La Guardia Nacional mexicana notificó este martes de la aprehensión de seis de sus agentes por su supuesta culpabilidad en la muerte de una mujer el pasado 8 de septiembre en el municipio de Delicias, en el norteño estado de Chihuahua, durante una protesta de campesinos por el conflicto del agua en la frontera norte.
- “La Guardia Nacional informa que una vez que la Fiscalía General de la República (FGR) realizó la investigación correspondiente a los lamentables hechos registrados el pasado mes de septiembre en Delicias, Chihuahua, encontró elementos que hacen suponer la culpabilidad de algunos elementos de nuestra institución”, informó el organismo en Twitter.
En otro mensaje, agregó que se ejecutaron seis órdenes de aprehensión “contra el personal involucrado” en un marco de “legalidad y respeto a los derechos humanos”.
“Cabe señalar que desde el primer momento, se colaboró con las autoridades ministeriales para deslindar las responsabilidades”, indicó el cuerpo de seguridad, que reiteró que, dentro de la Guardia Nacional, “no se tolerarán abusos o uso excesivo de la fuerza”.
- En los últimos dos meses, los campesinos de Chihuahua protagonizaron varias protestas en la presa de La Boquilla, la más grande del estado, porque rechazaban entregar parte del líquido para cumplir con el Tratado de Aguas con Estados Unidos de 1944, alegando sequía en la región.
- En los primeros días de septiembre la protesta escaló y, tras un choque con la Guardia Nacional el 8 de septiembre, Jessica Silva falleció. El pasado 10 de septiembre el propio presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, lamentó el suceso pero defendió el actuar de la Guardia Nacional durante el operativo.
Según la versión del mandatario, horas más tarde de un operativo que terminó con un choque frontal entre la Guardia Nacional y miles de manifestantes, un grupo de protestantes pasó con vehículos por otra infraestructura protegida por la Guardia Nacional y amenazó a los agentes.
Tras detener a varias personas y ponerlas a disposición de las autoridades, otro grupo de manifestantes persiguió a la Guardia Nacional y hubo fuego cruzado, en el que falleció Jessica Silva, de acuerdo con la autoridad.
El padre critica a la Guardia
El padre de la mujer fallecida, José Silva, deseó este martes que sea “cierta” la detención de los seis guardias nacionales y denunció que se han dicho “muchas mentiras” en relación al caso, según explicó en declaraciones a Radio Fórmula.
- “Fue una muerte, un asesinato. A eso iban. ¿Por qué no se pasan a Chihuahua (ciudad) a llevar a esas personas detenidas? Porque no se pasan, porque siguen a Jaime (esposo de Jessica), porque iban a matarlo”, apuntó. Dijo que la Guardia Nacional iba “enojada” porque fue derrotada en la confrontación previa con manifestantes en la presa.
“Me da gusto que hayan reconocido (los hechos) porque andaban lavándose las manos unos y otros. Espero que sea cierto”, apuntó.
- Compuesto por decenas de miles policías y militares, la Guardia Nacional es un cuerpo de seguridad público impulsado por López Obrador y nacido legalmente el 26 de marzo del 2019 tras una polémica reforma constitucional, que empezó a desplegarse por el territorio tres meses después de su creación.
#GuardiaNacional informa que una vez que @FGRMexico realizó la investigación correspondiente a los lamentables hechos registrados el pasado mes de septiembre en Delicias #Chihuahua, encontró elementos que hacen suponer la culpabilidad de algunos elementos de nuestra Institución.
— Guardia Nacional (@GN_MEXICO_) October 27, 2020
Separan del cargo a 73 autoridades en 2019
En la presente administración, hasta el 18 de agosto del presente año, ningún militar o exmilitar comisionado o adscrito a la GN había sido dado de baja o sancionado por irregularidades en su actuar; sin embargo, respondieron que en 2019 un total de 40 expolicías federales se separaron del servicio y otros 33 fueron removidos por irregularidades en su actuar.
A estos casos, se suma una investigación por parte del área de asuntos internos de la corporación contra un grupo de guardias nacionales que en abril se reunieron con supuestos miembros de grupos de la delincuencia organizada.
- El 24 de abril, en la conferencia mañanera, el titular de la GN, Luis Rodríguez Bucio, informó que estos elementos estaban siendo investigados, pero hasta la fecha no han dicho públicamente qué ocurrió con la investigación.
- En ese momento, Rodríguez Bucio dijo que “después de ver las fotografías de con quién se habían reunido, se inició una investigación por la propia Unidad de Asuntos Internos que es la responsable de ver la conducta de toda la Guardia Nacional, está en el proceso el tiempo que se lleva la investigación”.
De acuerdo con una demanda de amparo interpuesta por una Mayor del Ejercito de la Guardia Nacional, una policía civil por definición, ha sido dirigida y manejada desde el inicio por militares del Ejército en activo, que igual dan órdenes como jefes policiales que como comandantes de las fuerzas armadas, por lo que en los hechos nunca han estado separados de la estructura y jerarquía castrense, pese a que así lo ordenaba la reforma constitucional que dio luz verde a la nueva corporación.
Civiles en papel, militares en la operación
Aunque constitucionalmente la GN es una fuerza policial civil sujeta a la Ley Nacional del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en los hechos sus elementos operan bajo reglas, códigos y jerarquías cien por ciento castrenses, confirmó una abogada y exdirectora de dicha corporación.
La detención de los guardias implicados en la agresión en Chihuahua por parte de policías militares y su reclusión en una cárcel castrense, es un ejemplo mas de esta situación que consideró como “irregular”.
- La funcionaria – que pidió reserva con su identidad – explicó que si bien, la GN está conformada en su mayoría por elementos asignados desde el Ejército, estos deberían quedar “funcionalmente separados” de sus funciones castrenses. En consecuencia, la Sedena no debería tener injerencia alguna en temas administrativos ni operativos.
Sin embargo, la reforma legal también contempló un periodo de tolerancia de dos años para que los elementos asignados pudieran ajustarse a perfil que marca la Ley del Sistema Nacional de Seguridad, situación que ha provocado que en los hechos los guardias sigan manejándose como soldados, y no como policías.
- Por ejemplo, detalló la funcionaria, la mayor parte de los guardias no han sido dados de alta como policías en el registro del Sistema Nacional de Seguridad Pública ni cuentan con su credencial única de identificación policial. Dicha situación impide darle seguimiento a un régimen disciplinario de cada uno de los guardias o asentar las conductas delictivas en las que puedan incurrir.
“Esto provoca, por ejemplo, que si la ley del Sistema Nacional de seguridad contempla que si un policía falta de forma injustificada tres días en un mismo mes se incumple un requisito de permanencia y ese elemento debe ser dado de baja. Eso en el caso de los elementos de la Guardia no se puede porque ni siquiera han sido dados de alta en el sistema. Siguen dados de alta en el Ejército” indicó.
- Se ha dado paso, añade la abogada, a una situación ambigua y a un “conflicto de indisciplina” que ocasiona casos como el de Chihuahua donde de forma irregular, el Ejercito intervienen en la detención y resguardo de guardias que están siendo procesados por la vía civil.
“Lo que debió ocurrir en este último caso es que se les aplicara un procedimiento cien por ciento civil y que habiendo sido cumplimentada la orden de aprehensión por policías civiles y trasladados por policías civiles a un centro de reclusión civil, entonces ahí se expusiera ante el juez que por una situación de seguridad fueran trasladados a una instalación militar. Pero esa debió ser la ruta y no como se hizo desde el inicio” indicó.
La abogada desestimó a su vez el argumento esgrimido por las autoridades federales sobre que los guardias detenidos en Chihuahua son “militares comisionados”, pues dijo que no existen soldados comisionados en la GN. Se trata, insistió, de efectivos asignados a la misma tras ser separados funcionalmente de su función castrense, y que deberían ser tratados como civiles./Agencias-PUNTOporPUNTO