Al 10 de junio de 2021, cada mexicano paga 20.28 pesos por litro de la gasolina de este tipo, es decir 4.28 pesos más si se compara con el valor que tenía en enero de 2017, cuando inició la liberalización de precios, y pese a los estímulos fiscales aplicables a la enajenación de gasolinas que el gobierno federal aplica para evitar un mayor precio.
- De acuerdo con información de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), encargada del seguimiento de los precios y de regular el mercado de combustibles en el país, de los dos petrolíferos que se distribuyen para uso vehicular a gasolina, la regular es la que ha experimentado el mayor aumento de precio en los últimos cuatro años, cinco meses y diez días, de 26.75%.
Actualmente, de acuerdo con información de la Secretaría de Energía (Sener), en México circulan por la red de carreteras alrededor de 38.5 millones de vehículos a gasolina, de los cuales 75% utilizan combustible tipo regular, es decir casi 29 millones de unidades.
En tanto, la gasolina premium aumentó su precio promedio nacional en 24.01% durante el mismo periodo, de manera que hoy se pagan 22.10 pesos por litro, respecto a los 17.82 pesos que se pagaban en enero de 2017. Sin embargo, este tipo de gasolina es empleada por un menor número de vehículos, aproximadamente 9.8 millones.
- Parte del aumento en el precio al público tiene que ver con la recuperación de la cotización internacional, considerando que Pemex, que es el mayor importador de gasolina, pagó en abril 79.981 dólares por cada barril importado, el mayor precio registrado desde mayo de 2020, cuando alcanzó su mínimo histórico de 31.582 dólares por barril a causa de la pandemia de Covid-19, según reporta la petrolera en su Base de Datos Institucional.
- En lo que va del año México ha tenido que recurrir a los mercados externos para complementar la demanda nacional, en virtud de que las seis refinerías que opera Pemex cubren 42.5% del consumo nacional.
Las compras externas, sobre todo del mercado estadounidense, cubren el restante 57.4%, de ahí que México depende no sólo del suministro de ese mercado, sino también de los precios que fijan los refinadores de ese país, basados en los precios
internacionales del petróleo.
Por lo que respecta al diesel, la información disponible tanto en la CRE como en la plataforma PetroIntelligence, el aumento de precio en el periodo de referencia ha sido de 27.59%, de manera que ha experimentado el mayor aumento entre los tres combustibles automotores que se comercializan en el territorio nacional.
En enero de 2017, cuando inició la liberalización del mercado, cotizaba en 17.07 pesos por litro, y al 10 de junio se vende en 21.78 pesos.
- Este combustible se utiliza fundamentalmente en el transporte público federal de carga y pasaje. Según el reporte estadístico mensual de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), por la Red Nacional Carretera transitan 156 mil 128 autobuses de pasajeros y un millón 151 mil 624 camiones de carga.
- Los movimientos de precios reportados por la autoridad regulatoria muestran que, en el caso de la gasolina regular, llenar un tanque de 40 litros en enero de 2017 costaba al usuario 640 pesos, con un precio promedio nacional de 16 pesos por litro.
Actualmente, el mismo usuario paga 811.2 pesos, es decir 171.2 pesos más por el mismo volumen.
En tanto, llenar un tanque de gasolina premium del mismo volumen costaba 712.8 pesos y ahora requiere pagar 884 pesos. De acuerdo con empresarios gasolineros, el comportamiento de precios de gasolinas en México dista mucho de lo que ocurre en el mercado estadounidense, de donde se importan los mayores volúmenes de combustibles automotores.
- La Agencia de Información Energética de EU (EIA, por sus siglas en inglés) refiere que en ese mercado la gasolina tipo regular tiene un precio promedio equivalente a 15.77 pesos por litro, considerando un tipo de cambio de 19.67 pesos por dólar.
Es decir, hay una diferencia de 4.51 pesos entre los precios promedio nacionales en México y Estados Unidos.
Gasolina producida en Deer Park no puede ser importada
La compra de la refinería de Deer Park fue señalada por la administración del presidente López Obrador como un logro en materia de autosuficiencia de gasolina y diésel. Sin embargo, la actual normativa mexicana impide que la gasolina producida por este complejo sea importada a México, por lo que el impacto en la oferta nacional dependerá de la habilidad de Pemex de realizar operaciones de intercambio en el extranjero.
- “Deer Park no produce gasolina del grado que se consume en México, porque está libre de oxigenantes. Esto tiene que ver con que el Congreso retrasó la entrada en marcha de la NOM-016 de la CRE. Podría parecer un problema menor, pero importar esta gasolina terminaría por dar luz verde a la norma, lo que beneficiaría más a los importadores privados que al propio Pemex”, explicó una fuente que pidió no ser identificada.
La fuente dijo que, si el análisis fuera estrictamente numérico, los 340,000 barriles diarios producidos en Deer Park llevarían la producción de Pemex a 810,000 barriles diarios, por lo que la eventual puesta en marcha de Dos Bocas, si es que ocurre, ayudaría a la petrolera a cumplir con su meta. Sin embargo, advirtió que romper el impedimento normativo resultaría ‘suicida’.
- Para que Pemex pudiera producir un mayor volumen de gasolina que cumpla las características exigidas por la NOM-016, tendría que realizar una importante inversión en la reconfiguración del Sistema Nacional de Refinación, razón por la cual el Congreso decidió retrasar la norma en beneficio de la petrolera estatal.
- La alternativa para Pemex sería realizar un intercambio en el mercado de líquidos para obtener una utilidad o una cantidad mayor de barriles de gasolina que sí se puedan importar a México. Otra opción sería vender la gasolina directamente y utilizar las ganancias para comprar este tipo de gasolina y diésel.
David Maravilla, lead analyst de Horizon Client Access, dijo que esta condición ocurrirá siempre y cuando Pemex y la administración federal no encuentren la forma de hacer una excepción legal en favor de la petrolera.
“Al final sólo sería aplicable en el caso de que las reglas de importación de combustibles permanecieran como hasta ahora están en vista de la suspensión a los cambios en la Ley de Hidrocarburos. El gran problema es que hay discrecionalidad por parte de Sener para ver a quién le aprueba permisos y bajo qué circunstancias, por lo que podría decir que esa gasolina está permitida para Pemex y para otros no”, advirtió Maravilla.
- El experto señaló que hay zonas del país donde los privados ya importan más gasolina que Pemex, y que esta situación no se debe sólo a la capacidad de la petrolera estatal, por lo que un aumento en las importaciones de Pemex tendría que enfrentarse a una nueva realidad en el mercado mexicano.
Añadió que esta alza en el volumen no representa un “fortalecimiento de Pemex”, pues no refleja el mejoramiento de la infraestructura actual de Pemex, sino sólo un aumento en el control de la empresa sobre el volumen que se importa al país.
- David Rosales, analista del sector, destacó que a Pemex TRI le conviene más vender la gasolina en el sitio donde está ubicada Deer Park, y dijo que la cantidad de gasolina que entra al país debería depender de la demanda nacional, y no de lo que ocurre en esta refinería.
“Realmente el tema es de balance: si vamos a seguir con el nivel de consumo en México, cuánto importa depende de la producción doméstica, y la diferencia entre demanda y producción debe venir de Estados Unidos, y no importa tanto si es de Deer Park o no”, consideró/Agencias-PUNTOporPUNTO