AGENCIAS
La dirigencia nacional del PRI demandó a las autoridades realizar una pronta y eficaz investigación de los actos de violencia de los que fue objeto su sede estatal en Oaxaca.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) expresó en un comunicado su más enérgica condena a los actos de violencia, vandalismo y allanamiento que también sufrieron las oficinas del senador Eviel Pérez Magaña y del diputado Samuel Gurrión.
El instituto político demandó investigar estos hechos delictivos, a efecto de deslindar responsabilidades y sancionar a quienes resulten responsables.
“Exigimos respeto a las personas y a los bienes de esta organización partidaria. La fuerza y la violencia anulan la política y atentan contra el Estado de derecho”, señaló.
Subrayó que aun las demandas y planteamientos respetables pierden legitimidad si se hacen valer transgrediendo los derechos de las personas físicas o morales, y afectando el orden público y la armonía social, propios de un Estado democrático.
“Oaxaca y todo México merecemos mejores condiciones de vida, y un sistema educativo que promueva la dignidad de las personas, propicie la convivencia fraterna y la observancia de la ley, como condición para la justicia y la paz”, agregó.
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