La economía mexicana continúa sin reponerse del impacto que el COVID-19 provocó, y que la dejó en cama durante 2020. Aunque el número de contagios por el virus del SARS-CoV-2 empieza a ceder y las actividades cotidianas se encuentran en un proceso de reactivación, la dinámica económica del país continúa decaída y para “echarla a andar” será necesario establecer nuevas fuentes generadoras de oportunidades laborales y cadenas de producción, señalan diversos análisis.
- El Producto Interno Bruto (PIB) del país registró un retroceso del orden de menos 2.9 por ciento en el primer trimestre del año comparado con el mismo periodo de 2020, lo que representa seis trimestres consecutivos de caídas anuales.
- Se trata de un comportamiento no registrado desde 1982, un periodo denominado en México como “la década perdida”.
18.3 por ciento fue la disminución total de la inversión en 2020 comparado con 2019
Esta estimación oportuna del PIB elaborada por el INEGI es menos catastrófica que la pronosticada por los especialistas consultados por el Banco de México (Banxico), quienes esperaban que la tasa anual de crecimiento para ese trimestre fuera de menos 3.8 por ciento.
Comparado con el trimestre anterior, el PIB mexicano mostró un avance de 0.4 por ciento de enero a marzo de este año.
Este crecimiento trimestral de 0.4 por ciento sorprendió positivamente frente a las expectativas del mercado que pronosticaba un avance de cero por ciento, aunque la economía mexicana no deja de mostrar un rezago importante, advierte el área de análisis de Grupo Monex.
- En los dos trimestres previos, la economía del país registró un crecimiento de 3.3 y 12.4 por ciento en su variación trimestral, por lo que la tasa de crecimiento de 0.4 por ciento constituye una notable desaceleración, señala el análisis.
- “La economía mexicana sigue mostrando un estado de atonía y gran vulnerabilidad ante la evolución de la pandemia. A pesar de ello, las cifras del primer trimestre son mucho mejores de lo que esperábamos ante las múltiples contingencias que se presentaban”, apunta Monex.
- En las mediciones en torno al crecimiento anual de los tres grupos de actividad en el primer trimestre de 2021, destaca que sólo las actividades primarias mostraron un avance con 2.8 puntos porcentuales, aunque en su comparación trimestral fueron las únicas que cayeron.
El sector primario fue el único que registró un avance durante 2020 en medio de la crisis sanitaria y económica provocada por la pandemia de COVID-19, recuerda México ¿Cómo vamos?
Además el organismo advierte que el regreso a la “normalidad” y la reactivación de la vida cotidiana no será suficiente para que la actividad económica nacional se recupere del retroceso que la pandemia ocasionó.
Se necesitan nuevas fuentes generadoras de oportunidades laborales y de cadenas de producción que además de detonar una mayor actividad económica nacional puedan beneficiar a los habitantes del país
México ¿Cómo vamos?
“La inversión funge como el principal motor de la economía al brindar un nuevo horizonte de posibilidades a raíz de los recursos que los inversionistas privados o el sector público destinen en cierto sector o industria”, explica el organismo.
Pero los niveles de inversión total del país han mostrado una tendencia a la baja al contraerse 18.3 por ciento menos en 2020 comparado con 2019 y en ese mismo año la inversión disminuyó 4.6 por ciento anual, advierten los datos mostrados por México ¿Cómo vamos?
Porvenir de reactivación positivo
El periodo de enero a marzo será el último con una tasa anual de crecimiento negativo, toda vez que la base de comparación con el segundo trimestre del 2020 es históricamente baja, apunta el Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).
Otros dos elementos que considera el IDIC al momento de predecir que la tasa de crecimiento del país será positiva es que el avance económico de Estados Unidos provocará un efecto positivo en México, además de que la tendencia de la recuperación industrial se asociará a la del sector de servicios.
- Pese a este pronóstico positivo, el IDIC señala que se debe considerar la necesidad de aplicar estrategias que garanticen su sostenibilidad, esencialmente en el sector industrial y en el mercado interno. De lo contrario el crecimiento no superará los dos puntos porcentuales a tasa anual.
- El instituto también sugiere aprovechar la expansión económica de Estados Unidos que reportó un crecimiento anual del orden de 1.6 por ciento durante el primer trimestre de 2021, de acuerdo con información del Buró de Análisis Económico del Departamento de Comercio dada a conocer la semana pasada.
Urge reactivar la inversión para crecer
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), que dirige Carlos Hurtado López, aseguró que aún es prematuro pensar en una recuperación sólida de la economía mexicana, pues es todavía frágil y sin cambios de actitud frente a la atracción de inversiones.
Sin un compromiso real de las autoridades, a fin de recobrar la confianza de la inversión, será difícil aprovechar las oportunidades que se presentan para el país en los próximos años, por la bonanza de la economía estadunidense, las tendencias de relocalización y algunas fortalezas internas”, señaló.
- El organismo advirtió que sin ese cambio de actitud ante la inversión es poco probable una recuperación importante; por lo que anticipó que podría ser hasta 2024 cuando se recuperen el nivel del PIB de 2018.
- Para el CEESP, la debilidad de la economía se refleja en buena medida por el impacto de la crisis sanitaria, pero hubiera sido menos agresiva si la economía no hubiera estado ya en un proceso de desaceleración desde 2019, que terminó en la primera caída del PIB después de 9 años consecutivos con variaciones positivas.
Dijo que hacia el 2018 se observa una tendencia de crecimiento sostenido de la generación de valor agregado de las empresas, a pesar de las bajas tasas de crecimiento del PIB, con una economía orientada a la inserción en los mercados externos y con políticas para impulsar la liberalización económica, la mejora regulatoria y la competencia.
Recordó que buena parte del fortalecimiento de la actividad productiva respondió a las reformas estructurales y a la facilitación de la inversión.
La mejoría de la productividad en la etapa más reciente se relaciona con el dinamismo del sector externo como motor del crecimiento, así como a las mejores prácticas de gestión y asimilación de mejoras tecnológicas en la planta productiva mexicana”, señaló.
Tropiezos
Expuso que, si bien dichos esfuerzos no estuvieron exentos de tropiezos, desaciertos y corrupción, entre otros problemas, la principal falla fue la exclusión de diversos grupos sociales y regiones del proceso de modernización del país, que ahondó diferencias relativas.
Pero lo correcto es trabajar en corregir esos puntos, no en echar por la borda los avances para volver a políticas del pasado, antes de la liberalización comercial, reforma económica y regulatoria y políticas sociales.
- En el primer trimestre del 2021 el gobierno federal erogó 154 mil 347 millones de pesos en gasto de inversión física, que representó una caída de 3.5% comparado con los 153 mil 765 millones de pesos del mismo periodo de hace un año.
- La inversión física es el gasto que realizan las diversas entidades del sector público en construcción, conservación de obras y adquisición de bienes de capital, como maquinaria, inmuebles e infraestructura.
De acuerdo con el reporte de finanzas públicas de la Secretaría de Hacienda en el rubro de comunicaciones y transportes se tuvo una inversión de 6 mil 040.3 millones de pesos que representó un retroceso de 30% con respecto a los 8 mil 248.7 millones de pesos del primer trimestre de 2020.
Cae la inversión pública
El sector energético también tuvo un revés, incluyendo el área de hidrocarburos y eléctrico; con erogaciones en su conjunto por 64 mil 642.8 millones de pesos, que representó un tropiezo de 17%. A su interior, las inversiones en hidrocarburos cayeron 15.8%, con 61 mil 546.4 millones de pesos destinados.
- En el sector eléctrico la caída fue de 34.8%, el equivalente a 3 mil 096.3 millones de pesos, por debajo de los 4 mil 568 millones de pesos aún del primer trimestre del año anterior, esto aun cuando el gobierno impulsó cambios en las leyes para ambos sectores.
Para el rubro de abastecimiento, agua potable y alcantarillado, se destinaron 576.7 millones de pesos, una caída de 1.0%.
Las áreas de educación y salud fueron los más favorecidos, pues el primero tuvo erogaciones por 140 millones de pesos, un incremento de 5.3%; mientras que salud tuvo inversiones físicas por mil 910.4 millones de pesos en el primer trimestre del año, que representó un alza de 41.3 por ciento./Agencias-PUNTOporPUNTO