Opinión. ABRAHAM MOHAMED Z.
Aunque Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México haya respondido de inmediato al presidente López Obrador ratificando el irrestricto respeto a nuestra soberanía que AMLO reclamó muy molesto por las críticas que a la Reforma del Poder Judicial hiciera el diplomático norteamericano y que apoyó el embajador canadiense, por lo que decidió poner “en pausa” las relaciones sus respectivos gobiernos, intuyo que este “desaguisado” va a dar pa’más.
Y te diré por qué:
Está confirmadísimo que se trabaja a marchas forzadas para que antes del 30 de Septiembre en que termina el sexenio del presidente López Obrador quede afinada la estrategia que de hecho él ya la arrancó con éste reclame al embajador gringo.
Tal estrategia es para aplicarla en la revisión del T-MEC (Tratado de Libre Comercio entre México-Estados Unidos-Canadá) que entró en vigor el 1 de Julio del 2020 con vigencia de 16 años y para ser revisado cada 6, o sea que se revisará en 2026.
Hay que mencionar que la Secretaria de Economía, Raquel Buenrostro se aplicó en esta encomienda de su jefe.
Marcelo Ebrard, que será el Secretario de Economía en el gobierno de Claudia Sheinbaum por su parte ya también trabaja en dicha la estrategia siguiendo directrices que por ahora son convenientes y obviamente será quien formalmente participe en la revisión del T-MEC en 2026, sin importar quien gane la Presidencia de Estados Unidos, si Donald Trump o Kamala Harris.
No hay que desestimar la valiosa interdependencia y fuertes cadenas de valor que se mantiene entre los tres países.
Pero también te diré que China será un factor de discordia en la revisión del T-MEC por el enorme potencial comercial que significa y es ahí, donde la estrategia de la 4T ideada por AMLO y que utilizará Ebrard obedeciendo la continuidad de Claudia Sheinbaum, quizás en vez de beneficiar, pudiese afectar a México.
Está muy claro para el gobierno mexicano ubicar donde están y cuáles son las alianzas estratégicas, las cadenas de valor y de respeto para un desarrollo socio económico equitativo y firme con paz. No hay que equivocarse, sería terrible.
Ten presente que como antecedente al T-MEC, en 1994, Estados Unidos, México y Canadá crearon la región de libre comercio más grande del mundo a través del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y esto detonó el crecimiento económico y mejoró el nivel de vida de la población de los tres países miembros.
No hay duda de que al fortalecerse las normas y procedimientos que rigen el comercio y la inversión con el Tratado, se construyó una firme plataforma que incrementó la interdependencia entre las tres naciones con innegables beneficios.
¿Qué opinó AMLO del T-MEC al entrar en vigor el 1 de julio del 2020?
Aquí reproduzco lo que el señor presidente López Obrador entonces comentó:
- Ayudará a la economía mexicana, luego de sufrir un declive, derivado de la pandemia de Covid-19.
- Esto para México va a significar inversión, es decir, va a seguir llegando inversión foránea, extranjera.
- Es muy importante que entre en vigor el Tratado y muy oportuno, porque estamos por salir de la pandemia y necesitamos reactivar la economía salir de la recesión económica, de la caída que produjo el Coronavirus en la economía mundial.
Y hay que:
- Promover el crecimiento del comercio digital y fortalecer la protección de datos de los consumidores.
- Tener mayor acceso a servicios financieros y más oportunidades para las instituciones financieras mexicanas en los mercados de la región.
- Adaptar el Acuerdo a la evolución del sector de Telecomunicaciones, optimizando las condiciones de infraestructura y de libre mercado necesarias para incentivar su desarrollo futuro.
- Incorporar mecanismos de diálogo y colaboración para promover la participación de las Pymes en el comercio regional.
- Fortalecer y ampliar la protección de los derechos de los trabajadores.
- Establecer obligaciones claras para cooperar en el combate a la corrupción.
- Incorporar disposiciones que regulan la actividad de las Empresas Propiedad del Estado, para prevenir distorsiones en los flujos de comercio e inversión entre nuestros países.
O sea, en pocas palabras, la estrategia presidencial a la que he aludido, es con el fin de conseguir los mayores beneficios que se puedan para México en la revisión del T-MEC en un trato de igualdad y con la patriótica principio de respeto a nuestra soberanía como Nación.
ADENDUM: El regalo de despedida de su Congreso de la Unión para AMLO como Presidente, será la Reforma del Poder Judicial.