La Secretaría de Hacienda informó que concluyó el proceso de refinanciamiento de la deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex), con lo cual el pasivo de corto plazo de la petrolera disminuyó en 3 mil 200 millones de dólares y se redujo su presión financiera, entre 2024 y 2030, en 10 mil 500 millones de dólares.
- En ese proceso, el Gobierno federal aportó 3 mil millones de dólares para potenciar el refinanciamiento de los vencimientos de corto plazo de la empresa.
- La operación consistió en intercambiar bonos con vencimiento en el corto plazo por un nuevo bono a 10 años. Parte de los recursos se utilizaron para recomprar bonos que se encontraban a menor precio y con vencimiento a mediano plazo.
- Hacienda aseguró que la operación, que se realizó coordinadamente por Hacienda y Pemex, fue considerada por las calificadoras y analistas como un éxito.
“Los recursos del Gobierno federal utilizados en esta operación no ponen en riesgo la ejecución del gasto público ni implicaron ningún recorte presupuestal. La instrucción del presidente de México es apoyar a la empresa petrolera, que es de todos los mexicanos”, añadió la Secretaría en un comunicado de prensa.
Reforma fiscal, un salvavidas para Pemex
La deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex) de más de 113,000 millones de dólares solo se controlará con una reforma fiscal que elimine la dependencia que por más de 40 años ha tenido el gobierno sobre los ingresos de esta empresa productiva del Estado.
- Si bien, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha brindado apoyos a la petrolera mediante reducciones de impuestos, inyecciones de capital y pagos de vencimientos; la deuda no se podrá contener mientras su régimen fiscal esté basado en el endeudamiento de la empresa.
- La reforma fiscal permitiría una profunda transformación del régimen fiscal de Pemex, así como realizar cambios institucionales que le den autonomía de gestión y presupuestal para tomar sus decisiones de inversión en función de la lógica de la industria petrolera y no de las necesidades de corto plazo del Estado mexicano
México requiere una reforma fiscal integral que recaude al menos 21 puntos del Producto Interno Bruto (PIB), que es el promedio de lo que se recauda en Latinoamérica, pero el país está muy por debajo de este promedio con apenas el 16%, comentó el especialista.
“Con una reforma se podría aligerar la carga fiscal de Pemex de manera permanente, apoyarla coyunturalmente para disminuir sensiblemente su deuda y reestructurar los pasivos”, comentó Ruiz.
La petrolera ha sido utilizada como una de las principales fuentes de ingresos fiscales de México y si el gobierno ya no dependiera de estos ingresos, Pemex podría concentrarse más en la transformación industrial, la cual daría mayor seguridad energética al país.
Deuda de Pemex, le pega en calificación y grado de inversión
De acuerdo con la agencia Moody´s, los apoyos que está otorgando el gobierno permitirán que la deuda de Pemex se reduzca en cerca de 20,000 millones de dólares en el periodo 2021-2023.
- La deuda de Pemex se generó porque ha tenido regímenes fiscales basados en ingresos y no en utilidades, que la obligan a endeudarse para pagar impuestos.
«Durante 40 años, Pemex ha tenido un régimen fiscal asfixiante y que al menos en los últimos 25 años la ha obligado a endeudarse para pagar impuestos», destacó Fluvio Ruiz
Las consecuencias de esa decisión no se pueden resolver en tres o cuatro años. Por definición, la empresa se endeuda cada año y en este siglo ha tenido utilidades después de impuesto solo en dos años.
- El problema del régimen fiscal de Pemex es que conforme los precios del petróleo disminuyen, el peso de las contribuciones de Pemex es mayor, contrario a lo que se esperaría, que fueran menores.
- Si bien la tasa de Derecho de Utilidad Compartida (DUC) ha ido reduciendo y para el 2022 será de 40%, faltan elementos para que esta disminución se refleje en un aligeramiento significativo de la carga fiscal total de Pemex.
Con la reducción que se dio a partir de la pandemia en los precios del crudo, la petrolera deduce a niveles más bajos respecto a años anteriores.
“El limite que tiene Pemex para deducir ya es muy bajo y al final del día, paga sobre una proporción de su costo de operación que es mayor cuando el precio del barril es más bajo”, señaló el analista del sector energético.
A Pemex le favorecería que los límites de deducción se ajustaran según el aumento de los costos de producción de los últimos 15 años y de la complejidad geológica de los yacimientos a explotar.
Se podría incluso asignar un régimen específico que permita una explotación con rentabilidad a zonas de complejidad geológica./Agencias-PUNTOporPUNTO