Incluso cuando el mundo rompe récords de calor, uno tras otro, y avanza hacia umbrales críticos de calentamiento, todavía puede sufrir olas brutales de frío mortal en forma de bombas ciclónicas que causan un tiempo gélido y nieve profunda, y dan motivos a quienes niegan que la crisis climática sea real o significativa.
- Pero algunos científicos afirman que el cambio climático —y más concretamente el rápido calentamiento del Ártico— puede estar aumentando la probabilidad de que el aire polar y gélido se desplace hacia el sur.
- A inicios de 2023 el noreste de EE.UU., densamente poblado, fue un ejemplo en tiempo real de cómo la tendencia al calentamiento a largo plazo se ve interrumpida por un frío tremendo que bate récords.
Febrero será recordado por el invierno que no fue en la región: fue el enero más cálido registrado en casi todas las ciudades del noreste. En Nueva York fue el primer mes en el que se registraron temperaturas superiores a la media todos los días, y la primera vez que el mes terminó sin nevadas mensurables en la ciudad.
Pero el péndulo meteorológico se movió con fuerza hacia el otro extremo, cuando el calor récord se convertirá en frío récord, con decenas de hitos de bajas temperaturas previstos. Donde la sensación térmica descendió a niveles peligrosos de -34° C para millones de personas.
¿Qué está pasando?
Frío extremo
Aunque los inviernos son cada vez más cálidos en general y los registros cálidos superan a los fríos, el mes de enero tajo una ola de frío brutal a algunas zonas de Asia.
- Las temperaturas en la ciudad de Mohe, en el norte de China, cayeron en picada hasta los -53 °C, la temperatura más baja jamás registrada en el país.
- El frío feroz y las cantidades récord de nieve en Japón causaron la muerte de al menos cuatro personas en lo que el secretario jefe del Gabinete del país, Hirokazu Matsuno, calificó de «ola de frío única en una década».
También cayeron récords de bajas temperaturas en varios lugares de Corea del Sur.
- «El aire frío del Polo Norte llegó directamente a Corea del Sur», después de viajar a través de Rusia y China, dijo a CNN el portavoz de la Administración Meteorológica de Corea, Woo Jin-kyu.
- Más de 150 personas murieron en Afganistán cuando las temperaturas alcanzaron mínimos de -28 °C, en lo que hasta ahora ha sido uno de los inviernos más duros del país.
Yakutsk, la ciudad más fría del mundo, en Siberia oriental, registró temperaturas de -62,7 °C, las más bajas en más de dos décadas, según los meteorólogos.
¿Cómo se explica este frío?
El tiempo está íntimamente ligado a la corriente en chorro, un río ondulado de aire que se desplaza rápidamente en lo alto de la atmósfera, más o menos al nivel al que vuelan los aviones.
- Cuando la corriente en chorro gira hacia el sur, el aire frío del Ártico puede sumergirse con ella en las latitudes medias, la parte de la Tierra donde vive la mayor parte de la población de Norteamérica, Europa y Asia.
- Eso es lo que ocurrió en Asia en enero, según explicó a CNN Judah Cohen, climatólogo del Instituto Tecnológico de Massachusetts y director de previsiones estacionales de Investigación Atmosférica y Medioambiental.
- Cuando la corriente en chorro se retire hacia el norte, el aire cálido también se desplazará hacia el norte. Una gran oscilación de altas presiones sobre Europa en enero provocó temperaturas invernales récord y dejó algunas montañas sin nieve.
También hay que tener en cuenta otro factor: el vórtice Polar Ártico
Se trata de un cinturón de fuertes vientos que rodea el aire helado del Ártico, que se encuentra a gran altura en la estratosfera, por encima del nivel de la corriente en chorro, alrededor del Polo Norte.
- Según Cohen, el vórtice polar ártico es como un trompo. En su estado normal, gira muy deprisa, manteniendo el aire frío cerca del centro, como un patinador sobre hielo que gira rápidamente sobre el terreno, con los brazos bien cruzados sobre el pecho.
- Pero de vez en cuando se para. Es como si el patinador se topara con una grieta en el hielo y saliera volando, con los brazos agitados. El vórtice polar ártico se tambalea, se estira y distorsiona, lleva aire frío y cambia la trayectoria de la corriente en chorro.
- La devastadora ola de frío que azotó Texas en 2021, dejando sin electricidad a gran parte del estado y provocando más de 240 muertes, fue causada por uno de estos eventos, al igual que el frío histórico que azotó Estados Unidos a finales de diciembre.
Algunos científicos afirman que pequeñas perturbaciones en el vórtice polar pueden ayudar a explicar el reciente frío extremo en Asia.
¿Cómo encaja el Cambio Climático?
La teoría se centra en el Ártico, que se está calentando hasta cuatro veces más rápido que el resto del mundo como consecuencia de la contaminación que atrapa el calor por la quema de combustibles fósiles.
- Algunos científicos sostienen que este calentamiento está provocando cambios en la corriente en chorro y el vórtice polar ártico, causando inviernos extremos más frecuentes.
- Esta idea cobró fuerza tras la publicación de un estudio de 2012, del que es coautora Jennifer Francis, científica del Centro de Investigación Climática Woodwell de Massachusetts.
- En él se sugería que el calentamiento del Ártico estaba reduciendo la diferencia entre las temperaturas frías del norte y las cálidas del sur, lo que daba lugar a una corriente en chorro más débil y ondulante, que empuja el aire muy frío hacia el sur.
El artículo de Francis abrió el debate y, desde entonces, muchos otros científicos han analizado la teoría.
Uno de los trabajos más destacados, del que Cohen fue coautor en 2021, afirma haber encontrado vínculos claros entre el calentamiento del Ártico y las alteraciones del vórtice polar.
- El argumento de Cohen es que el calentamiento especialmente rápido de una zona del Ártico, al norte de Rusia occidental, combinado con el aumento de las nevadas en Siberia, amplifica la ondulación de la corriente en chorro y empuja la energía hacia arriba. Esto desvía al vórtice polar de su trayectoria, provocando la salida de aire muy frío.
El estudio relaciona el calentamiento del Ártico con las condiciones invernales extremas en algunas zonas de Asia y Norteamérica, como la prolongada ola de frío que azotó Texas en 2021.
«No estamos discutiendo que los inviernos sean cada vez más fríos en general», dijo Cohen. El mundo está batiendo muchos más récords de calor que de frío.
Pero la idea de que el cambio climático significará menos oscilaciones entre temperaturas extremas es «una simplificación excesiva», dijo.
- James Screen, catedrático de Climatología de la Universidad de Exeter, explicó a CNN que se han producido varios inviernos fríos en Estados Unidos y Asia que han coincidido con inviernos cálidos en el Ártico. «El reto al que nos enfrentamos es determinar la causa del efecto».
- Screen es coautor de una investigación que utilizó modelos climáticos para predecir qué ocurrirá cuando el hielo marino del Ártico se reduzca aún más. Según el estudio, la pérdida de hielo marino sólo tiene un efecto muy pequeño en la corriente en chorro y no hay indicios reales de que afecte al vórtice polar.
Aunque la investigación apuntaba a inviernos más cálidos en el Ártico y estallidos de frío más al sur, Screen dijo que esto puede «explicarse por la variabilidad meteorológica normal».
- En otras palabras, aunque los inviernos se calienten, seguirán produciéndose fríos extremos, porque así es como funcionan los inviernos.
- Una de las principales críticas a los estudios que relacionan los cambios en el Ártico con el tiempo invernal extremo es que se basan en datos históricos.
«Si nos fijamos más en los datos de los modelos climáticos, no vemos este tipo de vínculos o son muy débiles», declaró a CNN Dim Coumou, profesor de Clima de la Universidad Libre de Amsterdam.
En lo que sí coinciden los científicos es en la necesidad de seguir estudiando estas olas de frío extremo.
¿Cómo afecta el Cambio Climático al Cuerpo Humano?
El cambio climático ha vuelto habituales las temperaturas extremas en los últimos años. Uno de los efectos perniciosos de este problema son visibles en América Latina: los incendios forestales.
- La región concentra la mitad de los bosques primarios del planeta y la frecuencia con la que se presentan estos fenómenos aumentará en un 50% hacia 2050, de acuerdo con las previsiones de la Organización Mundial de las Naciones Unidas (ONU).
- Otro de los efectos perniciosos del cambio climático se siente en la salud de las personas. El calor extremo causó 61.672 muertes en Europa en el verano boreal de 2022, según Nature Medicine.
- Pero el frío excesivo también se perfila como un peligro para el cuerpo humano a corto y mediano plazo. La diferencia es que sus consecuencias suelen manifestarse días después del episodio, a diferencia del golpe de calor, cuyos efectos son más inmediatos.
En la actualidad, el 37% de las muertes están directa o indirectamente relacionadas con el cambio climático, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH). En Europa, a este fenómeno se atribuye el 7% del total de los fallecimientos.
Países del Mediterráneo como Portugal, Italia, Francia y España sienten los efectos del calentamiento global a un ritmo cada vez más acelerado y en la región se espera un aumento mayor de la mortalidad por las altas temperaturas en comparación con otros lugares.
El frío es más peligroso que el calor
El desafío del cambio climático supone un tránsito imprevisible entre temperaturas excesivas altas y bajas que podrían cobrar vidas en los años venideros. Las consecuencias de este fenómeno se traducen en olas de calor frecuentes e inviernos de frío más intenso cuya duración tampoco podría prevenirse debido a la inestabilidad del fenómeno.
- Las estadísticas ofrecen un balance de la letalidad de las temperaturas altas y las bajas. Se estima que en 2030 habrá 250.000 muertes debido a enfermedades sensibles al clima extremo, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
- En contraste, se prevé que las temporadas de frío verán una disminución en los años futuros debido al calentamiento global. Pero las patologías causadas por bacterias serán cada vez más comunes.
Aunque el calor intenso ha cobrado vidas en el mundo entero, el frío es más letal. Las muertes atribuidas a los climas gélidos superan 10 veces a las relacionadas con el aumento de temperatura.
- Un estudio internacional mostró que las bajas temperaturas tuvieron una tasa de muertes adicionales de 12,8 por 1.000 entre 1979 y 2019; en contraste, el calor tuvo una de 2,6 por 1.000.
- En específico, el 7,17% de las muertes registradas en Europa fueron causadas por el frío extremo, según un estudio publicado en The Lancet Planetary Health, revista especializada en análisis ambiental.
- En la actualidad, pocas personas mueren por hipotermia, que ocurre cuando la temperatura del cuerpo disminuye a menos de 35°C y el pulso comienza a menguar hasta que la piel se ve azulada; si la atención médica tarda, viene un paro cardíaco.
Las principales causas de fallecimiento son las reacciones del cuerpo ante climas gélidos, como el colapso circulatorio, el aumento de la presión arterial de los órganos internos y el fallo orgánico.
En términos generales, la mitad de estas muertes se deben a trombosis cerebral y solo una cuarta parte es por infecciones respiratorias. Otros cuadros derivados de las temperaturas bajas con alta letalidad son la insuficiencia cardíaca, la isquemia, condición en la que se detiene el tránsito de la sangre en las arterias; el ictus que se origina por la ruptura de un vaso sanguíneo y la arritmia, según el análisis publicado en Circulation, revista científica para la American Heart Association.
- Algunas olas de frío han dejado una huella difícil de borrar: el caso de España en 2017, por ejemplo. Con la emergencia climática de ese año hubo 348 muertos diarios, según el estudio del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII). Esta misma institución explicó que de 2000 a 2009 hubo 10,460 muertes por las bajas temperaturas.
- Las malas condiciones de salud tienden a empeorar con las bajas temperaturas o inviernos con fuertes ventiscas. Además, los virus que provocan enfermedades respiratorias e infecciosas suelen aumentar en invierno, pues en los meses calurosos la probabilidad de contagio se mantienen en niveles poco alarmantes.
Algunos padecimientos como neumonía, tos, gripe o covid 19 ponen en riesgo la vida de las personas durante temporadas gélidas si se tiene un acceso nulo a los servicios médicos correspondientes.
Las olas de calor superarán la letalidad del frío
Aunque las bajas temperaturas muestran un índice mayor de letalidad que el calor extremo, debido el calentamiento global se podrá hablar de más muertes relacionadas con las temperaturas elevadas debido a enfermedades como la hipertensión o los problemas respiratorios. Algunas poblaciones son más sensibles que otras: la fatiga y los golpes de calor afectarán más a los niños y ancianos.
Con las olas de calor, los daños para la población en general también se disparan. En épocas de altas temperaturas, cada grado representa un riego hasta tres veces superior al frío extremo.
A diferencia de la exposición a climas gélidos, caso en los que los síntomas pueden tardar semanas en aparecer, el calor ataca de forma directa, con repercusiones agresivas en cuestión de horas. El golpe de calor puede ser fatal si no se trata rápidamente.
- La exposición prolongada a temperaturas elevadas puede, además, causar deshidratación, insuficiencia renal, problemas cardíacos y otras afecciones graves. La letalidad del calor puede verse exacerbada por la falta de acceso a aire acondicionado, agua potable y atención médica adecuada.
- La emergencia climática ha disparado los fallecimientos en varias regiones del mundo. Un estudio internacional publicado en 2021 estimó que un 37% de los decesos debidos a las altas temperaturas serían evitables si los gobiernos se preparan para detener los efectos adversos.
- Países como Afganistán, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá son los que tendrán más daños debido a la economía endeble, el crecimiento de la población y la disponibilidad escasa de atención médica, de acuerdo con un análisis realizado en la Universidad de Bristol del Reino Unido.
Algunas naciones de Europa como Alemania, Bélgica y los Países Bajos se encuentran en peligro porque están poco preparados para enfrentarse a olas de calor tan repetidas. En la región de América Latina y el Caribe, los gobiernos de Brasil y México han delineado planes de contención para reducir los estragos de las altas temperaturas.
Por medio de la construcción de paneles solares, viviendas cercanas a grades cuerpos de agua y la instalación estratégica de áreas verdes se pretende reducir el estrés por el clima extremo en las personas. Sin embargo, dependerá del crecimiento económico de cada región realizar estos planes./Agencias- PUNTOporPUNTO