Durante su intervención en la XXXIX Sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública, habló del caso de una niña de 12 años, quien dijo que a su edad ya había consumido mariguana y tachas (drogas sintéticas). La hierba se la dio uno de sus primos y la otra sustancia la conseguía con uno de sus compañeros en la secundaria donde estudia.
Adelina Lobo Serrano dijo que hablaría de un tema que ha sido polémico en los últimos meses, como lo ha sido la regulación del consumo de sustancias como la mariguana, y señaló la necesidad de modificar los actuales esquemas para controlar el consumo de enervantes.
Indicó que en México “se pueden encontrar metanfetaminas con valor de 20 pesos” y sostuvo que por ello los niños adolescentes tienen acceso a las drogas y se debe discutir la política que se está siguiendo en ese sentido.
Señaló que en los últimos diez años la guerra contra las drogas ha sido “una guerra en la cual todos hemos perdido porque se ha desacreditado a las instituciones de seguridad», y funcionarios corporaciones policiacas de procuración de justicia se han visto involucrados actores de esas actividades.
Aseguró ante gobernadores, procuradores y miembros de grupos de la sociedad civil que “hemos perdido porque todos los días ingresan jóvenes, mujeres, hombres y adolescentes a los centros penitenciarios, principalmente por la venta de sustancias y mariguana”.
Puntualizó que se perdido en esta guerra “porque no hemos sido capaces de darle las oportunidades que les está dando el crimen organizado”.
Señaló que la venta al menudeo de sustancia ilegales es la principal fuentes de ingresos de los gripes criminales y que el mercado ilegal de la droga provoca debilitamiento de las instituciones, reducción de la inversión ilícita y contracción del a economía, por lo cual, dijo, “la política prohibicionista no está funcionando
Ante ese panorama, la invitada al CNSP pidió que se pongan mecanismos legales que protejan a los menores de este flagelo, y sostuvo que es “necesario transitar a una política de drogas que no solo contemple la liberación de la mariguana”.
Puntualizó que el tema “se debe abordar de manera científica, con perspectiva global y liderazgo en la región. Hago un llamado para redefinir la política de acciones para transitar del modelo prohibicionista hacia uno de regulación”.
Asimismo, pidió que la Secretaría de Salud lleve a cabo un esquema de seguimiento epidemiológico del consumo de tabaco y alcohol.