De nueva cuenta el alcalde en Iztacalco, Raúl Armando Quintero Martínez, vuelve a estar involucrado en actos de corrupción y es que ahora se le acusa de haber ordenado que se despojara de sus locales a 50 comerciantes que se encuentran instalados en el Mercado Río Frío, ubicado sobre la calle oriente 110 en la colonia Gabriel Ramos Millán.
De acuerdo con informes proporcionados al autor de esta columna, en enero de 2020, el inmueble fue sometido a una remodelación, misma que concluyó ayer y durante ese lapso, el funcionario se puso de acuerdo con el jefe de mercados de la demarcación, Mario García para llevar a cabo dicho plan.
Según los inconformes, para que todo ocurriera sin ningún tipo de contratiempo, este último creó complicidad con Moisés Casillas Fragoso y Roberto Oshaya Miralrío –gente cercana a Quintero Martínez- quienes conforman la Mesa Directiva del mercado. Y es que todo indica que de ahí, Armando Quintero pretende sacar más recursos para destinarlos a su campaña mediante la cual pretende reelegirse en el cargo.
La jugada que pretenden Armando Quintero, Mario García, Moisés Casillas y Roberto Oshaya, es que ahora que lograron obtener esos locales comerciales –que en total son 100-, los han puesto a la reventa hasta en 100 mil pesos y al momento ya han vendido algunos.
Este Mercado antes llamado «Los Fierros Viejos» y posteriormente «La Chácharas», constaba de 515 puestos pero tras su reconstrucción el número se redujo a 499.
En ese lugar, cada locatario paga una cuota semanal de 30 pesos a los integrantes de la Mesa Directiva, con lo que se recaudan 14 mil 900 pesos en el mismo lapso, 59 mil 880 pesos por mes y 718 mil pesos al año y ahora que «Las Chácharas» ya es un mercado oficial, obviamente los vendedores están obligados a cumplir con el pago. De hecho si no lo hacen, son intimidados y amenazados con mandarlos a golpear y quitarles sus respectivos puestos.
La situación ha llegado a tales niveles que incluso los afectados han recurrido a diversas acciones legales como la de juncos y el amparo.
Este sábado, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, acudió a ese lugar para inaugurarlo oficialmente y solo con la presencia de unos cuantos reporteros. El acto trató de ser lo más “discreto posible” que incluso Sheinbaum dio un par de declaraciones dentro del Mercado pero sin que se permitira el paso a los comerciantes y a la hora de salir, sus encargados de la logística trataron de sacarla por la parte de atrás para evitar que los quejosos la abordaran y se armó un jaloneo frente a la funcionaria, quien solamente se dignó a responder que “ya se está analizando el caso” y se retiró a bordo de un auto compacto color gris.
Tal y como se ha publicado en esta columna, el actual alcalde en Iztacalco y aspirante a la próxima contienda electoral –en la cual busca quedarse en el cargo-, Raúl Armando Quintero Martínez sigue buscando «patrocinadores» dentro del crimen organizado –algunos de ellos catalogados como traidores- para su precampaña y campaña política de manera muy acelerada, que iniciará el próximo 10 de noviembre.
No solo consiguió el aval del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) así como del partido Morena para quedar «palomeado» y asegurar su triunfo definitivo en la futura contienda y se quede en el cargo sin hacer tanto esfuerzo.
De acuerdo con información altamente confiable, Quintero Martínez recibió en sus oficinas al exsecretario de Seguridad Ciudadana, Raymundo Collins Flores, para que le entregara un jugoso donativo para que pudiera arrancar su precampaña y campaña sin mayor problema.
El alcalde ya tiene «el hueso» asegurado y gran parte de su campaña pagada y cómo no, pues cabe señalar que el ex funcionario policiaco –hermano de la periodista María Antonieta Collins, quien trabaja en la cadena Univisión- fue a visitar a escondidas a Quintero Martínez toda vez que tiene actualmente una orden de aprehensión por el delito de uso ilegal de atribuciones y facultades en su calidad de titular del Instituto de Vivienda en la Ciudad de México.
Nuestras fuentes informativas confirman que «Don Raymundo» tiene una residencia y un hotel en Temixco, Morelos, donde se había ido a esconder para que no lo detuviera la Fiscalía General de Justicia de la CDMX con el apoyo de las autoridades de dicha entidad.
El ex funcionario fue localizado en ese pueblo pero al enterarse de que «ya le estaban pisando los talones», huyó y se refugió en otra casa de lujo que tiene en el fraccionamiento Cocoyoc y ahí permanece encerrado como «ratón de laboratorio».
La acusación contra Collins Flores consiste en la supuesta compra indebida de un inmueble para el Invi.
La orden de aprehensión contra Raymundo Collins forma parte de las investigaciones de la Fiscalía de la Ciudad de México contra ex funcionarios de la administración de Miguel Ángel Mancera.
La Fiscalía capitalina abrió una carpeta judicial contra Collins, así como otros exfuncionarios, presuntamente implicados en irregularidades durante su gestión en el Invi que causaron agravio al Servicio Público de la Ciudad de México y de la sociedad.
Esta es la segunda ocasión en que las autoridades capitalinas intentan detener a Collins.
En diciembre pasado se le imputó una querella similar; sin embargo, luego de considerar que el delito ya había prescrito, el juez ordenó cancelar dicho mandato.
Collins fue acusado —por primera vez— del delito de uso ilegal de atribuciones y facultades, por la compra de un predio ubicado en la alcaldía Álvaro Obregón por 75 millones de pesos. Sin embargo, un juez de Control la canceló porque el delito prescribió en diciembre de 2019.
Raymundo Collins fue uno de los funcionarios más importantes en el gobierno de Miguel Ángel Mancera en la Ciudad de México. Fue director del Instituto de Vivienda de la Ciudad de México desde diciembre de 2012 hasta agosto de 2018, cuando fue designado secretario de Seguridad Pública capitalino, cargo que ocupó por los últimos cuatro meses de la gestión mancerista.
Será difícil que lo agarren porque a fin de cuentas, Collins también cuenta con la protección no solo de Quintero, sino también de los poderosos morenistas Marcelo Ebrard Casaubon, –actual canciller-, Mario Delgado Carrillo — diputado federal y candidato a la dirigencia nacional de Morena- y de Ricardo Monreal Avila –actual senador-.Líneas arriba mencionamos que la orden de aprehensión de Raymundo Collins forma parte de las investigaciones que realiza la FGR contra exfuncionarios de la administración de Miguel Ángel Mancera Espinosa, cuando era jefe de gobierno en CDMX. Y entre esas investigaciones surgen más nombres de delincuentes de «cuello blanco» que apoyan la candidatura de Armando Quintero para que quede otra vez como alcalde en Iztacalco.
Tal es el caso de exsubsecretario de Administración y Desarrollo Humano del Gobierno de la Ciudad de México durante la administración de Miguel Ángel Mancera. Dicha persona, imputada por los delitos de uso ilegal de atribuciones y ejercicio indebido del servicio público, ya había sido detenida el 13 de diciembre pasado, pero tuvo que ser puesto en libertad debido a que presentó un amparo. Vázquez Reyes fue asesor de Mancera y luego fue nombrado subsecretario.
A dicha persona se le acusa de engrosar la nómina de la administración de Mancera con la basificación de 32 mil plazas y de malversar recursos del erario durante 2018. Vázquez fue detenido en su domicilio ubicado en la calle Cráter 524, colonia Fuentes del Pedregal, alcaldía Álvaro Obregón y era vecino de Armando Quintero, quien vive en la calle Granizo 170 en esa misma colonia.
Surgen más nombres de quienes integran el grupo de delincuentes de «cuello blanco» que son perseguidos por la FGJ y que también apoyan a Armando Quintero, para que permanezca como «rey» en Iztacalco.
Se trata de José Ramón Amieva Gálvez, ex jefe de gobierno de la CDMX, /-quien sustituyó a Miguel Ángel Mancera cuando renunció al cargo- y actual candidato por Morena a la presidencia municipal de Mixquiahuala de Juárez, Hidalgo, su pueblo natal.
Amieva recibió esa candidatura por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador a cambio de que entregara toda la información que tenía contra varios ex colaboradores de Mancera. Es decir, los vendió y a todos; de hecho, es el único mancerista que no es perseguido.
Entregó a las autoridades de justicia las nóminas, comprobantes de transacciones, números de cuentas bancarias y tickets de transferencias. Además está aliado con el senador Ricardo Monreal y René Bejarano «El Señor de las Ligas» y por supuesto es enemigo de Claudia Sheinbaum Pardo.
Con la entrega de información fidedigna, José Ramón Amieva «puso» también a los hermanos Luis y Julio Serna, secretario particular y jefe de oficina de Miguel Ángel Mancera Espinosa, ambos ligados a las compañías inmobiliarias que cometen diversos fraudes millonarios con los créditos para vivienda, así como con la venta ilegal de casas y terrenos.Otro gran amigo y «patrocinador» de Quintero es Héctor Serrano Cortés –ex secretario de gobierno en la administración de Marcelo Ebrard como jefe de gobierno y ratificado en el cargo por Miguel Ángel Mancera- actual diputado federal sin partido, quien apoyado por el legislador del PT Gerardo Fernández Noroña, quiere pasarse a ese partido para buscar una candidatura plurinominal en San Luis Potosí, donde tiene una lujosa residencia. Por lo visto, Armando Quintero Martínez no da paso sin huarache.
APUNTES FIDEDIGNOS
La información publicada el jueves en esta columna en donde se desmintió que el presidente Andrés Manuel López Obrador estaba enfermo de Covid-19, toda vez que en realidad había sufrido una embolia cerebral que le obligó a ser atendido de emergencia y estabilizado en el Hospital Central Militar de la Ciudad de México, provocó diversas reacciones entre los integrantes de la 4T, medios de comunicación y seguidores de AMLO principalmente.
La situación se volvió tensa al grado que mucha gente comenzó a presionar al gobierno federal en redes sociales para que el mandatario diera la cara y se acabaran todos los “rumores” de su supuesta enfermedad cerebral.
Entonces apareció un video donde se ve al mandatario cansado, sin cubrebocas, la cara y boca semichueca, y sin ningún síntoma de que tuviese COVID-19. Y es que en la grabación de siete minutos, el presidente no se sofocaba al hablar y caminar; síntoma obligado en quienes tienen esa enfermedad. Se le notaba un semblante tranquilo pero al mismo tiempo decaído y hasta chueco, precisamente por las leves secuelas que le dejó la embolia cerebral que lo mantuvo en reposo por unos días.
Al momento, millones de cibernautas han mostrado su incredulidad ante el supuesto contagio de López Obrador por Covid-19, al grado que catalogan esa grabación como un teatro montado a medias y con varias fallas que una vez más demuestran la hipocresía, la mentira y el cinismo con los que se conduce ante los mexicanos, el llamado “mesías tropical”, seguiremos informando!!!!!
Dudas, comentarios y aclaraciones:
@juanreportero
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