Opinión ABRAHAM MOHAMED Z.
El presidente Andrés Manuel López Obrador finalmente decidió quitarle el veto a Ricardo Monreal, y no sólo le reconoció el liderazgo parlamentario por la aprobación de la reforma a la Ley de la Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional, sino hasta lo llamó a Palacio Nacional para una reunión privada.
Más vale tarde que nunca, dice el dicho, pero hoy fue el día clave para que, luego de dos años de distanciamiento, el presidente de la República le haya levantado el castigo y convocara a su oficina, de manera individual “para platicar”, al Coordinador de los Senadores de Morena.
Monreal Ávila ha sido un colaborador leal al país, al Presidente y a sus propias convicciones.
A lo largo de su trabajo legislativo ha dejado en claro que para él “la Ley es la Ley”, y en donde ha tenido que diferir de posición con el mandatario, lo ha hecho votando en contra.
Este día “Jueves de Corpus” López Obrador reconoció a Monreal como uno de los liderazgos, entre otros, que contribuyeron con su talento, esfuerzo y habilidad política para tener a la Guardia Nacional en las calles de México apoyando a las Fuerzas Armadas en trabajos de seguridad.
Uffff….pasaron casi dos años para que esto ocurriera. Y de ello dio cuenta Monreal al salir de Palacio Nacional y ser entrevistado por los colegas periodistas a quienes les dijo que se trató de un “encuentro afortunado… que refuerza nuestra amistad y convicción para continuar con la transformación que un día soñamos….”
También, Monreal agradeció el reconocimiento que AMLO hizo en “La mañanera” al trabajo de las y los Senadores que él mismo coordina.
Además afirmó ser impensable lanzarse con candidato independiente para lograr sus deseos de contender por la Presidencia de la República, y para disipar cualquier duda, enfatizó “con Morena hasta la muerte”.
De ahí la foto. Una fotografía con Andrés Manuel, su amigo y mentor, ambos sonrientes, nada acartonados. Con esta reunión se muestran señales inequívocas de que la congruencia política es una virtud que produce beneficios a quien la practica.
Y el ejemplo más claro es el mismísimo Ricardo Monreal quien se mantuvo en su postura independiente, respetuosa de la Ley, pero leal al presidente López Obrador.
Reitero que a partir de éste Jueves de Corpus, después de dos años de que AMLO lo ignorara, el Senador vuelve a estar en el ánimo del mandatario quien con este hecho pone el ejemplo para que la reconciliación y unidad se consiga al interior de su Morena que él creo con la ayuda leal y franca de gente valiosa como Monreal, lo cual bien que lo saben Adán Augusto y a Claudia Sheinbaum a quienes también AMLO citó para que se estrecharan las manos como amigos y correligionarios con el compromiso de unidad ante él.
Por razones fáciles de intuir, no fue requerido a Palacio Nacional Marcelo Ebrard a quien majaderamente y estultamente ya vituperan calificándolo como “corcholata aplastada”.
ADENDUM:
Cosas tremendas de la política…..Ebrard cae de la gracia de AMLO y Monreal después de dos años de ser rechazado, ya es “bien visto” por el Presidente y con promisorio futuro.
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