En caso de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantenga su intención de imponer aranceles a partir del próximo 2 de abril, al menos habría 10 implicaciones para México, advirtió el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República.
- Un estudio titulado “Análisis sobre las implicaciones de la política arancelaria del presidente Donald Trump” advierte que no se descarta que Estados Unidos reactive de manera unilateral la imposición de aranceles para reducir su déficit comercial con nuestro país.
“Es importante tener en cuenta que el déficit comercial de Estados Unidos con México ha sido creciente durante los últimos años y se explica, entre otras razones, por la fuerte integración productiva de ambos países, los costos laborales competitivos en México y la demanda interna de Estados Unidos lo que ha supuesto que el déficit haya alcanzado los 171 mil 809 millones de dólares en 2024, según cifras del Departamento de Comercio de ese país”, señala el documento.
Destaca que “si la presidencia de los Estados Unidos considera que no se han hecho los esfuerzos necesarios para resolver los asuntos de migración y narcotráfico por parte de México, o no se han logrado los resultados esperados, y la negociación política no consigue acuerdos satisfactorios para los Estados Unidos, entonces crece la probabilidad de que se aplique alguna estrategia arancelaria, aunque no necesariamente sea la de los gravámenes generales del 25 por ciento, sino alguna estrategia diferenciada”.
El estudio detalla que al menos serían 10 las implicaciones para México por una política arancelaria impuesta desde la Casa Blanca:
- Desajuste en los costos de producción en Estados Unidos, que genere presiones inflacionarias.
- Reducción del nivel de exportaciones mexicanas a los Estados Unidos.
- Pérdida de empleo y de inversiones productivas.
- Presiones e inestabilidad en el tipo de cambio.
- Pérdida de competitividad de la región de América del Norte.
- Dificultades en el funcionamiento de las cadenas de suministro.
- Incertidumbre y falta de previsibilidad.
- Debilitamiento de la actividad productiva de cada país.
- Discrepancias con el T-MEC y supeditación de las reglas de libre comercio.
- Represalias arancelarias de los socios comerciales.
Según el análisis, el impacto en la reducción de las exportaciones en México sería mayor para 12 estados del país y la Ciudad de México.
- La Ciudad de México tiene el 18.8 por ciento de las ventas internacionales hacia Estados Unidos; le sigue Chihuahua, con 17.2 por ciento; Nuevo León, con 13.9 por ciento; Baja California, con 12.1 por ciento; Jalisco, con 7.81 por ciento.
- Tamaulipas, con 6.62 por ciento; Coahuila, 4.61 por ciento; Guanajuato, 3.06 por ciento; Querétaro, 3.03 por ciento; Sonora, 2.66 por ciento; San Luis Potosí, 2.16 por ciento; Estado de México, 2.09 por ciento; y Puebla, 1.97 por ciento.
Desplome económico que desatarían los aranceles de EU a México
La economía del país sufrirá una caída este año y el próximo, advirtió la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
- El presidente nacional de Coparmex, Juan José Sierra Álvarez, señaló que la imposición arancelaria podría generar efectos negativos en la economía del país, lo que se traduciría en pérdida de empleos, especialmente en un contexto de desaceleración económica que comenzó en 2024.
“Crecimos un 2.3 % en el Producto Interno Bruto (PIB) en 2023, pero en 2024 el crecimiento fue de solo 1.2 %. La estimación para este año es que el avance sea apenas del 0.6 %, según la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico)”, señaló el líder empresarial, quien visitó Tampico para la toma de protesta de la mesa directiva 2025-2027, presidida por Ketzalli Rodríguez Rodríguez.
- Resaltó que, en caso de aplicarse los aranceles a México, habría un impacto significativo en el desarrollo económico, lo que implicaría un decrecimiento del -1.3 % en 2025 y del -0.6 % en 2026.
“Rechazamos las amenazas de aranceles. Creemos que son decisiones unilaterales que rompen el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), uno de los acuerdos comerciales más importantes del mundo, con reglas claras y mecanismos de resolución de controversias que benefician a los tres países”, señaló Sierra Álvarez.
El empresario propuso diversificar los mercados y fortalecer el consumo interno en México ante un posible escenario de aranceles.
“El turismo representa el 8.6 % del PIB. En muchos países, se implementan estrategias para que esta industria sea su principal fuente de ingresos. En México, necesitamos una política pública y una estrategia de promoción turística; no podemos darnos el lujo de esperar seis años más sin promoción del sector”.
- Desde Coparmex, ya han contemplado un escenario en el que los aranceles sean una realidad, por lo que México debe actuar apostando por el mercado interno y diversificando sus socios comerciales.
“Debemos revisar los Tratados de Libre Comercio con otros países y evaluar cuáles han sido más efectivos en atraer inversión extranjera directa (IED). Sin embargo, lo más importante es fortalecer el mercado interno, que es hasta diez veces mayor que los capitales extranjeros que ingresan al país”, concluyó Sierra Álvarez.
Estos estados de la República son vulnerables
Doce de los 32 estados de México tienen una alta exposición a la aplicación de aranceles debido al efecto que generará en las industrias que dominan su producción local, advirtió la calificadora Standard and Poor’s (S&P).
Querétaro, Aguascalientes, Guanajuato y Nuevo León –que califica S&P–, así como Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí y Querétaro obtienen más de 20 por ciento de su producto interno bruto (PIB) de industrias vulnerables a la posible aplicación de aranceles.
- En un análisis, Fernanda Nieto, Karla González y Patricio E. Vimberg, especialistas de la firma, explicaron que las entidades podrían ser vulnerables a pérdidas económicas y financieras, así como a presiones sobre su calificación crediticia con la imposición de aranceles de 25 por ciento a las mercancías que México envíe a Estados Unidos.
- Los estados mexicanos que dependen de la manufactura orientada a la exportación, que generalmente se encuentran en las regiones norte y centro del país, parecen ser los más vulnerables a un impacto económico directo.
- Jalisco, Hidalgo, el estado de México, Morelos, Tlaxcala, Puebla y Oaxaca tienen exposición moderada, porque entre 10 y 20 por ciento de su PIB lo generan industrias vulnerables al arancel, mientras el resto de país, incluso la Ciudad de México, tienen una exposición baja, ya que es menor a 10 por ciento.
Daños a largo plazo
Los analistas de S&P destacaron que si el arancel general entra en vigor y permanece meses o trimestres –y no por semanas– podría tener un impacto significativo en la economía mexicana.
- Además, existe el potencial de un crecimiento económico más débil a nivel nacional, lo que podría derivar indirectamente en menores transferencias federales a los gobiernos locales. Esto podría erosionar el desempeño presupuestal y la posición de liquidez de todo el sistema subnacional.
- Comentaron que México verá efectos económicos significativos con la aplicación de aranceles, ya que aproximadamente 80 por ciento de sus exportaciones van a Estados Unidos y alrededor de 40 por ciento son por la fabricación de automóviles.
- Los sectores en México que estarían más expuestos a este choque serían el de transporte (que incluye máquinas y equipos, vehículos automotores y semirremolques), así como eléctrico y metales básicos (que incluye acero y aluminio).
A su vez, S&P estimó que la posible disminución directa de la producción de un sector determinado debido a una pérdida de demanda provocada por los aranceles es de 8 a 15 por ciento.
Los factores mitigantes que podrían limitar la disminución real en la producción incluyen un tipo de cambio más débil y la voluntad por parte de los productores para absorber costos más altos.
Impacto en México por los aranceles al acero y al aluminio
Ildefonso Guajardo ―secretario de Economía de México en el gobierno de Enrique Peña Nieto y negociador del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC)― explicó que el impacto en el país variaría según la respuesta del gobierno de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum.
- Guajardo dijo a CNN en Español que, si el gobierno de Sheinbaum decide responder con aranceles al acero similares, México se vería afectado porque el país importa más acero del que exporta a Estados Unidos.
- En otras palabras, México le compra más acero a Estados Unidos del que le vende.
- Por lo tanto, si impone aranceles a las importaciones de acero, algunas industrias mexicanas —como la automotriz— saldrán afectadas por los aumentos de costos causados por los impuestos arancelarios.
“(El acero) es fundamental porque es un bien que se usa en las cadenas productivas. Por eso tampoco es recomendable contestar con (aranceles al) acero… (porque) usas acero para hacer enseres domésticos que exportas, usas acero para hacer automóviles en caso de aceros laminados. Hay usos de acero en las cadenas de producción”, dijo el exfuncionario.
Sheinbaum dijo, horas después de que entraran en vigor los aranceles estadounidenses al acero y aluminio, que el país esperará al 2 de abril para decidir si impone aranceles recíprocos en estos materiales.
- Si México contesta con aranceles recíprocos a las importaciones de acero, “encareces tus cadenas de valor, te vuelves menos competitivo”, comentó Guajardo, y añadió: “Al poner aranceles generalizados al acero de importación, das margen para que aumenten los aceros que se utilizan en la construcción” nacional.
- Por ende, en lugar de aranceles recíprocos, Guajardo recomendó que se implemente una respuesta arancelaria con algún producto que no represente una amenaza a la economía de México.
- Edmundo Enciso Villarreal, presidente de las comisiones de Nearshoring y Comercio Exterior de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en la Ciudad de México, indicó en un comunicado enviado a CNN que, con los aranceles de EE.UU, al acero, las industrias mexicanas más afectadas serían la automotriz y de autopartes, la de construcción, la de electrodomésticos, entre otras.
“La industria automotriz y de autopartes, que ha sido un pilar fundamental en la relación comercial entre México y Estados Unidos, sufriría un aumento en sus costos, lo que pondría en riesgo la competitividad de la región frente a otros mercados.
La construcción también se vería golpeada, ya que el encarecimiento del acero y el aluminio podría ralentizar proyectos de infraestructura y elevar los costos de vivienda.
De manera similar, industrias como la de electrodomésticos, manufactura en general, energía y transporte enfrentarían desafíos al incrementar el costo de insumos clave”, explicó Enciso Villarreal.
Una balanza comercial favorable a Estados Unidos
Ebrard dijo en febrero que los aranceles de 25% anunciados por Trump a las importaciones estadounidenses de acero y aluminio son “un balazo en el pie a ambos países”.
El funcionario subrayó que México importa más acero desde Estados Unidos y que la balanza comercial es favorable para ese país. “Nosotros importamos más de lo que exportamos”, aseguró el también excanciller.
- De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero), la balanza comercial del acero favoreció a Estados Unidos respecto a México en 2,4 millones de toneladas y un valor superior a US$ 4.000 millones en 2024.
- Por esta razón, Ebrard enfatizó que los aranceles anunciados el 10 de febrero por el gobierno de Trump no son lógicos para México.
- “Si tenemos nosotros más importaciones de Estados Unidos de acero y aluminio, pues no es lógico con lo que está argumentando (la administración de Trump) como razón para poner tarifas”, dijo el secretario en ese momento.
¿Mayores afectaciones para EE.UU. o para México?
Aunque México compra a EE.UU. más acero que el que le vende, el país figura como el tercer exportador de este material a Estados Unidos.
- Los aranceles al acero y aluminio de Trump que entraron en vigor el miércoles afectarían de mayor manera a EE.UU., ya que industrias clave o consumidores terminarían absorbiendo costo de los aranceles a las importaciones de acero del gobierno de Trump.
- Los nuevos aranceles al acero y al aluminio no conceden ninguna excepción, según lo anunciado. Sin exenciones, los estadounidenses se verán obligados a pagar facturas más elevadas por los productos en los que al final recaería el arancel.
De acuerdo con Justin Weidner, economista de Deutsche Bank, por ahora es imposible predecir con exactitud el importe de la factura y quién se llevará la peor parte.
- Si los estadounidenses no pueden cambiar a alternativas más baratas, probablemente acabarán pagando el costo de los aranceles, dijo. También depende de si las distintas empresas a lo largo de la cadena de suministro pueden absorber por sí mismas alguno de esos costos.
- Las empresas estadounidenses no siempre dicen de dónde proceden todas sus materias primas o piezas, por lo que es difícil decir qué podría encarecerse con eventuales aranceles recíprocos, comentó Patrick Penfield, profesor de gestión de cadena de suministro en la Universidad Syracuse.
Podría pensarse que unos aranceles más altos empujarían a las empresas a buscar proveedores más baratos, pero no es tan sencillo.
“No se puede cerrar y abrir un proveedor sin más”, afirmó Penfield. Por ejemplo, podría haber contratos en juego o las cadenas de suministro podrían depender de ubicaciones o proveedores específicos. /PUNTOporPUNTO
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