Por Jorge Martínez
Cuando todo le sonreía en la alcaldía Milpa Alta a Jorge Alvarado Galicia, ex candidato de PRI, PAN y PRD, y a Judith Vanegas Tapia, de Morena- PT, sin hacer ruido se les coló por la retaguardia Cuauhtémoc Martínez Laguna, de Fuerza por México, quien se metió a la pelea y en zonas clave como San Pedro Atocpan puntea en las encuestas.
Alvarado Galicia, quien a través de la “Juanita” Ana Lilia Robles, su esposa, busca regresar a la alcaldía que saqueó a placer, y la candidata de Morena, ex súper delegada que manejó los programas clientelares, ya se sentían finalistas en la disputa por la alcaldía, de pronto Cuauhtémoc les quitó el sueño y “caballo que alcanza gana”.
El candidato de Fuerza por México fue el último en entrar a la contienda por la alcaldía Milpa Alta porque buscó ser abanderado del PRI, su partido por décadas, pero no lo dejaron pasar no obstante que era el mejor evaluado. Le taparon el paso con una barrera de corrupción.
La candidatura tricolor la ganó Alvarado a golpe de millones, recursos adquiridos de sobra cuando fue delegado en Milpa Alta, en la pasada administración, y acumuló denuncias por malos manejos y múltiples corruptelas. Lo protegió en la cámara de diputados local su amigo Adrián Rubalcava, hoy candidato tricolor por Cuajimalpa.
El propio equipo de Alvarado dragoneó que la candidatura le costó al jefe del clan cinco millones de pesos que habrían sido entregados a Israel Betanzos, del PRI capitalino, así como tres camionetas de lujo “donadas” al CEN priista.
Frente a la enorme barrera puesta en su partido, Cuauhtémoc Martínez aceptó la oferta de Fuerza por México y se puso a trabajar casa por casa, colonia por colonia, barrio por barrio y como es muy conocido, pues antes realizó un buen trabajo al frente de delegación, los milpaltenses pronto se comprometieron con su proyecto político.
Y en tiempo récord, sin alardes de dinero del que carece, con publicidad de boca en boca, Cuauhtémoc dio alcance a los punteros quienes ahora no pueden conciliar el sueño mientras sostienen entre ellos una feroz pelea con fuertes ataques mutuos.
Por citar apenas uno de sus golpes, la candidata morenista ratificó esta semana ante la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (FEDE) de la CDMX, la denuncia penal por el delito de violencia política de género en contra de Jorge Alvarado y su esposa la “Juanita” Ana Lilia Robles y de quienes resulten responsables.
El marido y su “Juanita” de la alianza va por México están acusados por la difusión de videos dolosos, elaborados para perjudicarla, por el retiro de propaganda electoral y la realización de diversos actos públicos que incitan a la violencia contra la candidata morenista.
“Nos están violentando en nuestros derechos humanos y políticos, nos están quitando todo nuestro material electoral, nuestras las lonas, y en las plazas públicas a grito abierto nos dicen basura, basura”, se quejó Vanegas Tapia en la Fiscalía.
Y mientras los supuestos punteros en Milpa Alta se pelean a muerte, Cuauhtémoc Martínez se les coló por la retaguardia, tal como lo señala una encuesta mandada a hacer por la dirigencia del PRI y a la cual este tecleador tuvo acceso y que prendió las alarmas en el mando tricolor pues Alvarado y su “Juanita” van en alianza con el PAN y PRD.