Pagar los intereses, comisiones y amortizaciones que integran el costo financiero de la deuda y otros financiamientos públicos en México ha resultado más gravoso a lo largo del año que el gasto hecho en inversión física, bajo la cual se encuentra todo lo ejercido en infraestructura pública, exhiben los datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Pública (SCHP).
- Entre enero y octubre pasados, Hacienda reportó que al sumar los pagos derivados de la deuda pública, el rescate bancario y el financiamiento para empresas productivas, banca de desarrollo y diversos fondos y fideicomisos se habían erogado 611 mil 388 millones de pesos, 70 mil 663 millones más que lo destinado a obra pública.
- Sólo entre los abonos de interés y comisiones para una deuda pública que este año se disparó con el encarecimiento del dólar frente al peso, se habían pagado entre enero y octubre 330 mil 293 millones de pesos por este concepto y otros 43 mil 330 millones de pesos se abonaron al rescate bancario que hace más de dos décadas consume parte del dinero público, y ahora lo hace en el marco de la emergencia por Covid-19.
El resto de los recursos que se van en costo financiero derivan de las operaciones de la banca de desarrollo, fondos y fideicomisos públicos para actividades agropecuarias, pesqueras y mineras, el Fondo Mexicano del Petróleo y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Las presiones fiscales del financiamiento detonan el rezago en infraestructura. A lo largo de 2020 se han pagado 540 mil 725 millones de pesos etiquetados como inversión física y más de una tercera parte de esos recursos se ejercieron desde Petróleos Mexicanos (Pemex), exhiben los datos abiertos de Hacienda.
En el periodo de enero a octubre de 2020, con la pandemia en la mayor parte de ese periodo y la baja en los precios del crudo, se gastaron 179 mil 138 millones de pesos en infraestructura para la principal empresa productiva del Estado, por arriba de los 115 mil 418 millones de pesos que fueron a pagar la deuda de más 2.1 billones de pesos que recae en la petrolera.
- Los recursos que fueron a infraestructura en Pemex son más del doble de lo que gastaron en conjunto la Secretaría de Comunicación y Transportes (SCT), con 34 mil 600 millones de pesos al mes de octubre; la CFE, con 23 mil 832 millones adicionales; los 14 mil 482 millones registrados desde la Defensa Nacional, ahora la constructora de los proyectos bandera del gobierno federal, y de lo que se ha pagado por las instalaciones de salud.
De enero a octubre, la administración federal ha pagado 14 mil 525 millones de pesos por infraestructura de toda la red pública de salud, incluidos el Instituto Mexicano del Seguro Social, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, los institutos y hospitales de especialidades y la Secretaría de Salud.
10 estados aumentaron su deuda pública a causa del coronavirus
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), señaló que durante el segundo trimestre del 2020, periodo en el que arreciaron las medidas sanitarias por la pandemia de coronavirus (COVID-19) en México, diez estados tuvieron un aumento en su deuda pública.
De acuerdo con el desempeño de los financiamientos y obligaciones de las entidades federativas, entre el primero y segundo trimestre de este año, 10 estados registraron aumentos, mientras que 22 disminuyeron su deuda.
Al cierre del primer trimestre del 2020, el saldo de los financiamientos y obligaciones de los estados sumó 533,728 millones de pesos. Al cierre del segundo trimestre la cifra era de 552,518 millones de pesos, es decir, tuvo una disminución del 0.22 por ciento.
Los estados que aumentaron su deuda durante dicho periodo fueron:
- Yucatán, con un incremento del 21.2% a su deuda
- Jalisco, 12.3%
- Guanajuato, 6.1%
- San Luis Potosí, 5.7%
- Aguascalientes, 2.3%
- Michoacán, 2.1%
- Nuevo León, 2.1%
- Quintana Roo, 1%
- Estado de México, 0.6%
- Durango, 0.4%
De entre los estados que registraron incrementos en sus financiamientos y obligaciones, Aguascalientes concentra el 73% en participaciones de la banca múltiple y 27% de la banca de desarrollo. Asimismo, Durango tiene el 81% en participaciones de la banca múltiple y 19% corresponde a una deuda quirografaria de corto plazo de la banca múltiple.
- Guanajuato, por su parte, tiene 95% en participaciones de la banca múltiple y 3% de la banca de desarrollo, 2% en ingresos locales de la banca múltiple. Jalisco tiene 60% en participaciones de la banca múltiple y 23% de la banca de desarrollo, 5% de aportaciones de la banca múltiple, 6% de deuda quirográfica de corto plazo y 2% de aportaciones de la banca de desarrollo.
En tanto, el Estado de México, tiene 65% en participaciones de la banca múltiple, 22% de la banca de desarrollo, y otro 11% corresponde a ingresos locales por emisiones bursátiles. Michoacán, gobernada por Silvano Aureoles, tiene 13% de participaciones de la banca múltiple, 60% de la banca de desarrollo, 13% es deuda de corto plazo quirografaria de la banca múltiple y 13% de aportaciones de la banca de desarrollo.
- Nuevo León, bajo el mando de Jaime Rodríguez Calderón, tiene 45% en participaciones de la banca múltiple, 16% de la banca de desarrollo, 7% de ingresos locales de la banca múltiple, 1% de aportaciones, 2% de ingresos locales de la banca de desarrollo, 2% de deuda quirografaria de corto plazo y 27% de emisiones locales por emisiones bursátiles.
- San Luis Potosí, tiene un 82% de participación en la banca múltiple, 12% de deuda quirografaria de corto plazo y 6% de ingresos locales de la banca múltiple. Quintana Roo, tiene el 64% de participaciones de la banca múltiple, 28% de la banca de desarrollo y 8% de deuda quirografaria de corto plazo de la banca múltiple.
- Yucatán, por su parte, registra el 23% de participaciones de la banca múltiple, 48% de la banca de desarrollo, 21% aportaciones de la banca múltiple y 8% de la deuda de corto plazo.
De acuerdo con Milenio, un crédito quirografario es un préstamo a corto plazo, cuyo objetivo es hacer frente a las necesidades de recursos transitorios de quien lo solicita, dependiendo de su solvencia moral y económica.
Por otro lado, según la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, las instituciones de banca de desarrollo son entidades de la Administración Pública Federal, con personalidad jurídica y patrimonio propio, constituidas con el carácter de sociedades nacionales de crédito. Su objetivo fundamental es facilitar el acceso al ahorro y financiamiento a personas físicas y morales, así como proporcionar asistencia técnica y capacitación.
También refiere que la labor de la banca múltiple, dentro del Sistema Financiero, es contactar a oferentes y demandantes de recursos financieros para que a través de dicha función de intermediación financiera, se apoye el funcionamiento de la economía./Agencias-PUNTOporPUNTO