Entre enero y mayo de este año, previo a las elecciones presidenciales y el cambio de gobierno, México reportó su mayor déficit público en 16 años, de acuerdo con la información actualizada de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
- En los primeros cinco meses del año, los Requisitos Financieros del Sector Público (RFSP) –el endeudamiento ampliado– fue de 645,700 millones de pesos, un incremento de más de la mitad de lo que se observó en el mismo periodo del año pasado.
“El déficit público ascendió a 645,700 millones de pesos, la mayor cantidad desde el 2008 que hay registrado. Se trata de un crecimiento de 152.7% (390,100 millones de pesos) frente al año anterior, siendo el segundo mayor incremento en términos reales de todo el sexenio”, indicó la organización México Evalúa.
- En este sentido, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) señaló que el aumento se debió al déficit presupuestario, el cual creció 3,4 veces respecto al mismo periodo del 2023.
De acuerdo con los datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a cargo de Rogelio Ramírez de la O, el déficit presupuestario fue de 557,394 millones de pesos y, aunque fue menor de lo programado en 67,021 millones de pesos, fue mayor a lo observado en el 2023.
En tanto, el balance primario presupuestario registró un déficit de 165,510 millones de pesos, monto menor a lo previsto en 40,271 millones de pesos.
“Al cierre de mayo, los agregados fiscales se mantuvieron alineados con las metas aprobadas”, aseguró Hacienda.
- Este año, la Secretaría de Hacienda proyectó que los RFSP lleguen a un nivel de 5.9% del Producto Interno Bruto (PIB, lo cual es un nivel no visto en décadas y que ha traído controversia por el alto endeudamiento que representa.
- Ramírez de la O ha asegurado, en diversas ocasiones, que parte de este mayor endeudamiento se da para poder terminar las obras emblemáticas de esta administración, y así no heredar pendientes al gobierno de Claudia Sheinbaum, el cual comenzará el próximo 1 de octubre.
En tanto, el Congreso de la Unión aprobó un endeudamiento interno para este año de 1,9 billones de pesos, mientras que para el endeudamiento externo lo autorizado fue por 18.000 millones de dólares.
Deuda ampliada por 15,5 bdp
En mayo de este año, el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP), la deuda en su medida más amplia, sumó a 15 billones 582,456 millones de pesos.
Lo anterior supuso un crecimiento del 7,4% en comparación con el mismo periodo del año pasado.
- De este monto, el 76.5% corresponde a la deuda que se ha contratado en el mercado interno, esto es 11 billones 921,413 millones de pesos.
- Respecto a la deuda contratada en moneda extranjera, ésta suma ya 3 billones 661,043 millones de pesos, lo que representa el 23.5% del total del SHRFSP, según información de la dependencia.
En el mercado externo no se realizaron operaciones en el mes de mayo, el crédito externo continuará manteniéndose como una fuente complementaria de financiamiento cuando las condiciones sean favorables”, destacó Hacienda.
El reto de disminuir los RFSP
De acuerdo con las estimaciones de la Secretaría de Hacienda en los Pre Criterios Generales de Política Económica 2025 que se difundieron en abril, los RFSP bajarían a 3% del PIB –el nivel recomendado– para el año siguiente; Sin embargo, esto estaría acompañado por un recorte al gasto en medio de mayores presiones y necesidades en este.
- Ante ello, la virtual presidenta pidió a Rogelio Ramírez de la O permanecer en el cargo durante su gobierno –donde se espera quede, al menos, el primer año– con el fin de disminuir dicho déficit sin afectar los programas sociales existentes y los que desea crear.
- En este sentido, Claudia Sheinbaum ha dicho que el déficit se podría disminuir a 3.5% del PIB, lo que de acuerdo con México Evalúa estima debe ser un recorte de 516,100 millones de pesos en el gasto público.
“Supongamos que los ingresos públicos aumenten, como anticipa Hacienda. Estimamos que el gasto neto del sector público tendría que recortarse en 5.5% o 516,100 millones de pesos frente a la aprobación en el 2024, lo que equivale a cortar de tajo todo el presupuesto de la Secretaría del Bienestar. «Si nos referimos al gasto programable (aquel que el Gobierno tiene mayor control de modificar) el recorte tendría que ser de 7% o 471,600 millones, similar al presupuesto de la Secretaría de Educación Pública», aseveró la organización.
Habrá mayor déficit al cierre de esta administración: SHCP
A un paso de concluir esta administración, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público aumentó su proyección de déficit público para este año, al llevarlo de 5.4 por ciento, que publicó de inicio, a 5.9 por ciento. Así mismo, asume que la próxima administración podrá reducir esta brecha entre ingresos y gasto para mantener la deuda en un nivel sostenible.
En los Pre-criterios 2025 –un documento que muestra la visión y los datos de Hacienda sobre el desempeño de la actividad económica nacional e internacional y esboza los estimados del paquete económico de ese año–, la dependencia aumentó la proyección de un déficit público que ya se contaba como el más alto en tres décadas.
Hacienda explicó que se espera ese aumento del gasto respecto a los ingresos, debido a que este año se concluirán los principales programas de infraestructura promovidos por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Y, de antemano, considera que el déficit de 2024 “tendrá un carácter transitorio”, lo cual permitirá que la deuda pública como porcentaje del PIB se mantenga constante y en una trayectoria sostenible.
“En 2025, se anticipa un ajuste a la baja del déficit público, que se verá reflejado en un superávit primario y un nivel de los RFSP (Requerimientos Financieros del Sector Público) de 3 por ciento del PIB. De este modo, se anticipa que la deuda pública se mantendrá en un nivel estable de 50.2 por ciento del PIB en ambos años, por debajo de las previsiones para otras economías emergentes y otros países con la misma calificación crediticia”, reconoció en el documento.
Prima inflacionaria amplía el déficit
Este ajuste al alza en el déficit público “se debe fundamentalmente por un aumento en los RFSP no presupuestarios”, aclaró la dependencia, al margen de lo contenido en el documento oficial de Pre-Criterios 2025.
- La secretaría explicó que ese incremento a 5.9 por ciento para 2024 responde al efecto de colocaciones de papel de deuda, ante tasas de interés relativamente altas; y al resultado de la prima inflacionaria en la deuda indexada a la inflación.
Agrega que el déficit presupuestario –la diferencia entre gastos e ingresos del ejercicio 2024, sin contar otras amortizaciones– “se mantiene suficientemente en línea con lo aprobado”, pasa de -4.9 por ciento como porcentaje del PIB a -5.0 por ciento.
Se triplicó el déficit fiscal
El Gobierno de México se ‘aflojó el cinturón’ al elevar el gasto programable total del sector público en 24.2 por ciento anual en los primeros cuatro meses de 2024, a 2 billones 166 mil 794.6 millones de pesos, lo que contribuyó a un aumento casi al triple del déficit fiscal.
En su informe de Finanzas Públicas y Deuda Pública, la Secretaría de Hacienda precisó que el déficit fiscal pasó de 215 mil 49.1 millones de pesos en los primeros cuatro meses de 2023 a 596 mil 894.4 millones de pesos en este año.
¿Qué rubros del gasto programable aumentaron más?
Los rubros con mayores aumentos en las erogaciones de enero a abril fueron del gasto programable con un alza de 27.9 por ciento, a un billón 791 mil 896.4 millones de pesos.
- Dentro de los gastos de operación, las compras de materiales y suministros se elevaron 94.4 por ciento, al sumar 11 mil 20.3 millones de pesos; las erogaciones en inversión física directa aumentaron 82.8 a 42 mil 626.5 millones de pesos.
- En el rubro de inversión financiera y otros, las erogaciones crecieron 151.9 por ciento, al sumar 100 mil 813.2 millones de pesos. A su interior, la inversión financiera directa se elevó 169.3 por ciento, al contabilizar 98 mil 980.5 millones de pesos.
- Por otra parte, los ingresos tributarios del sector público durante los primeros cuatro meses del año sumaron 1 billón 768 mil 311.6 millones de pesos, con lo que crecieron en 5.6 por ciento real, respecto de igual periodo de 2023, reportó Hacienda.
- Los ingresos petroleros se desplomaron a 60 mil 720.8 millones de pesos en el primer cuatrimestre de 2024, mientras que en similar lapso de un año antes sumaron 85 mil 232.3 millones de pesos, una baja de 31.9 por ciento.
- Dentro de los ingresos tributarios destacó la baja del ISR en 1.5 por ciento a un billón 33 mil 606.6 millones de pesos. En contraste, el IVA creció en 4.8 por ciento real de enero a abril al contabilizar 454 mil 488.7 millones de pesos.
Pronostican expertos mayor déficit fiscal para 2024 y 2025
El déficit fiscal en México repuntará este 2024 a niveles que no se observaban en décadas, y diversos pronósticos de analistas apuntan a registros superiores a los oficiales, además de que consideran que difícilmente se logrará una consolidación en las finanzas el próximo año sin una reforma.
- En ausencia de una reforma fiscal México no podrá consolidar las finanzas públicas en 2025 ni en 2026, debido a que la deuda seguirá creciendo porque ahora hay condiciones más adversas como un bajo crecimiento y tasas de interés altas, advirtió Ernesto Revilla.
- El economista en jefe de Citi para LATAM estimó un déficit fiscal de 6.2 por ciento este año (el más alto entre los grupos financieros), de 4.9 por ciento en 2025 y de 3.3 por ciento en 2026.
“La reforma fiscal que requiere el país no es la tradicional de elevar impuestos, se necesita estabilizar las finanzas de Pemex y si esto se logra, se obtendrían hasta dos puntos del PIB adicionales por año en ingresos que se podrían dedicar a otras actividades que tuvieran más retorno para los mexicanos”, calculó.
- Indicadores de Bloomberg muestran que la media de 10 grupos financieros estima un déficit fiscal de 5.2 por ciento del PIB para 2024 y de 3.9 en 2025, por encima del 5.0 y 2.5 por ciento, proyectado por la Secretaría de Hacienda.
- Esteban Polidura, director de Asesoría y Productos para las Américas del banco suizo Julius Baer, expresó que el déficit fiscal proyectado es manejable, pero no allana el camino para un presupuesto difícil de sostener en años futuros si no se adoptan reformas a tiempo.
- “Si bien los impactos negativos en el perfil fiscal deberían ser temporales, socavan la prudencia fiscal. Las crisis económicas de 1976, 1982 y 1995 estuvieron vinculadas a la deuda pública y a las caídas del mercado petrolero”, dijo.
Recalcó que las reformas oportunas son cruciales para garantizar que los gastos elevados vayan acompañados de mayores ingresos.
- Alejandro Saldaña, economista en jefe de BX+, dijo que desde su punto de vista el déficit fiscal previsto para este año no se descarrilará y que incluso habría posibilidad de que quedará un poco abajo (del 5 por ciento) previsto por el Gobierno, debido a que la expansión del gasto no se está dando de manera acelerada como se observa en los subejercicios del primer trimestre.
“Pero incluso, si no se cumple ese pronóstico de déficit del gobierno federal no sería una condición suficiente para que México pierda el grado de inversión. Las calificadoras podrían hacer algunos ajustes, pero tampoco me estaría imaginando que si no se cumple al 100 por ciento esta meta fiscal del próximo año, México pierda el grado de inversión”, auguró.
Los riesgos
- Saldaña advirtió que entre los riesgos para las finanzas públicas tienen que ver con las presiones por el gasto, particularmente en el tema social y de pensiones, que va a ser creciente por un tema demográfico, y se tiene que ir tomando con mayor consideración ese factor”.
- Revilla considera que “si México continúa con déficits elevados como el de 2024, eventualmente la calificación crediticia estará en riesgo”.
- Explicó que una consolidación fiscal en general se refiere a un esfuerzo de incrementar ingresos y reducir gasto con el objetivo de tener un déficit que sea consistente con equilibrar la deuda pública, para que no crezca, pero no necesariamente tiene que ser un déficit cero.
“En México estimamos que un déficit público de 2.5 por ciento del PIB es consistente con estabilizar la deuda pública, por lo tanto, cualquier cifra que sea mayor a 2.5 va a contribuir a incrementar la deuda”, advirtió.
Deuda al alza
Revilla estimó que la deuda pública bruta –como la mide el FMI– se ubicará a fin del presente año en 54 por ciento del PIB, comparado con 51 por ciento, del año pasado y todavía subiría 55 por ciento en el 2025.
“Viendo el presupuesto aprobado para el 2024 es difícil ver de dónde se va a poder recortar suficiente gasto para bajar el déficit de manera significativa”, subrayó.
Expuso que la combinación de altas tasas de interés como existen ahora en México y en Estados Unidos, así como un bajo crecimiento económico es usualmente malo para la trayectoria de la deuda, porque es más fácil que crezca.
Gobierno de AMLO termina con el mayor déficit fiscal en cuatro sexenios
El gobierno mexicano registrará en 2024 el mayor déficit fiscal para un año electoral en un registro de al menos cuatro sexenios, de acuerdo con información del Fondo Monetario Internacional (FMI).
- En este último año del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, la administración incurrirá en un déficit de 5.9% del Producto Interno Bruto (PIB) que será el más alto registrado al menos desde el año 2000.
- El precedente más cercano de un déficit superior a 4% del PIB, lo tenía Enrique Peña Nieto, que en 2014 incurrió en un déficit de 4.54% del PIB.
- Pese a haberse mantenido como uno de los gobiernos más prudentes en el manejo de las cuentas fiscales durante la emergencia sanitaria y en la post pandemia, el presidente López Obrador, terminará su gestión con el déficit fiscal más alto de cuatro sexenios. Un desequilibrio que coincide con el año electoral.
Al interior del reporte semestral Fiscal Monitor, los expertos del Fondo destacaron que en años electorales, los gobiernos suelen aplicar un mayor gasto y limitan la fiscalización. De hecho, resaltan que la media de las economías emergentes suele elevar su déficit fiscal en 0.3% del PIB en promedio en un año electoral. Y en 2024, son 88 los países que enfrentarán este ejercicio democrático, lo que impone un riesgo adicional para la consolidación fiscal del globo.
- En el sexenio de Felipe Calderón, el mayor déficit presupuestario se alcanzó en el año 2019, el de la Gran recesión, que fue por 4.13% del Producto mientras su predecesor, Vicente Fox, tuvo el déficit más alto en el año 2003, cundo llegó a 2.36% del Producto.
- En el reporte, lanzado en el marco de las Reuniones de Primavera del FMI que se realizan esta semana en Washington, D.C., resaltaron que en el último año de administración de AMLO, la deuda del gobierno promediará en el equivalente a 55.6% del PIB.
- Esta proporción es inferior al 58.5% del Producto que representó en 2020, el año de la pandemia. Esta métrica de deuda incluye las obligaciones del gobierno central, fondos de seguridad social, empresas públicas, bancos de desarrollo, el Fondo Nacional de Infraestructura y la Corporación Nacional de Seguros y Fianzas.
Una proporción que estará lejos de la que en promedio gestionarán los gobiernos de economías emergentes, equivalente a 69.4% del PIB.
- Los expertos del Fondo proyectaron que esta misma deuda general del gobierno mexicano se mantendrá en ese nivel, estable, en los próximos dos años, del 2025 al 2026 y que volverá a deslizarse al alza entre a partir del año 2027 para llegar a un máximo de 56.1% del PIB en el año 2029.
Este incremento será básicamente resultado del pago de intereses.
Pero incluso con esta trayectoria ascendente, la deuda del gobierno de México será inferior al promedio que gestionan gobiernos de economías emergentes.
México necesita una reforma fiscal progresiva y profunda: Oxfam México
Desde diversos frentes globales, los países del mundo están llamando hacia nuevas reglas de tributación enfocadas en incrementar las aportaciones de impuestos de las grandes empresas y las grandes fortunas y, en ese sentido, México también requiere una reforma fiscal progresiva muy profunda. “Es decir, de las personas más ricas de nuestras sociedades”, declaró a Espejo el director de Justicia Fiscal de Oxfam México, Carlos Brown.
- En el G20 y en la OCDE hay llamados muy potentes en este sentido. Recientemente el presidente brasileño, Lula Da Silva, encargó al economista francés Gabriel Zuckman, un informe y propuestas que busquen avanzar en este sentido el cual podría ser presentado en las próximas semanas. Anteriormente, Zuckman ha abogado porque los “súper ricos” paguen al menos el 2 por ciento de impuestos sobre sus fortunas cada año.
Para Brown, esta y otras situaciones suponen un momentum mundial en el que países grandes y pequeños reconocen la necesidad de obligar a que las grandes fortunas contribuyan más y mejor a financiar la administración de lo público a través de impuestos.
“Hay algo importante pasando a nivel global. Hay algo pasando en Naciones Unidas con una Convención Tributaria que se espera que sea la convención marco para los acuerdos tributarios de escala internacional; hay algo pasando en América con la Plataforma Tributaria de América Latina y el Caribe que es un espacio con 8 países donde México participa de observador. Los países se empiezan a poner de acuerdo, se empieza a discutir y dialogar sobre estos temas. No es nada menor”, advirtió.
- Es en este contexto, añadió el experto en temas fiscales, que se inserta el caso mexicano como un país de muy baja recaudación de impuestos. La más baja de entre los países de la OCDE y una de las más bajas de América Latina.
- Estos bajos niveles de recaudación, donde incluso magnates como el empresario Ricardo Salinas Pliego utiliza todos los recursos a su alcance para evitar contribuir más a las finanzas públicas del país, impone una debilidad estructural a las finanzas públicas mexicanas que hace que el margen de maniobra administrativo sea muy bajo.
“Queremos miles de prioridades pero tenemos muy poco margen de acción porque hay poco margen financiero para poder hacer estas cosas. Entonces los llamados que hacemos, y me incluyo desde Oxfam México, es a una reforma fiscal progresiva y profunda, necesitamos que el estado mexicano tenga estas capacidades para los retos globales que vienen”, llamó Brown.
“Con las reglas actuales del sistema tributario y el sistema fiscal mexicano no da para estos retos que estamos hablando. Sin duda uno de los elementos más importantes para promover una reforma fiscal progresiva en méxico tiene que ver si o si con el escenario global, es un aliciente más para que méxico esté hablando de estos temas y empuje reformas domésticas, reformas nacionales”, puntualizó.
En un reporte anterior, el economista sinaloense Moisés Alarcón Osuna, coincidió con Brown al señalar que ya es urgente una reforma fiscal integral para el país.
Moisés Alarcón explicó que al cierre del sexenio el gobierno federal tiene un déficit muy grande, donde los ingresos de la administración federal no alcanzan para todos los gastos que tienen contemplados. Para atender esta urgencia, la próxima administración federal debe tomar en cuenta la reducción de ingresos petroleros y la evasión y elusión fiscal. “Ya es importante una reforma fiscal para poder recaudar más”, dijo./Agencias-PUNTOporPUNTO