La economía de México está perdiendo impulso, indicó el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) al interpretar sus dos indicadores sobre el Estado y rumbo de la producción de manufacturas, el consumo y los servicios en el país.
- Por un lado, el Indicador IMEF Manufacturero de enero bajó 1.5 puntos respecto al mes de diciembre, situándose en la línea del umbral (50.0).
- El Indicador IMEF varía en un intervalo de 0 a 100 puntos y el nivel de 50 puntos representa el umbral entre una expansión (mayor a 50) y una contracción (menor a 50), de la actividad económica.
- Por otra parte, el Indicador IMEF No Manufacturero mantuvo su tendencia de expansión al cerrar el primer mes del año en 52.2 unidades, sugiriendo así la continuación del crecimiento en los sectores de servicios y comercio.
“Los indicadores IMEF Manufacturero y No Manufacturero del mes de enero sugieren que la economía inicia 2023 reduciendo su dinamismo en un contexto en el que, de acuerdo con datos preliminares, la actividad económica mostró una desaceleración en su ritmo de crecimiento durante el cuarto trimestre de 2022”, dijo el IMEF en su reporte mensual.
El año comienza con gran intensidad en cuanto a información económica y movimiento en los mercados financieros, con contrastes marcados en varios indicadores.
- La atención está concentrada en el binomio que conforman la inflación y la política monetaria en Estados Unidos, ya que la evolución de la primera determinará en gran parte a la segunda.
- Si la inflación no desciende con la rapidez prevista, la política monetaria tendrá que seguir restringiéndose, con tasas de interés más elevadas por más tiempo en detrimento de las perspectivas de crecimiento económico”, comentó el IMEF,
- Por lo pronto, los resultados recientes de los diferentes indicadores de inflación en este país han resultado favorables, lo que ha permitido a los mercados financieros comenzar a formar expectativas de una política monetaria menos dura a la que se temía, es decir, que el ciclo de alza en las tasas de interés podría estar cerca de concluir.
“Las perspectivas para la actividad económica de Estados Unidos, que son fundamentales para el desempeño de nuestra economía en México, presentan un panorama menos halagüeño”, dijo el IMEF.
Si bien en los últimos días el Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó al alza, de manera generalizada, sus proyecciones de crecimiento –incluidos aquellos para la economía estadounidense–, para 2023 se continúa anticipando un crecimiento del PIB bastante menor al alcanzado en 2022, de 2.0% a 1.4% de acuerdo con dicho Instituto.
En México, el año comienza con gran intensidad en el entorno político y con señales preocupantes en algunos indicadores.
- Si bien datos preliminares publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) apuntan a un crecimiento del PIB en 2022 de 3%, por arriba de lo estimado hace tan solo unos meses, el Indicador Global de la Actividad Económica presentó en noviembre una caída importante de 0.5% que, aunado a la marcada debilidad en la inversión productiva en el país, es presagio de una mayor debilidad en la economía durante el 2023.
Por otro lado, la inflación comienza con malas noticias el año, ya que, tanto en el índice general como en el subyacente, el resultado de la primera quincena de enero fue superior a lo esperado, y a tasas anuales se siguen observando niveles elevados, de 7.94% y 8.45%, respectivamente.
“Si la inflación no retoma su tendencia descendente con mayor rapidez, la necesidad de una política monetaria más restrictiva podría cobrar fuerza”, evaluó el IMEF.
Empresarios pierden confianza
Al inicio del 2023, los empresarios mexicanos de lo sectores comercio y servicios (excepto financieros) recortaron sus niveles de confianza en la economía de México y de sus empresas. Por su parte, los empresarios del sector construcción y manufactura incrementaron su confianza de manera modesta.
- Durante enero, el Indicador de Confianza Empresarial (ICE) en el sector construcción registró un avance de 0.5 puntos respecto del mes previo. Mientras que la confianza en el sector manufacturero avanzó 0.3 puntos en este lapso, de acuerdo con cifras de las Encuestas de Opinión Empresarial del Inegi.
En sentido contrario, los empresarios comerciales disminuyeron en 0.3 puntos su nivel de confianza general.
- De manera más drástica, los empresarios de unidades que prestan servicios (excepto financieros) fueron los más pesimistas al recortar su nivel de confianza empresarial en 1.9 puntos sólo de diciembre a enero.
- En el desglose del ICE, se observa que lo que más modestos mantiene a los empresarios son las inversiones. Todos los sectores dan la peor calificación al rubro que evalúa su confianza en encontrar un momento adecuado para invertir.
También se observa que los empresarios mexicanos consideran que la situación actual de la economía del país no es mejor que hace un año, pero tienen confianza en que mejorará en los próximos 12 meses.
Ante la pérdida de ritmo en la recuperación económica, la ola inflacionaria y la desaceleración de los dos grandes motores de la economía (comercio y servicios) los empresarios se mantienen moderando sus expectativas para México y sus empresas./Agencias-PUNTOporPUNTO