Opinión por Carlos Ramos Padilla*
Nos están convirtiendo en un país de baratijas, de superficialidades, de banalidades…alguna vez aprendimos a debatir, a reflexionar cosas asombrosas. Veíamos un futuro cierto. Éramos ejemplo para muchas naciones.
Se nos admiraba. Y en sólo dos años, los últimos, hemos caído en la burla internacional, en el desprestigio y en el menosprecio. Nuestra economía no invita a las inversiones, nuestra diplomacia no tiene energía y si muchos errores, la violencia se generaliza, la radicalización más, la pandemia se soluciona a través de saldos de vacunas de otros países, en materia migratoria hay decadencia y descontrol y hoy día el debate nacional ya no son los conservadores ni los peligrosos periodistas, nuestra discusión radica en un remedo de logotipo que tratará de identificar a un hangar convertido según el presidente en el aeropuerto más impactante e importante del planeta. Veamos el nivel de sujetos como Pablo Almicar Sandoval (46 años) activista de Morena, hermano de Irma Eréndira Sandoval, titular de la Secretaría de la Función Pública.
Este individuo escribió en redes sociales “ un escándalo por el logo del Aeropuerto Felipe Angeles pero nadie menciona que tuvo un costo bajo (3 mil pesos). En España gastaron casi $3 millones (139 mil euros + IVA) en actualizar un logo.
Pero la derecha mexicana admira la corrupción extranjera”. No si éstas expresiones son de más baja estatura que las pronunciadas por el propio López Obrador al acusar que por culpa de los periodistas no hay médicos ni especialistas para tratar la pandemia.
Así no éramos los mexicanos, así no nos tratábamos, así no nos gobernaban acusando montajes cuando la propia estructura presidencial se ha manejado por populismos y engaños, como el propio aeropuerto Felipe Angeles.
Es triste y preocupante como instituciones tan sólidas como el propio Ejército Mexicano, o el INE y otras más se encuentran cuestionadas, en entredicho o sancionadas sin vergüenza alguna. Ya no vemos hacia arriba quieren que andemos gachos, humillados, sumisos. Personajes como Pablo Almicar movía sus hilos para pretender gobernar a Guerrero pero de él a Félix Salgado no hay gran distancia, solitos se exhiben.
Recuperarnos será un proceso difícil y muy, pero muy costoso más aún cuando la mayor desconfianza de un mexicano es otro mexicano por su nivel intelectual, por su grado académico, por su plataforma económica, por sus preferencia política, por su género, por su actividad.
Hoy los espacios informativos están salpicados de sangre igual que nuestros pueblos, o son homicidios o son feminicidios o es la pandemia y lo que escuchamos es que todo se debe a los neoliberales, a otros, a los pasados.
El presidente para mantener su presente vive en el pasado y no presenta futuro. Somos considerados dos como discapacitados intelectuales. Aquel que piensa, escribe, opina, debate o contradice es el primer elemento para ser llevado a un paredón mediático.
Aquel que por diversas razones no ha podido producir, crecer, aprender, compartir, es premiado, es más reconocido que un médico que hace milagros de vida con los enfermos terminales, ellos los médicos son enviados a un tercer nivel porque valen más los galenos cubanos que llegan a Mexico invitados por la 4aT.
Aquí lejos de escuchar a un intelectual emérito de la UNAM se le da vigor y espacio a Alfredo Adame para que nos detalle cómo se “Ching..” lo mismo billetes que tapabocas, que nos indica cómo se compran partidos políticos o que ya están enterado de cómo se está armando el tinglado para que Ebrard sea el próximo presidente “ por eso hay que estar ahí”. Y todavía nos encontramos a cientos de mexicanos que usan las redes sociales como su mejor arma para insultar, para buscar pleito, para creer que con leperadas se defiende a la nación.
Repito, así no éramos, los mexicanos éramos envidiados, reconocidos, bien recibidos en cualquier rincón del mundo. Hoy ya no, hay cartas expresas para que extranjeros no vengan y hay indicaciones precisas para que no seamos aceptados en algunos países. Declive, es nuestra actual situación.
*Conductor del programa Va En Serio mexiquense canal 34.2