POBREZA LABORAL afecta a millones; SALARIOS raquíticos y JORNADAS fuera de la LEY azota 15 ESTADOS de MÉXICO

La pobreza laboral aumentó en Jalisco, Nuevo León y otra decena de estados a partir de la pandemia de Covid-19, debido a la escasez de inversiones, la informalidad y la inseguridad, coincidieron expertos.

La explotación laboral en México –medida a través de salarios muy bajos o de hambre y jornadas de trabajo excesivas, fuera de la ley– golpean con fuerza a la mitad de los estados del país.

  • El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que, al menos 15 entidades federativas están afectadas por tales condiciones, con tasas de hasta 49% de personas que laboran “condiciones críticas”.
  • Reportó que, a nivel nacional, 31 de cada 100 trabajadores mexicanos padecen dicho problema: reciben un ingreso muy bajo, que no les permita cubrir satisfactoriamente sus necesidades básicas de alimentación y servicios.

Señaló que este grupo –equivalente a 31.1% de la población ocupada– cubre jornadas laborales que sobrepasan el límite de 48 horas a la semana, que establece la Ley Federal del Trabajo (LFT).

El instituto precisó que la población ocupada alcanzó casi 59.5 millones personas; de las cuales, 18.5 millones enfrenta “condiciones críticas de ocupación”, escenario que –para muchos mexicanos– es sinónimo de salarios de hambre, precariedad y explotación.

Estados con más explotación laboral

A través de la Encuesta Nacional de Empleo (ENOE), correspondiente al cuarto trimestre de 2024, el Inegi destacó que Chiapas se coronó como el estado con la tasa más alta de condiciones críticas de ocupación, con 49% de trabajadores afectados.

  • Señaló que Tlaxcala conquistó el segundo lugar del ranking, con 42.7% de las personas ocupadas con salarios que, con muchas dificultades, llegan a uno o máximo dos salarios mínimos.
  • Refirió que el Estado de México y Puebla destacaron en el tercera y cuarta posición, con niveles de 39.9% y 39.8% de precariedad laboral, respectivamente, al cierre del año pasado.

Mientras que Tamaulipas y Veracruz completaron el top 6 de estados con la mayor proporción de personas sufren condiciones críticas de trabajo, con tasas de 39.5% y 38.5%, en cada caso.

  • En contraste, destacó el instituto, Jalisco se ubicó como la entidad federativa con el menor nivel precarización laboral, con una proporción de 17.7%; seguido de Baja California Sur y Nuevo León, con 18.3%.

Además de Sinaloa, Aguascalientes y Colima, cuyo mercado laboral registró tasas de 19.9%, 21.7% y 21.8% de personas en situación crítica de ocupación, respectivamente, que se ubican más de 10 puntos por debajo del promedio nacional de 31.1%.

Urge una segunda chamba

Los resultados de la ENOE también arrojaron que el número de mexicanos que requieren una segunda chamba, para completar la quincena y mejorar su calidad de vida, se disparó durante el último año.

  • El documento detalló que la población subocupada del país, donde se contabiliza a dicho sector laboral, creció de 7.8% a 8.2% de las mujeres y hombres que desarrollan una actividad productiva.
  • Con ello, el número de individuos que necesita y busca una segunda o tercera chamba creció a 4.9 millones, 245 mil mujeres y hombres más que el cuarto trimestre de 2023.
  • La ENOE arrojó que Oaxaca terminó el año pasado como la entidad federativa con el registro más alto población subocupada, con una cifra récord de 17.3% de las personas ocupadas.

Confirmó que, detrás se colocó el estado de Tabasco, (17.2%), Tlaxcala (13.8%), Michoacán (13.4%), Tamaulipas (12.3%), Guanajuato (12.1%), Hidalgo (11.7%) y Sinaloa (11%).

¿Cómo está el desempleo en México?

El INEGI señaló que los estados de país con las tasas más altas de desocupación, al cierre de 2024, fueron:

  • Tabasco: 4.1%
  • Ciudad de México:  4.0 %
  • Coahuila: 3.5%
  • San Luis Potosí: 3.2%
  • Durango: 3.1%

¿Y los estados con menos desempleo?

El instituto refirió que las entidades con menores tasas de desocupación fueron:

  • Guerrero: 1.3%
  • Michoacán: 1.5%
  • Yucatán: 1.6%
  • Hidalgo: 1.8%
  • Baja California Sur: 1.9%
  • Campeche: 1.9%
  • Oaxaca: 1.9%

Pobreza laboral repuntó a 35.4% en el cierre del 2024

Un poco más de 46 millones de personas en México no logran cubrir sus necesidades básicas con los ingresos provenientes del trabajo de los integrantes de su hogar, revelan datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

  • El organismo difundió este miércoles el informe sobre el Índice de la Tendencia Laboral de la Pobreza, en el que destaca que la pobreza laboral, es decir, la población con ingresos inferiores a la canasta alimentaria, tuvo un aumento de 0.3 puntos porcentuales en el cuarto trimestre del 2024 respecto del periodo julio-septiembre, al pasar de 35.1 a 35.4 por ciento.

En línea con el estancamiento que tuvo el mercado laboral en 2024, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), la pobreza por ingresos provenientes del trabajo cerró el año con un deterioro después de haber tocado un mínimo de 35.0% en el segundo trimestre del año, su mejor nivel en 17 años.

  • Junto con el avance de este indicador, el Coneval destacó también que el ingreso laboral per cápita tuvo una reducción trimestral de 1.5%, y pasó de 3,346 a 3,295 pesos mensuales. En todos los quintiles se observó una reducción, aunque el mayor impacto se registró entre la población con menores percepciones.

“Entre el tercer y cuarto trimestre de 2024, el porcentaje de la población con ingreso laboral inferior al valor monetario de la canasta alimentaria (pobreza laboral) a nivel nacional mostró un aumento trimestral de alrededor de 0.3 puntos porcentuales, al pasar de 35.1 a 35.4 por ciento.

“El aumento trimestral de la pobreza laboral se dio a la par de una disminución de 40,700 personas ocupadas, además de una disminución del ingreso laboral real per cápita (1.5%) y un incremento del valor monetario de la canasta alimentaria en el ámbito urbano de 0.3%, mientras que el ámbito rural no se mostraron cambios”, destacó el organismo en un comunicado.

Baja en los ingresos de las personas ocupadas

En promedio, el 2024 cerró con un ingreso promedio para la población ocupada de 7,363 pesos mensuales, lo que implica una disminución trimestral de 0.5 por ciento. En el caso de los hombres, la percepción promedio fue de 8,026 pesos; para las mujeres, de 6,432 pesos.

  • En el caso de quienes laboran en la formalidad, el ingreso promedio fue de 10,349 pesos mensuales, una disminución trimestral de 2.2%; quienes tienen una ocupación informal, de 5,146 pesos por mes, un avance de 2.5% respecto del periodo anterior.
  • A nivel estatal, la pobreza laboral aumentó en 20 de las 32 entidades federativas entre el tercer y el cuatro trimestre del año. Las de mayores incrementos fueron Veracruz (5.2 puntos), Morelos (3.3 puntos) y San Luis Potosí (3.1 puntos). En contraste, las que más redujeron su población en esta condición fueron Michoacán (3.4 puntos), Baja California Sur (2.9 puntos) y Sonora (2.7 puntos).

Cabe destacar que en medio del impacto de la emergencia sanitaria por la pandemia por Covid-19 en el país, este indicador registró sus máximos históricos al abarcar al 46% de la población general.

Pandemia elevó las carencias laborales

La pobreza laboral aumentó en Jalisco, Nuevo León y otra decena de estados a partir de la pandemia de Covid-19, debido a la escasez de inversiones, la informalidad y la inseguridad, coincidieron expertos.

A escala nacional, 35.4% de los mexicanos vivían a finales del año pasado en una situación en la que sus ingresos laborales son insuficientes al momento de adquirir la canasta alimentaria para toda su familia.

  • La pobreza laboral creció en 12 de las 32 entidades federativas durante los últimos cinco años, de acuerdo con la información más reciente del Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (Coneval), organismo en proceso de extinción.
  • La coordinadora de Análisis de Datos de México, ¿Cómo Vamos?, Adriana García, dijo que la pandemia provocó la contracción más grande que se tenga registrada de la economía nacional, la cual tuvo serias repercusiones en los ingresos de las familias y su calidad de vida, cuyos rezagos aún persisten.

Destaca Aguascalientes, donde los trabajadores en esta situación aumentaron de 30.6% a 35.9%.

El coordinador del Centro de Investigación en Economía y Negocios (CIEN) del Tecnológico de Monterrey, Héctor Magaña, relaciona la situación de Aguascalientes con el freno de nuevas inversiones a partir de la pandemia, sobre todo en la industria automotriz.

Las carencias laborales en Guanajuato aumentaron de 33.3% a 37.1% desde la crisis sanitaria, lo que responde también a la falta de inversiones, pero con la agravante adicional de la violencia que ejercen los grupos criminales en la entidad, lo que ha limitado la recuperación económica de los hogares, comentó el académico en entrevista con El Gran Diario de México.

Veracruz, el cuarto estado más poblado en el país, pasó de 49.6% a 51.9%, mientras que Oaxaca también sobresale por liderar la pobreza laboral a escala nacional, cuya tasa se elevó de 58.7% a 60.1%.

Principales obstáculos

En opinión de Héctor Magaña, hay varios factores en común que pueden explicar el rezago en estas entidades.

En primer lugar está la alta informalidad laboral, ya que estados como Oaxaca y Guerrero presentan tasas superiores a 70%, es decir, los empleos que se crean carecen de prestaciones y estabilidad.

  • Desde su punto de vista, algunas entidades rezagadas están sujetas en gran medida a actividades informales o vulnerables a la crisis, como la agricultura de subsistencia o el comercio, cuya dependencia limita la generación de empleos formales bien remunerados y se perpetúa la pobreza laboral.
  • Otro elemento, explicó, es el rezago educativo que influye directamente en las oportunidades laborales y en la calidad de empleos. Por ejemplo, entidades como Chiapas, Guerrero y Oaxaca registran porcentajes elevados de población sin educación básica completa, lo que impide el acceso a empleos formales bien remunerados.

Magaña enfatizó en el impacto desigual de la pandemia, por lo que la recuperación ha sido más lenta en regiones con economías menos diversificadas.

Destacó las desigualdades regionales y la falta de infraestructura, así como la disparidad en el desarrollo entre las zonas, que limita las oportunidades de empleo de calidad en ciertas áreas.

“La falta de inversión industrial en estados del sureste contribuye a la persistencia de la pobreza laboral”, expuso el investigador.

Entidades industrializadas

La mayoría de las entidades rezagadas se caracterizan por tener altos niveles de carencias desde hace tiempo, pero destaca que estados industrializados como Jalisco y Nuevo León también sufren más pobreza laboral que antes del Covid-19.

Esto tiene que ver con una disminución del ingreso laboral per cápita al quitar la inflación, de acuerdo con Magaña.

La pobreza laboral puede incrementarse en 2025 dependiendo de las decisiones que se tomen en materia, de lo cual dependerá la producción económica nacional, estimó.

“Ya vimos que la persistencia de la pobreza laboral en México es el resultado de la combinación de varios factores entre los que destaca la alta informalidad. Por lo que abordar estos desafíos requerirá de políticas públicas integrales que promuevan la formalización del empleo, mejoren la educación y fortalezcan la infraestructura, diversificando la economía en las regiones más afectadas”, finalizó el académico del Tec de Monterrey./Agencias-PUNTOporPUNTO

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