RITA MAGAÑA TORRES
El gabinete de seguridad reconoció ante la Comisión Bicameral de Seguridad Nacional fallas en controles penitenciarios, los cuales facilitaron la fuga de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, del penal de El Altiplano, el 11 de julio pasado.
Por ello, el presidente de la Comisión Permanente, el perredista Miguel Barbosa, insistió en que el presidente Enrique Peña Nieto debe tomar decisiones inmediatas para cuidar al Estado, porque “no puede ser que sea el gran amigo, de sus amigos en las decisiones de Estado”.
En entrevista, el líder de los senadores del PRD señaló que el hecho de la fuga de Joaquín Guzmán, será el estigma del gobierno y así quedará, por lo que tiene que haber un rediseño completo de la estrategia contra el crimen en México.
Por su parte, el secretario de la Comisión Bicameral de Seguridad Nacional, Fernando Yunes, declaró que en la comparecencia de los titulares de la Secretaría de Gobernación, la Procuraduría General de la República, la Comisión Nacional de Seguridad y la Dirección del Centro de Investigación y Seguridad Nacional quedaron dudas.
El senador del PAN señaló que principalmente no quedan claro las personas que serán procesadas por la Procuraduría General de la República.
Sin embargo, resaltó que los funcionarios federales en un ejercicio de autocrítica, aceptaron las deficiencias en los protocolos de seguridad, que posibilitaron la evasión del otrora líder del Cártel de Sinaloa.
Expresó que notó una actitud sincera, de que lógicamente los protocolos de seguridad no funcionaron, “tan es así que la persona pudo escapar”.
Incluso, agregó que probablemente haya habido personal del propio centro, o de niveles superiores, coludidos y se tiene que investigar a todos, a fin de cuentas yo si note por parte del gobierno, una actitud autocrítica al respecto.Rec
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