La polémica marcha que se efectuó este domingo 27 de noviembre, en apoyo al disque presidente Andrés Manuel López Obrador, tuvo un costo aproximado de mil 500 millones de pesos, los cuales salieron de los recursos públicos.
Es decir cada mexicano que trabaja y paga sus impuestos, aportó involuntariamente para que ese evento masivo al que también asistieron niños, pudiera efectuarse en las calles de la Ciudad de México.
Ese monto se deriva del cálculo del traslado de unas 700 mil personas provenientes de los 31 estados de la República, con una media de 10 mil a 20 mil personas, para lo que se necesitaron entre 250 y 500 camiones por entidad.
Además se cubrieron los gastos de hotel, alimentos y viáticos en general, así como los accesorios de apoyo como camisetas, gorras, banderines y pancartas, estimando una cifra de aproximadamente 20 millones por cada 10 mil personas que acudieron a la marcha.
De acuerdo con analistas ese dinero pudo haberse usado para adquirir vacunas o medicinas para los niños con cáncer, para la gente que padece diabetes u otro tipo de enfermedades consideradas como graves o crónico degenerativas… pero AMLO y sus huestes de morenos prefirieron gastarlo en camiones, frutsis, bolillos, chilaquiles (mal preparados), tortas y hasta carnitas que honestamente no se veían nada apetecibles.
Y en las instalaciones del Metro de la Ciudad de México apareció propaganda de la contramarcha que encabezó López Obrador en respuesta a la manifestación ciudadana del 13 de noviembre para defender al Instituto Nacional Electoral (INE).
Al respecto, el priísta Roberto Madrazo Pintado señaló que “Sabíamos que abusarían de los recursos del estado para su contramarcha. Claudia Sheinbaum no se cansa de aprovecharse del Metro”,
Madrazo también resalta que Mario Delgado, líder nacional de Morena, confirmó que los 20 gobernadores del partido guinda confirmaron su asistencia a la marcha de López Obrador a celebrar sus cuatro años de mandato: ¿Qué celebran, los 130 mil homicidios, la pérdida de ingreso de la clase media o el desabasto de medicinas? cuestionó el ex dirigente priista.
En su conferencia del 23 de noviembre, López Obrador reconoció irónicamente las insinuaciones de la oposición en las cuales han asegurado que AMLO convocará a acarreados para “llenar” a los contingentes. En ese sentido, también refirió a los comentarios en los que descalificaron la demostración como un desfile.
“Sí vamos a marchar. (…) Va a haber marcha, desfile. Van a haber acarreados, pura gente que no sabe a qué va”.
Pese al optimismo que ha denostado al respecto, en ese instante, el Jefe del Ejecutivo no se atrevió a estimar cuántos asistentes registraría la movilización que correrá desde el Ángel de la Independencia a la explanada del Zócalo: “Es voluntario, la gente decide si va o no va”, aseveró el titular del Ejecutivo federal.
Horas antes de que iniciara la marcha, se manifestó la presencia de camiones y autobuses con mantas que decían desde dónde venían, es decir, vehículos llenos de simpatizantes llegaron a las inmediaciones de la colonia Juárez en la alcaldía Cuauhtémoc, donde presumían que venían desde Veracruz, Oaxaca, Tabasco, Guerrero, Chiapas, Yucatán, Quintana Roo y de otros estados,
De inmediato, este acto fue interpretado por los opositores al actual gobierno federal como un acarreo de manifestantes que atravesaron México por alguna promesa y/o extorsión por parte del oficialismo.
Y obviamente no estaban equivocados; efectivamente, los participantes reconocieron ante este columnista que mediante 300 pesos en efectivo y con la promesa de que les iban a dar desayunos, playeras, gorras y bebidas heladas «pa la calor», lograron comprarles la voluntad, porque la mayoría eran gente humilde que trabaja en el campo para medio sobrevivir y no es simpatizante de «El Peje».
Este mismo caso se repitió precisamente en las 16 alcaldías que integran la capital del país, ahí los representantes de Morena se dieron a la tarea de contactar a diversos líderes vecinales para que convocaran a sus grupos y los llevaran a la marcha, solo que aquí, muchos decidieron involucrar a menores de edad.
En este sentido cabe mencionar que Sandra Xantall Cuevas Nieves, alcaldesa de la Cuauhtémoc, aseguró que la “marcha del odio, de la división, de la desigualdad, de la corrupción” se realizará con el acarreo de numerosos funcionarios de diferentes niveles de gobierno y advirtió que beneficiarios de programas sociales y locatarios de la Ciudad de México también fueron obligados a apoyar la marcha.
Y aunque algunas imágenes que circulan en redes sociales demuestran que hubo pase de listas y pagos a asistentes, no se tiene un registro fidedigno que pueda dimensionar la cantidad de voluntades que pudieron ser compradas para participar en la marcha en apoyo a AMLO. Pero con toda seguridad, fueron miles.
APUNTES FIDEDIGNOS
Y por otro lado, estimados lectores, las emociones que dejó la derrota de la Selección Mexicana ante la Selección de Argentina generó todo tipo de debates y opiniones entre los fanáticos del fútbol. Sin embargo, recientemente se viralizó un gesto de Lionel Messi que enfureció más a la fanaticada del Tricolor al grado de Saúl Canelo Álvarez se involucró en el tema.
El boxeador mexicano “amenazó” a Messi de golpearlo por la “falta de respeto” que mostró al término del partido correspondiente a la segunda fecha de grupos del Mundial de Qatar 2022.
A través de Twitter, el Canelo Álvarez se enojó con el goleador de la albiceleste por la manera en la que actuó con la playera del equipo Tricolor ya que en redes sociales circuló un video de cómo Messi habría pateado el jersey del equipo azteca. Por ello, Saúl publicó en su cuenta: “Vieron a Messi limpiando el piso con nuestra playera y bandera ????”.
Aquel comentario dio paso a una serie de señalamientos del campeón mexicano en contra del delantero argentino. Y es que Álvarez no contuvo su incomodidad y aseguró que si se encontraba con Messi habría problemas, ya que en una segunda publicación puso lo siguiente: “Que le pida a Dios que no me lo encuentre!!”
El campeón unificado en los supermedianos continuó con su argumento en redes sociales, ya que expuso que él sí le tiene respeto a la hinchada argentina y a su país en general, por lo que lamentó la presunta manera en la que Messi —festejó junto a la Scaloneta— la victoria que tuvieron ante el Tri.
Mientras Saúl Álvarez estaba expresando toda su molestia en contra de la actitud que tomó Messi en el vestidor al “patear” la playera de México, David Faitelson se unió a la discusión y se atrevió a detener la opinión del Canelo pidiéndole que dejara de ponerse “el traje de payaso”…¡¡¡¡SEGUIREMOS INFORMANDO!!!!
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