Al sumar los pasivos financieros y los pensionarios del sector público federal, se obtiene que la deuda federal asciende a 82.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Datos de la Secretaría de Hacienda muestran que la anterior cifra se compone por la deuda financiera del país, medida por el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP), que alcanzó 46.8% del PIB en su dato más reciente, a la cual se suman los pasivos pensionarios federales de organismos como el IMSS, ISSSTE, Pemex, CFE y otros, que ascienden a 35.4 por ciento del PIB.
- Cabe destacar que el coeficiente de pasivos totales federales ha tenido una trayectoria a la baja desde la pandemia, pasando del 102.3% del PIB observado en 2020 a 82.2% del PIB en 2023, lo cual obedece a la recuperación de la economía mexicana tras la crisis sanitaria del mencionado año.
- En términos de saldo, se observa que en 2020 tanto la deuda financiera como la pensionaria a escala federal estaban igualadas, con un monto de 12 billones de pesos cada una. Pero a finales de 2023, la financiera creció hasta 14.8 billones de pesos, mientras que la de pensiones bajó a 11.7 billones de pesos.
En cuanto a estructura, la deuda interna financiera es la más grande con 35.6% del PIB, mientras que, a escala pensional, el ISSSTE concentra los mayores pasivos con 19% del PIB, seguido del IMSS con 9.6% y Pemex con 4.1% del PIB.
Consideraciones
En lo que se refiere a la deuda financiera o SHRFSP, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) afirmó que el incremento de la deuda ha sido superior al crecimiento de la población.
- “Las proyecciones de mediano plazo de la deuda no consideran los crecientes gastos ineludibles ni el aumento en la demanda de bienes y servicios públicos de una población cada vez más envejecida, como los relacionados con salud, cuidado y pensiones.
- La responsabilidad se traslada a las futuras generaciones, quienes deberán alcanzar, con menor inversión física y financiera, una productividad superior a la observada para mantener dichos servicios públicos“.
Deuda Gubernamental implica retos financieros a futuro
- En este contexto, la sostenibilidad fiscal y la equidad intergeneracional deberían integrarse en las proyecciones de deuda para abordar los retos fiscales de mediano y largo plazo, tanto en ingresos como en gastos, como el costo financiero de la deuda”, puntualizó el CIEP.
- En cuanto a la deuda pensionaria, el CIEP reconoce que, si bien las pensiones son un derecho esencial que garantiza ingresos durante la vejez, su incremento no permite financiar de manera suficiente otros derechos como la salud, la educación y el cuidado, entre otros.
“Es urgente reformar el sistema de pensiones para garantizar una distribución más equitativa de los recursos públicos, con políticas con perspectiva de género que reduzcan las brechas salariales, fomenten la formalización laboral de las mujeres y fortalezcan un sistema de cuidados.
Además, se deben identificar fuentes de financiamiento sostenibles que permitan atender el crecimiento de las pensiones contributivas y no contributivas sin comprometer otros derechos sociales clave”, dijo el CIEP.
Gobierno de México tendrá que apoyarse en mayor deuda pública
Cumplir con las metas de finanzas públicas será complejo, por lo que es muy factible que el gobierno de México tenga que apoyarse en mayor deuda pública, que como porcentaje del PIB podría elevarse más de los anticipado como consecuencia de un mayor monto como por un menor valor del producto, dijo el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp).
- En su reporte semanal destacaron que en el presupuesto de egresos de 2025 se propone una disminución de 3.6 por ciento en términos reales en el gasto total, lo que en principio pareciera ser una buena señal para los mercados financieros y fortalecer la calificación soberana del país.
- “Sin embargo, más allá de una planeación real, la reducción del gasto responde a una exigencia natural dada la rigidez de las fuentes de ingresos y el riesgo que implica elevar los niveles de deuda. Reducir el déficit vía menor gasto es sin duda la mejor opción, aunque puede tener un costo elevado”, dijo la agrupación.
Remarcó que en la clasificación administrativa del gasto programable, donde se refleja quien ejerce los recursos, se puede percibir cuales son las prioridades del nuevo gobierno.
Tras las adecuaciones al gasto aprobadas, evidentemente por la mayoría de Morena, se puede apreciar que los objetivos serán los mismos que en el pasado gobierno:
- “Privilegiar objetivos políticos mediante proyectos cuya rentabilidad no es comprobable y programas de transferencias carentes de incentivos para la movilidad social y del objetivo de romper los ciclos de preservación de la pobreza de los segmentos sociales más necesitados”, explicó.
- Expusieron que de los 44 ramos que integran esta clasificación, 35 presentaron recortes respecto a los montos aprobados para 2024. Los nueve rubros que reportan aumentos se pueden relacionar con los proyectos y programas prioritarios del gobierno.
“El gasto en desarrollo agrario, territorial y urbano aumenta 183 por ciento y responde principalmente al nuevo programa de vivienda social. Le sigue el incremento de 65.1 por ciento en el gasto en infraestructura, comunicaciones y transportes, que contempla las nuevas obras ferroviarias en el país. Las erogaciones de las entidades no sectorizadas crecen 20.7 por ciento, en especial por las transferencias al programa IMSS Bienestar. El gasto en Bienestar crece 2.8 por ciento”, dijo el Ceesp.
Estados cobran más impuestos para evitar endeudarse
Los gobiernos estatales están evitando contratar deuda y fortalecer sus ingresos propios a través de la creación de impuestos verdes o aumentando los ya existentes.
- La deuda total de los estados y municipios ascendió a 683 mil millones de pesos entre julio y septiembre, una disminución de 3.3% frente al mismo periodo del año pasado al quitar la inflación, de acuerdo con los datos más recientes de la Secretaría de Hacienda.
- Mientras Tlaxcala tiene prohibido endeudarse por ley, el Estado de México va por su segundo año en el que no solicitó al Congreso local contratar pasivos, pero empezó a tener impuestos ecológicos.
- En tanto, la Ciudad de México está proponiendo un desendeudamiento neto de 0.5% al restar la inflación y un incremento del impuesto a la nómina de 3% a 4%, así como el cobro de un gravamen ecológico como primer paso hacia la homologación y trabajo conjunto con el gobierno mexiquense y otros estados vecinos de la zona metropolitana.
San Luis Potosí se alista para empezar a aplicar el Impuesto sobre Emanaciones Contaminantes a partir del 1 enero, tras postergar la medida este año a solicitud de los sectores productivos, con una tasa de tres unidades de medida y actualización (UMA’s) por tonelada de dióxido de carbono.
Morelos, en sentido opuesto
En cambio, el Congreso de Morelos cedió a la petición del sector empresarial de eliminar los impuestos cedulares, y no aumentar 1% el impuesto sobre nómina como lo propuso la gobernadora, Margarita González, más bien se aprobó reducirlo de 3% a 2.5%.
- El investigador en finanzas subnacionales del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), Emilio Sánchez, dijo que la política de “cero deuda” no está mal.
- Pero hay que ver si, por ejemplo, tanto Tlaxcala como el Estado de México cuentan con la suficiente capacidad fiscal o ingresos para atender las necesidades de sus pobladores.
- Indicó que son varios los componentes de los ingresos de las entidades federativas como las transferencias federales y los generados a nivel local.
Sin embargo, la mayoría son altamente dependientes de los recursos federalizados, lo que desincentiva que fomente su recaudación propia, enfatizó.
Señaló que Querétaro sobresale por haber subido su deuda, ya que en igual periodo del año pasado no tenía inscrita deuda ante las autoridades:
- “A partir del cuarto trimestre de 2023 eso empezó a cambiar y por eso ahora se ve que es una de las únicas que incrementó su endeudamiento”, explicó.
Coahuila, en observación
En el caso de Coahuila, indicó, vale la pena ponerle atención debido a que en el semáforo que se prevé en la Ley de Disciplina Financiera, que mide la sostenibilidad de la deuda estatal, es la única que aparece en color amarillo o en observación y el resto en verde.
- Para el especialista del CIEP, al hacer una comparación de la deuda entre estados, lo más justo es si se repartiera entre sus habitantes. “Es una manera de estandarizar para que las diferencias sean más significativas”, argumentó
Estimó que el promedio de la deuda subnacional per cápita al cierre de septiembre fue de 4 mil 463 pesos por persona.
- Nuevo León continúa siendo la de mayor deuda que le correspondería pagar a cada habitante si fuera necesario, con 16 mil 300 pesos cada uno; seguido de Chihuahua, 13 mil 400; y Coahuila, 11 mil pesos.
- En tanto, a los mexiquenses les tocaría contribuir con 3 mil 600 pesos, aunque el gobierno estatal no está contratando deuda nueva, y en Guerrero si se repartiera a cada habitante, 400 pesos.
Emilio Sánchez mencionó que, en cuanto a la capacidad de pago, con respecto a los ingresos de libre disposición que son ingresos propios y participaciones federales, hay siete estados en color amarillo y los demás en verde, en el que Coahuila está cerca de pasar al rojo del semáforo del endeudamiento.
- En la capacidad de pago en el corto plazo no mayor a un año, todas las entidades están en verde o bien se encuentran en un nivel sostenible, refirió.
- Del total de la deuda subnacional, los gobiernos de los estados participan con 87.8% del monto contratado y los entes públicos estatales, con 6.6%
- Finalmente, los municipios tienen 5.3% y los entes públicos municipales cuentan con una participación mínima de 0.3%.
Por lo general, las instituciones de crédito privadas son la alternativa a la que más recurren los estados al concentrar más de la mitad, 52.1% del total; le sigue la banca de desarrollo con casi 40% de los pasivos.
Las emisiones bursátiles no son tan atractivas, señalan, pues representan sólo 7.9% del total del endeudamiento. /Agencias-PUNTOporPUNTO