas labores. Sin embargo, ahora afirma que en su administración las cosas ya cambiaron y habla de pueblo uniformado para referirse a los soldados, y sus seguidores señalan que no se está militarizando a la sociedad sino socializando a los militares y que los militares ya no masacran a sus adversarios —como ocurrió en los gobiernos anteriores— porque solo siguen órdenes y el presidente ya no les ordena masacrar», mencionó el columnistas
Así mismo recalco que los datos no se corresponden con la narración oficial «la intervención de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad durante los últimos tres años ha dependido de la trayectoria abierta durante las administraciones anteriores: no solo no reduce la violencia sino que la exacerba y ha sido el detonante principal del crecimiento de la tasa de homicidios que ha aumentado, con altibajos, de los ocho por cada 100,000 habitantes que hubo en 2007 a 29 por cada 100,000 habitantes en 2021.»
- El índice de letalidad de las actuaciones del Ejercito y la Marina en enfrentamientos con civiles armados no ha disminuido: según el último dato disponible, de 2020, por cada militar caído mueren 39.5 civiles. Esto es un récord en los últimos 15 años y es el quinto año consecutivo en el que este indicador aumenta. Las violaciones a los derechos humanos están lejos de haber disminuido.
Además, resaltó que «el gobierno actual ha optado por la militarización de distintas funciones estatales de carácter civil como los puertos, las aduanas, la marina mercante, los aeropuertos o la construcción de grandes obras de infraestructura».
«El presidente López Obrador se ha empecinado en profundizar la militarización, con los mismos malos resultados y con el riesgo de que los militares empoderados se aferren a su nuevo protagonismo político», finalizó Romero/Agencias-PUNTOporPUNTO