Si los hombres fueran realmente “buenos”, los príncipes y los gobiernos no serían necesarios, pero dado que son malos, si no existiera la espada y la ley, “se devorarían unos con otros.” El poder político es ineludible. “Nicolás Maquiavelo”.
Por: Francisco J D´Angelo Ohep
La vieja izquierda del PRI, se une en un solo hombre para llegar al poder por los votos pero necesitaban una nueva marca MORENA y un plan atractivo a las nuevas e inocentes generaciones de allí nace la “FRANQUICIA CHAVISTA”.
Este modelo también está basado en la promesa a los empresarios de establecer nuevos monopolios, asumiendo nacionalismos antiguos. En la primera etapa, la Franquicia Chavista trata de levantar los favores y el apoyo de grandes empresarios, quienes piensan que les van a cerrar las fronteras, a eliminar la competencia y serán monopólicos, haciéndose aún más ricos. En efecto, revocan contratos hasta llegar a las expropiaciones, pero en realidad, tratan de expropiar empresas transnacionales para entregárselas, no a los empresarios de siempre, sino para crear nuevos actores que beneficien a la franquicia y al final las llevan a la quiebra.
Así el país termina volviéndose dependiente de las importaciones y su población vive en niveles inimaginables de desempleo, inflación, escasez y precios altísimos, porque no se produce nada en el país. En consecuencia, los empresarios que apoyaron en el pasado este proyecto, terminan perdiéndolo todo.
La “Unión Cívico Militar” es un concepto que se basa en quitarle a la iniciativa privada sus funciones típicas para debilitarla y entregar estas actividades a los militares: Desde la administración de obras públicas, hasta la construcción de carreteras, puertos, aeropuertos, etc. Así, hacen dependiente a la iniciativa privada, dándole poder a los militares y éstos, al ejercer funciones civiles, quiebran a los empresarios, los cuales no podrán discutir, ni demandar a los militares por esta “apropiación”.
Otro objetivo es torcer voluntades militares: Ellos protegerán a toda costa sus nuevas funciones y les atraerá sobremanera el ganar tanto dinero.
El resultante de este proceso es:
- A los militares les quitan las responsabilidades de su oficio, no generan empleos, no negocian, “dan órdenes” y tienden a violar Derechos Humanos.
- A la Sociedad Civil la dejan sin fuentes de trabajo, sin ingresos y con obras muchas veces inconclusas que nadie, se atreve a reclamarles, incluido el propio Presidente.
En fin, el país termina sin infraestructura y destruido como Cuba. En la variante venezolana, también expulsaron a los americanos con oficinas de la DEA, CIA, y darán entrada a la oficina del G2 cubano, para que trabaje con el ejército en el control social a los opositores. No aceptaran ayuda alguna de países como USA o de la UE. Por otra parte, en el caso Venezolano los militares crearon su propio cartel para traficar drogas, señalado por la DEA como el Cartel de los Soles.
Como parte de la destrucción institucional, la Franquicia Chavista trata de eliminar el Congreso, llamando a Asambleas Constituyentes para reformas constitucionales. También busca y logra penetrar el Instituto Nacional Electoral para ganar todas las elecciones posibles. Luego propone al pueblo que acepten la reelección o los referéndums, para reelegirse tantas veces como les parezca.
Otra estrategia es destruir a todos los partidos de la oposición, dejando solamente a alguno nuevo o con poco poder, hasta lograr ilegalizarlos a todos.
Como corolario, hay que perseguir a las ONGs y Sociedad Civil Organizada, manteniendo acosado a cualquier opositor, con excusas hasta inverosímiles. Apresándolos, torturándolos e incluso, asesinándolos.
Con la eterna elección, ya que aprueban reelecciones infinitas, el mandatario no administra el Estado pues al caudillo le desquicia la administración y quienes la llevan a duras penas son sus Secretarios. El presidente convertido en caudillo todopoderoso y aprendiz de dictador vive en una constante campaña electoral pues eso sí le entusiasma. Realiza jornadas interminables de programas de TV, responsabilizando a terceros, a la oposición, a los extranjeros, a los oligarcas, a los conservadores, a cualquiera que no sean ellos mismos, porque nada funciona. Hace que todo lo que se predica en su gobierno, lo crea la mayoría de la población, quien lo sigue hasta que muere por hambre o por falta de medicinas. Quienes aún osan rebelarse, deben huir a un exilio forzado.
Los Medios de Comunicación deben ser intervenidos o comprados por completo, con esto logran que el control del Estado sea total y que los periodistas sean perseguidos, exiliados o encarcelados.
Mientras tanto, los nuevos medios transmiten un discurso muy parecido al cubano, el cual repiten hasta la saciedad, con la finalidad de que todos crean su mentira. Es impresionante ver cómo tratan de hacer que prevalezca una verdad paralela, según la cual el país está supuestamente en perfectas condiciones pero bajo asecho de los enemigos.
El control de la producción y distribución de alimentos y medicinas entra en el plan macabro de quitarle a la iniciativa privada la distribución, venta de medicinas y alimentos, desmantelando las empresas encargadas de que lleguen los suministros a cualquier parte del país, incluidos los poblados más remotos. Esto trae como lógica consecuencia que haya escasez de productos y precios exorbitantes por lo que la población comienza a enfrentar desnutrición y un sin fin de enfermedades.
Otra forma de Control la ejercen al inducir a los ciudadanos a inscribirse en el partido de gobierno. A través de este mecanismo obligan al pueblo a utilizar el carnet del partido para poder adquirir, luego de interminables filas, los alimentos y medicinas que necesitan. Por supuesto, en el país no existe el derecho a la protesta. Esto es el colmo del control psicosocial y roza con el esclavismo. A esto se le suma una agresiva llegada de “médicos” cubanos que se encargan del trabajo de inteligencia y control social.
Como complemento, convierten a sus miles de partidarios, que al principio fueron servidores sociales, que realizaban los censos y tenían labores partidistas, en paramilitares. Les entregan armas y los entrenan para la defensa de la revolución, inspirados en la estrategia de las milicias iraníes BASIJ (fuerzas paramilitares iraníes de jóvenes voluntarios) e incluyen bandas armadas de delincuentes, grupos colectivos que ejercen control en los barrios pobres, para que las personas no se rebelen ante el régimen. En Venezuela ha sucedido todo esto y más; se le dio entrada a la Guerrilla colombiana, las FARC y el ELN, entregándoles extensiones de territorio donde las fuerzas armadas y el Estado no llegan, para que ejerzan el control y sean otro brazo armado del régimen. Estos grupos también trafican con personas, oro, drogas y cobran derecho de piso, mientras planean cómo llegar al poder en Colombia.
El régimen en Venezuela modificó a su favor, las relaciones internacionales con los países occidentales, haciendo además, negocios con Cuba, Siria, Rusia, China, Irán y Turquía. También apoyan con dinero a cualquier candidato a presidente de ultraizquierda para que les deban favores y los protejan. Hay documentación que prueba que existen campos de entrenamiento de grupos terroristas islámicos como Hezbolá e ISIS, con la finalidad de que se conviertan en otro aliado del gobierno para la culminación del estado forajido.
Al final, aunque pensemos que lo que sucede en México es un fenómeno de la izquierda progresista con populismo o es el último respiro de los dinosaurios que fueron del PRI, si lo ponemos bajo la lupa, entendemos que lo que sucede se parece demasiado al chavismo.
Hemos de investigar ¿quién vendió la franquicia, cuánto pagaron y qué pidieron a cambio?
Es común ver a funcionarios del régimen de Maduro con sus familias en Ciudad de México, sabemos que tienen acuerdos con cancillería y es evidente que se apoyan.
Según el último estudio de la Embajada Británica en Venezuela y Transparencia Venezuela; “Crimen organizado y Corrupción en Venezuela: Un problema de Estado. El desastre chavista en Venezuela degeneró en 9 bloques criminales:
Megabandas criminales. Los Seudosindicatos de la construcción, petroleros y mineros. Los “Colectivos” armados y violentos. Los “Pranes” armados y violentos. Fuerzas Bolivarianas de Liberación o “Boliches”. Holding de la Corrupción. Traficantes de drogas. FARC, ELN. Las bandas criminales (Bacrim)
Es imperiosa la necesidad de que los países democráticos frenen a dictaduras como la de Maduro, porque de lo contrario los desplazados venezolanos no van a ser 5 millones, sino 10 millones o más, y a los grupos armados antes señalados; ya no les va a ser suficiente la superficie geográfica de Venezuela; se van a extender al continente, poniendo en peligro la seguridad geopolítica mundial.
Ojalá para las próximas elecciones en México, los mexicanos de bien logren captar y expresar la necesidad de un cambio de rumbo…
Francisco J D´Angelo Ohep
Master en Derecho Internacional por la UIA Ciudad de México.
Director Jurídico de Venemex Asociación de Venezolanos en México, que ha ayudado a miles de desplazados y refugiados victimas de la dictadura de Nicolás Maduro.
Colaborador del programa Sin Filtros México.