OPINIÓN. RAMÓN ZURITA SAHAGÚN
Sin duda que una de las grandes metas que tiene el Movimiento de Regeneración Nacional es la conquista del vasto territorio mexiquense, el que se encontró cerca de convertirse en la primera entidad en ser ganada por el nuevo partido hace cinco años.
Estuvo cerca con su candidata, Delfina Gómez Álvarez, aunque algo falló a último momento y el priismo se sostuvo en una de las únicas tres entidades que no han sido gobernadas por partido distinto al tricolor.
Delfina parecía una locomotora en su ruta al gobierno mexiquense, aunque en las semanas previas a la elección se notó que su equipo desbarrancó, les faltó estrategia y el priismo con su candidato Alfredo del Mazo la rebasó, dejándola atrás por tres puntos porcentuales.
¿Qué le pasó? Sus operadores no supieron concretar. La estrategia fue fallida y el proceso electoral les quedó grande.
En la cercanía de la sucesión mexiquense la actual secretaria de Educación Pública se vislumbra nuevamente como candidata, como parte del grupo Texcoco, donde César Horacio Duarte e Higinio Martínez, guardan mínimas posibilidades de contender por la nominación.
Pero como parte del mismo grupo habrán de alinearse alrededor de su candidatura o del que sea, mujer u hombre.
Y es que, en el Estado de México, se requiere de un buen estratega que pueda conciliar todos los grupos del oriente, norte, sur y poniente de la entidad, para evitar un desplome como la vez pasada.
Uno de esos personajes que asoma para poder concretar las alianzas, definir la estrategia y darle fortaleza a la candidatura de quien sea abanderado o abanderada de MORENA es Juan Hugo de la Rosa García, ex alcalde de Ciudad Neza y quien se ha desarrollado como un verdadero operador de estrategias electorales y conciliador de grupos.
La historia de de la Rosa García se remonta a varias décadas de trabajo en el oriente de la entidad, donde fue alcalde de la ciudad, diputado federal y local y operó exitosamente para que en los comicios de 2021 el municipio quedara en manos de MORENA por vez primera, después de un amplio dominio perredista.
Juan Hugo superó con creces a quienes constituían el grupo fuerte de ese municipio dominado por Juan Zepeda y Héctor Bautista.
De la Rosa García gobernó el municipio y fue reelecto para un período consecutivo, dejando constancia de su trabajo en la administración municipal.
Juan Hugo tuvo su paso por el PRD, donde bajo su conducción a nivel estatal, se logró la reconquista de Neza. Chalco y Valle de Chalco que los priistas habían arrebatado a ese partido en 2009.
Dentro de la debacle sufrida por MORENA el año pasado en esa entidad, donde perdieron la mayoría de los municipios grandes que gobernaban como Naucalpan, Tlalnepantla, Toluca, Metepec y otros más, las victorias en Neza y Ecatepec, les permitió no salir tan lastimados.
Veremos cómo reacciona el priismo que parece encontrarse a punto de fisurarse por la proyección que se le intenta dar a Alejandra del Moral, para contender con Delfina, si es mujer la nominada por MORENA o con Elías Rescala, en el caso de que sea hombre, César Horacio Duarte o Higinio Martínez.
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Qué sucede con los estados con nuevos gobiernos, principalmente de extracción MORENA, ya que son los que más sufren el acoso de los grupos delincuenciales. Colima, Guerrero, Michoacán, Sonora y Zacatecas, enfrentan grandes problemas y ni siquiera la presencia de la Guarda Nacional logra bajar la incidencia delictiva. Asesinatos, amenazas, exhibición de su fuerza y armamento, se suceden una y otra vez en esas entidades, sin que se pueda contener la presencia del crimen organizado. Veracruz es un caos tanto por su gobierno como por la presencia de otros grupos que asolan el estado. Pocas son las entidades gobernadas por MORENA que se salvan de esta quema que pone en jaque a la población.
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