Pemex pierde por «ordeña» más de 72 mil 400 millones de pesos

RITA MAGAÑA TORRES

Petróleos Mexicanos (Pemex) informó a la Comisión Permanente del Congreso que entre 2011 a agosto de 2014 se perdieron un estimado de 72 mil 400 millones de pesos por la “ordeña” de ductos y extracción ilícita de combustibles.

Según los datos de Petróleos Mexicanos en 2000, se detectaron 155 tomas clandestinas, que hasta julio de 2014, se incrementaron a mil 963.

Diputados y senadores precisaron que el daño patrimonial estimado en 2011 fue de 23 mil 900 millones de pesos; en 2012, 33 mil 200 millones de pesos y de septiembre de 2013 a agosto de 2014, representó aproximadamente 15 mil 300 millones de pesos.

Mencionan que la “ordeña” de ductos y extracción ilegal de gasolinas representa un riesgo para la población, sobre todo la que habita en zonas aledañas, a lo que se suma el daño al medio ambiente, por las fugas que se ocasionan la apertura de los ductos.

Mencionaron que en Nuevo León se concentra más de la mitad de este ilícitos detectado por la Procuraduría General de la República (PGR).

Indicaron que información de 2006 a agosto de 2014, se registraron 892 sustracciones ilegales en los ductos de la refinería “Héctor Lara Sosa”, ubicada en Cadereyta.

Por eso, pidieron al gobierno de la entidad, a la Secretaría de Energía, a las comisiones Nacional de Hidrocarburos y Reguladora de Energía, la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos evitar la falta de abastecimiento de gasolina en diversos municipios del estado.

También, solicitaron entregar en un plazo no mayor a 15 días, un informe sobre los efectos negativos, afectaciones y repercusiones que representan para esa refinería, la existencia de la toma clandestina para la extracción ilegal de combustible.

Los principales puntos para la extracción ilegal de combustibles de la refinería de Cadereyta, se localizan en la región norte, en los poliductos Ciudad Juárez-Chihuahua y Cadereyta-Gómez Palacio-Chihuahua, así como en los de Madero-Cadereyta y Brownsville-Cadereyta, situación que afecta el suministro en zonas metropolitanas de Chihuahua y Monterrey.

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