Ciberataques contra instituciones financieras mexicanas e informes de presunta interferencia electoral en todo el mundo están alimentando las preocupaciones entre los analistas de que la elección presidencial del domingo en el país puede convertirse en un objetivo para los piratas informáticos.
- Si bien los mexicanos emitirán su voto el 1 de julio mediante papeleta, se utilizarán sistemas electrónicos para contar y transmitir los resultados, que las autoridades electorales luego entregarán a medios de comunicación confiables. La menor alteración en el proceso de votación puede sembrar dudas y desconfianza, dijo Ron Bushar, vicepresidente de soluciones gubernamentales de la empresa de servicios de ciberseguridad Mandiant.
- La tensión ya es alta en el país dado que las encuestas muestran que es probable que los mexicanos elijan a un izquierdista por primera vez en casi cinco décadas. Ese candidato, Andrés Manuel López Obrador, ha acusado a sus rivales de fraude y colusión para evitar que gane en las últimas dos elecciones presidenciales, mientras que sus oponentes dicen que su presidencia sería un desastre para la economía de México.
- Tal polarización es un terreno fértil para los ciberdelincuentes. «El resultado de una elección casi no importa» para los hackers, dijo Bushar. Se trata de «cuestionar la legitimidad (del proceso) o crear mucha tensión entre los partidos políticos».
Una advertencia llegó en diciembre pasado, cuando el ex asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, H.R. McMaster, dijo que había evidencia de interferencia rusa en la campaña de México, aunque no entregó más detalles sobre cómo Rusia estaba tratando de influir en el proceso.
Rusia fue mencionado nuevamente este mes cuando el equipo del candidato Ricardo Anaya informó que un sitio web que se había creado para publicar información cuestionando los vínculos entre López Obrador y un contratista, había sido desconectado por «un ataque». El equipo de campaña de Anaya dijo que el ataque se había originado en Rusia.
Los equipos de López Obrador, Anaya y José Antonio Meade no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Parte de la preocupación proviene de otros ciberataques que han ocurrido en México recientemente. El banco estatal de promoción de exportaciones Bancomext sufrió un intento de robo cibernético de 110 millones de dólares en enero. En abril y mayo, piratas informáticos lograron infiltrarse en cinco instituciones financieras, incluido Grupo Financiero Banorte SAB, y robaron al menos US$15 millones de las entidades.
«Creo que el sistema electoral es realmente vulnerable, más vulnerables que los bancos», dijo Israel Reyes, consultor internacional en seguridad cibernética, quien trabajó este año como contratista para el Instituto Politécnico Nacional de México como parte de un plan más amplio para el día de las elecciones encargado por el Instituto Nacional Electoral (INE) del país.
Reyes dijo que le preocupa que el instituto no esté preparado para responder a un ciberataque o una falla del sistema. El proyecto en que trabajó Reyes junto a especialistas de Harvard y el MIT fue terminado en marzo por el Instituto Politécnico, que adujo tiempo insuficiente para completarlo./ CON INFORMACIÓN DE ECONOMIA HOY