Luego de que documentos de los llamados #NarcoFiles revelaron que presuntamente el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) autorizó a la Administración de Control de Drogas (DEA) entregas controladas de cocaína en México para combatir el crimen organizado, Estados Unidos involucró a México en más entregas controladas de droga y dinero de la DEA.
Y es que de acuerdo con documentación oficial presentada por Estados Unidos y legalizada ante la fiscalía colombiana y el juez de Control, México se asume como participante de facto.
- Refiere que las entregas iniciaron el 8 de septiembre de 2021, cuando el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Embajada de Bogotá, a través de una Solicitud de Autorización Operación Entrega Controlada y/o Agente Encubierto, con duración de un año y la posibilidad de que se ampliara otro más.
- Señala que un agente estadounidense de alto nivel contaba con información de una estructura criminal, quien coordina las recolecciones de dinero de las ganancias de la droga en México y Estados Unidos, que se repatría a Colombia y México a través de transferencias bancarias.
En tanto que la documentación destaca a México como punto clave para el flujo de depósitos del dinero ilícito y que los países que intervienen en una operación son Colombia, México, Ecuador y Estados Unidos.
- México sería como país de tránsito rumbo a Estados Unidos. Incluía el permiso de transporte de hasta 200 kilos de coca, cinco kilos de heroína, 20 kilos de metanfetamina y 20 kilos de otra sustancia sintética ilegal no especificada.
- También el empleo de hasta 2 millones de dólares para pagos y transacciones. El membrete de la misiva anunciaba a la División Criminal del Departamento de Justicia. La solicitante directa era la agencia antidrogas estadounidense, la DEA.
- En la carta también pide apoyo para realizar vigilancia y seguimiento, búsquedas selectivas en bases de datos e interceptación de teléfonos de los criminales para obtener evidencia que en el futuro les pudiera ayudar a nuevas capturas y extradiciones.
La comunicación cerró con la certeza de que la diplomacia mexicana ya estaba enterada y aprobaba el eventual cruce de drogas por su territorio.
- ”El gobierno de Estados Unidos, a través de su agencia DEA, ha comunicado el origen y propósito de esta operación a las autoridades apropiadas de México, específicamente a la policía nacional de México, a través de canales diplomáticos en México”.
“Con esta solicitud, la DEA afirma que esta operación ha sido autorizada en México”.
Al día siguiente, a las 10 de la mañana del 17 de diciembre de 2020, la Dirección Especializada contra el Narcotráfico de la fiscalía colombiana llenó el formato que se necesitaba para aceptar el trabajo de agentes encubiertos y entregas controladas de drogas.
- El gobierno colombiano aceptó la incorporación de dos agentes encubiertos del Grupo Apoyo Estupefacientes SIU (una estructura nacional que opera en apoyo de la DEA en Colombia y otros países), acompañados de dos agentes de control para supervisarlos y apoyarlos.
- La operación general fue calificada como de riesgo medio, pero el trabajo de los agentes de alto. La misión no era fácil de lograr. Lo primero que tenían que hacer era ganarse la confianza de la organización delictiva para que les permitiera comerciar con la droga y lavar el dinero.
El gobierno colombiano les autorizó pactar con el crimen y acudir a lugares públicos y privados: domicilios, trabajos, habitaciones de hoteles. A la operación la llamaron New Generation.
- Antes de actuar como agentes encubiertos de una entrega controlada, las personas previamente entrenadas por la DEA deben firmar un acta de voluntariedad donde se establecen sus facultades, deberes y prohibiciones.
- Tienen permitido efectuar acercamientos con la organización criminal, intervenir en el tráfico y adelantar transacciones con los indiciados, entre otras licencias.
- En este reportaje se informa de investigaciones de operaciones encubiertas de entrega controlada en las que se asegura que México otorgó permisos para el tránsito y/o destino de drogas y dinero ilícito.
Abarca el periodo 2019-2022, correspondiente al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
La suma de las operaciones alcanza 5 millones de dólares, 5.4 toneladas de cocaína, 10 kilos de heroína, 40 kilos de metanfetamina y 40 kilos más de sustancias ilegales sintéticas no especificadas.
- Las entregas controladas autorizadas a la DEA por el gobierno mexicano suceden mientras el país atraviesa por un periodo de extrema violencia y empoderamiento de los grupos criminales, principalmente del Cártel Jalisco Nueva Generación y del Cártel de Sinaloa, y durante una ríspida colaboración e incluso choque entre el gobierno mexicano y la DEA, entre otras autoridades de Estados Unidos.
- La crisis entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y la agencia empeoró a partir de octubre de 2020, luego de que fue detenido en Los Ángeles, California, el exsecretario de la Defensa Nacional, general Salvador Cienfuegos, acusado de crímenes vinculados al narcotráfico.
- Sucede, además, tras la duramente criticada por este gobierno operación de tráfico ilegal de más de 2 mil armas estadounidenses a México, iniciada en 2009 Rápido y Furioso, con la que intentaron de forma fallida seguirle el rastro al armamento en poder de grupos criminales mexicanos.
México no suele aceptar la ejecución de este tipo de operaciones. Se niega casi por reflejo.
Y ahora, esta vez no fue la DEA la encargada directa del operativo antidroga, sino el Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés).
- La agencia no solo se dedica a temas migratorios, también abarca operaciones como el combate al tráfico de drogas ilegales, particularmente a través de una de sus direcciones generales: la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés).
- El 14 de julio de 2021, el Departamento de Justicia de Estados Unidos, en la Embajada de Bogotá, solicitó a la fiscalía que autorizara un par de agentes encubiertos para efectuar una entrega controlada de droga. La solicitud venía de la HSI/ICE.
Al final, la operación se trató del tráfico de 5 mil kilogramos de cocaína, es decir, cinco toneladas, y el manejo de un millón de dólares.
- La relación de México con Estados Unidos siempre ha sido complicada, sobre todo en materia de soberanía nacional, y esta es una de las razones que han hecho que el presidente López Obrador aumente su rispidez con las agencias de inteligencia estadounidenses, sobre todo con la DEA.
Ahora, con los nuevos documentos revelados en este reportaje, sabemos que, a pesar de esta pública mala relación, las operaciones de entrega controlada de droga continúan, así como también el uso avalado de dinero proveniente del narcotráfico.
Ex agentes de la DEA coludidos con narcos perfilan contraataque
De acuerdo con una nota realizado por Milenio, reveló que en un juicio exprés en el que agentes de la Administración de Control de Drogas (DEA) y del Buró de Investigaciones (FBI) se lanzaron mutuas acusaciones, y donde muchos pedían que no se revelara más información de la agencia antinarcóticos,
- Por ello, un tribunal del gobierno de Estados Unidos declaró culpables a Manuel Recio y John Costanzo Jr., a quienes se les acusó de estar coludidos y de entregar información confidencial a bandas de narcotraficantes mexicanos.
- Los documentos judiciales revelan que los agentes ya preparan una apelación y, por lo pronto, lograron que la sentencia se fije hasta el 24 de abril de 2024, a fin de darles oportunidad de preparar sus alegatos y una defensa más efectiva.
Independientemente del diferimiento del juicio, el proceso se convirtió en algo que recordaba más a los juicios contra narcotraficantes mexicanos, porque, entre otros aspectos reveladores, durante la etapa final de las pruebas y contraargumentos, los agentes llegaron a acusar a sus colegas de utilizar testigos protegidos criminales en su contra.
Apenas en septiembre pasado, el gobierno estadunidense abrió una transcripción de una audiencia entre los fiscales, los abogados y el juez, donde se reveló que las escuchas telefónicas que terminaron inculpando a los agentes se llevaron a cabo gracias a la información de una fuente confidencial con carrera criminal.
Manuel Recio es un hombre recién jubilado que trabajó con excelencia para la DEA desde 1997. En el año 2018 decidió montar su propio negocio: Global Legal Consulting, una empresa pequeña que brindaba servicios de investigación privada a abogados defensores penales.
- Pronto se dio cuenta de que sus años en la DEA podrían ayudarlo a hacer crecer con atajos su negocio. Así que contactó a un agente llamado John Costanzo Jr., otro policía sin fichas rojas en su expediente interno.
- Desde una oficina en Florida arrancaron el negocio. La página aún está en internet, este es el enlace para ingresar: https://www.globallegalconsulting.net/.
- Una página algo anacrónica y sobria, con bloques de color azul y secciones divididas en pequeños cuadros con logos obtenidos de páginas genéricas. Ofrece investigación, búsqueda de antecedentes de personas y uno muy peculiar llamado vigilancia.
“La vigilancia generalmente se lleva a cabo para investigaciones de infidelidad”, dice la misma página web. Pero claramente los servicios de los agentes de la DEA no se concentraban en pequeños deslices matrimoniales.
- Porque Recio y Costanzo omitieron detallar su servicio estrella: la obtención de información secreta desde la plataforma de la DEA, como el Sistema de Información de Narcóticos y Drogas Peligrosas (NADDIS, por sus siglas en inglés), una herramienta que contiene información sobre personas que están o han estado bajo investigación.
- Además de que lograron extraer acusaciones selladas con las que dieron aviso a sus clientes de las investigaciones abiertas en su contra, contaban también con la identidad de otros acusados e incluso la fecha en que serían arrestados. Entre los VIP se encontraban narcotraficantes mexicanos, “objetivos” prioritarios.
- Recio y Costanzo fueron descubiertos gracias a una operación encubierta realizada por sus propios compañeros de la DEA. Según los registros policiales, se reportó el arresto de John y el de Manuel justo el mismo día: 20 de mayo de 2022.
Los cargos oficiales fueron: Conspiración para sobornar a un funcionario público; funcionario público aceptando un soborno; Constanzo: soborno a funcionario público; Recio: conspiración para cometer fraude electrónico en “servicios honestos”.
El Código Penal estadunidense define a este último delito como “un plan o artificio para privar a otra persona del derecho intangible a recibir servicios honestos”.
Una frase aparentemente pasada por alto en la acusación, mostraría la verdadera relación de los agentes de la DEA con México. A continuación, reproducimos una vez más el extracto de una conversación publicada por este diario cuando revelamos esta historia en septiembre de 2022.
—Costanzo: Es un agente de la DEA amistoso.
—Recio: Oh, ¿y en dónde está?
—Costanzo: En la División de Operaciones Especiales.
—Recio: Ah, está bien.
—Costanzo: Pero creo que se está preparando para ir a algún lugar al extranjero.
—Recio: Ah, ¿y quieres trabajar con ese tipo?
—Costanzo: Sí.
—Recio: Bueno.
—Costanzo: Sí, pero tranquilo… Déjame llamarlo.
—Recio: No, no, no lo queremos llamar todavía. Es (información) para alguien con quien podemos trabajar, es un mexicano objetivo (‘target’ de la DEA).
- De estas llamadas se desprende que la idea de Costanzo y Recio era negociar con un compañero en activo de la DEA para que los ayudara a conseguir información para un cliente mexicano, que era uno de los objetivos de la agencia antidrogas.
- Desde junio del 2022 fue la misma Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York que pidió que se sellara información y no se diera a conocer públicamente. Tal es el caso de testigos que pudieran ser objeto de intimidación u obstrucción.
- “Cuyas vidas, personas y bienes, así como las vidas, personas y bienes de sus seres queridos, estarán sujetos a riesgo de daño en ausencia de las consideraciones de protección”, dijeron en un documento.
Aunque después, ya en 2023, se vendría uno de los giros menos esperados en el juicio de los agentes de la DEA: en un documento la Fiscalía involucró al abogado de uno de los acusados, llamado Philip Reizenstein.
La razón es que parte del juicio se centró en la triangulación de dinero sucio proveniente de los clientes VIP, recursos que eran blanqueados a través de Global Legal Consulting.
- La Fiscalía aseguró que Manuel Recio y sus cómplices crearon una factura falsa de una empresa fantasma para disfrazar los pagos de sobornos a John Costanzo. La factura, bajo este mecanismo, fue expedida con el concepto “Servicios para el caso Johnny Grobman”.
- Johnny Grobman se dio a conocer cuando las autoridades estadunidenses descubrieron un megafraude que se hizo a través de la fabricación y ventas de fórmulas para bebés. Su abogado era Philip Reizenstein, el mismo que hoy lo representa debido a la obtención ilegal de información para favorecer a los narcos.
“El Gobierno considera que el testimonio del Sr. Reizenstein es necesario en el juicio y por lo tanto propone descalificarlo como abogado de Recio”. Así, de un momento a otro el abogado de los agentes podría pasar a ser un testigo potencial.
El 25 de octubre del 2022 el juez J. Paul Oetken, del Distrito Sur de Nueva York, sacó del caso a Reizenstein, aduciendo que este también trabajó y se reunió directamente con Recio, en ocasiones, incluso, sin la presencia de los otros dos abogados.
Trapos sucios en la DEA y el FBI
A pesar de todos estos enredos, los agentes de la DEA quisieron mantener sus privilegios; en un documento obtenido antes de retirarse del caso, Reizenstein reveló que Manuel Recio realmente se encontraba bajo fianza y en su casa.
“Manuel Recio desea viajar a Ft. Meyers, Florida (…) aproximadamente a 160 millas de Miami, del viernes 25 de noviembre de 2022 al domingo 27 de noviembre de 2022 para asistir a la boda de un amigo. A él se le concedió permiso para viajar a Ft. Meyers para asistir al béisbol de su hijo adolescente”, revelaba en una petición.
Para marzo de este 2023 continuaron las peticiones: John Costanzo exigió suprimir las pruebas derivadas de las escuchas telefónicas del coacusado Manuel Recio.
Sin embargo, el mismo día que hizo esa petición se revelaron algunas de las pruebas que serían utilizadas en el juicio. Como el testimonio de un agente especial de la DEA llamado Christopher Delzotto, fechada en julio del 2019, además de documentos con entrevistas, registros de vigilancias físicas, informes del FBI y una grabación de audio. El gobierno clasificó como confidencial todas estas evidencias.
Para junio del 2023 a Recio ya no le importa la agencia en la que trabajó y solicitó los Manuales y declaraciones de políticas de la DEA y el FBI, y “corazón del gobierno”, como llamaron a esa información, además de que pidieron la emisión de citaciones a la agencia antidrogas y al Buró de Investigaciones en busca de los manuales y declaraciones de políticas anteriores.
- Fueron más lejos y en un documento solicitan declaración de políticas de la DEA relacionados con la divulgación de información no pública, la aceptación de beneficios fuera de empleo, y mal uso del cargo oficial durante los años 2018 y 2019, además de todas las declaraciones de políticas relacionadas con el establecimiento y uso de información confidencial e informantes durante los períodos durante los cuales “CI-1” (uno de los testigos que utilizarían en su contra) fue utilizado como informante en DEA).
Abrir los archivos secretos federales. Eso es lo que quería Manuel Recio. Finalmente, en septiembre de 2023 el gobierno abrió una transcripción de una audiencia entre los fiscales, los abogados y el juez, donde se reveló que las escuchas telefónicas se llevaron a cabo gracias a la información de una fuente confidencial con carrera criminal.
- “Hay un número sorprendente de omisiones relacionadas con la credibilidad del informante confidencial. Una historia de tres asesinatos omitidos (…), que son violentos, sino también una extensa historia de narcotráfico, soborno”, dijo la defensa de los agentes de la DEA. Y los abogados también acusaron a quien llevó a ese testigo protegido: el agente del FBI que investigó el caso, de nombre Christopher S. Delzotto.
Dijeron respecto de él: “Era un agente experimentado, es imprudente no identificar esta información, particularmente cuando está trabajando con ese informante confidencial en múltiples casos y ha hablado con él 40 veces”.
- La defensa de John Costanzo Jr. argumentó: “El Sr. Costanzo era un agente activo de la DEA bajo control en todo momento, lo que significa que la DEA tuvo acceso a su computadora, su teléfono, su paradero, sus formularios de seguridad, sus relaciones con los extranjeros, su uso de NADDIS. La DEA también tenía una función administrativa la capacidad de llamarlo y hacerle preguntas. Eso es mejor que una intervención telefónica”, cuestionaron el 29 de junio de 2023.
“Decían que era demasiado peligroso perseguirlo con otros medios de investigación, peligroso para los testigos y otros agentes. ¿En serio? Él todavía estaba activo, todavía armado con un arma de la DEA, con total seguridad y autorización, y afirman que era demasiado peligroso. Esa excusa simplemente no se aplica aquí. Esos son los típicos argumentos que utilizas para operaciones de tráfico de drogas, pero no aquí. Y no fue sólo el señor Costanzo. Quiero decir, hubo otros objetivos”, dejando entrever que se investigaron a otras personas.
Se evidenció la dificultad que se enfrenta para descubrir a los supuestos narcoagentes; no es que alguien se pueda acercar a un funcionario de la DEA y decirle: oye, ¿te gustaría trabajar encubierto contra tu colega?
Sin embargo, es posible imaginar lo que ocurrió gracias a ciertas investigaciones. En un documento de 50 páginas se relata la cooperación de un narcotraficante llamado C-1 con detalles inéditos. Por ejemplo:
- “Así le dice CI-1 al FBI: estuve en una reunión con Manuel Recio y un abogado. Me pidieron que los ayudara a reclutar clientes para compartir una parte de los honorarios. Después de eso, puede asistir a reuniones con Recio y no con ese abogado, sino otro”.
- Reconocen también que el agente Christopher S. Delzotto reveló con precisión que su fuente está siendo investigada por lavado de dinero, pero está dispuesta a proporcionar información con la esperanza de obtener indulgencia.
- Una cosa que se conoció gracias al documento citado en el juicio es que ese testigo, además, es alguien cercano al empresario colombo-venezolano Alex Saab, considerado un testaferro del régimen venezolano de Nicolás Maduro.
- Otra cereza en el pastel fue que Nicholas Palmeri, ex jefe de la DEA en México y Centroamérica, destituido sin que se aclararan los motivos, recibió boletos para ver a los Yankees de Nueva York y aceptó costosas cenas por parte de Costanzo y de Recio.
Los documentos de este juicio también revelaron que cuando Palmeri fue nombrado en 2019 jefe de la oficina regional de la Administración para el Control de Drogas, los agentes Recio y Costanzo se enviaron mensajes de texto donde aseguraban que, en ese momento, “estamos a punto de ser los dueños de México”.
El 24 de octubre pasado inició el juicio con todo y el jurado cuidadosamente observado, como en las películas de Hollywood. Sentados en el banquillo, el 8 de noviembre los agentes fueron declarados culpables. Luego de 11 días se les encontró culpables de cuatro cargos, cada uno relacionado con sobornos, mientras que el tema de su colusión con el narcotráfico fue secundario.
DEA pide 3 mil 700 mdd para «derrotar» a cárteles mexicanos
Para combatir a los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG) y abordar la crisis de drogas en su nación, la DEA ha pedido al Congreso de Estados Unidos una asignación presupuestaria de 3 mil 700 millones 868 mil dólares ($63 millones 176 mil 518.39) para el año fiscal 2024.
- De acuerdo con la Agencia Antidrogas, de agosto de 2021 a agosto de 2022, 107 mil personas perdieron la vida, de las cuales casi dos terceras partes murieron por usar fentanilo y metanfetamina producidos por el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación.
- Los recursos que requiere para el próximo año pretende usarlos para incrementar el número de operaciones de inteligencia contra la importación y distribución de fentanilo y metanfetamina, así como su fabricación y suministro, y para seguir la pista del dinero de las organizaciones criminales mexicanas.
- Otra parte del presupuesto se utilizará para lanzar campañas de prevención en territorio estadunidense, que ayuden a reducir las muertes por el consumo de drogas y la violencia.
También busca identificar, a través de operaciones de inteligencia, a los narcotraficantes y redes criminales que operan en los sitios de mayor violencia de los diversos estados norteamericanos, así como a los grupos delictivos que venden drogas a través de las redes sociales.
- La agencia detalló que se encuentra en las primeras etapas del establecimiento de nuevos métodos que ayudarán a contar con información más precisa para combatir el tráfico de drogas y otros delitos.
- Sin embargo, en su petición al Congreso dejó claro que en este momento es prematuro proporcionar una estadística de desempeño de lo que se planea hacer, porque dichas medidas aún necesitan ser desarrolladas.
- La DEA subrayó que los cárteles son su principal “prioridad” porque están produciendo fentanilo, metanfetamina, y otras sustancias en México, utilizando precursores químicos provenientes en gran medida de China.
Las enormes ganancias que obtienen los cárteles mexicanos son “limpiadas” a través de esquemas internacionales de lavado de dinero, muchas de las cuales están dirigidas por organizaciones delictivas chinas, que hacen uso de criptomonedas y otro tipo de divisas internacionales.
- El documento puntualiza que la fabricación de drogas sintéticas resulta muy barata y son 50 veces más potentes que la heroína. El fentanilo, agregó, es ahora la principal causa de muerte entre personas de 18 a 45 años de edad.
- La agencia menciona que su prioridad es abordar todas las amenazas relacionadas con las drogas actuales, emergentes y en evolución, tanto en su país como en el extranjero, porque las drogas sintéticas están generando un récord de muertes.
La DEA tiene 241 oficinas en territorio norteamericano, entre ellas, 23 divisiones, y a nivel internacional cuenta con 93 oficinas en 69 países.
Asimismo, hizo un recuento de las campañas de prevención que ha puesto en marcha, como la denominada una pastilla puede matar.
En su petición al Congreso reveló que aseguraron 30 millones de pastillas falsas y recetadas con fentanilo, y que se iniciaron 390 casos de investigación.
De igual manera, trabaja en la implementación de trabajos comunitarios para la prevención de drogas, donde se abordan las amenazas locales que existen. Otra parte de los recursos será para la División de Operaciones Especiales, dedicada a identificar, investigar y extraditar a personas involucradas con ganancias de drogas y que financian el terrorismo.
En esta división, dirigida por la DEA, participan organizaciones de inteligencia y militares, incluidas extranjeras, como el Reino Unido, Australia, Nueva Zelanda y Canadá./Agencias-PUNTOporPUNTO