Redacción
Este domingo fue asesinado a tiros Elidio Ramos Zárate, reportero del periódico regional El Sur, mientras cubría las protestas de maestros contra la reforma educativa en el municipio de Juchitán de Zaragoza, en la región del Istmo de Tehuantepec.
De acuerdo con algunas versiones de los mismos reporteros locales, el mismo domingo, Ramos Zárate, que cubría la manifestación magisterial, recibió amenazas por publicar imágenes de saqueos a tiendas y centros comerciales.
El escritor y periodista Héctor de Mauleón informó que Ramos dio aviso de dicho acosos a la dirección del medio para el que trabajaba minutos antes de recibir varios.
En dichas amenazas, se le exigió marcharse del lugar de los disturbios, pero antes de que tomara una decisión fue atacado a tiros por varios individuos desconocidos. En el mismo hecho también fue asesinado el hermano del director del periódico Hechos, también de Juchitán, y otra persona fue herida.
Los reporteros manifestaron que han sido agredidos tanto por parte de los maestros, y los llamados grupos de choque y encapuchados, así como por parte de la Policía Federal.
La CNTE obliga a los reporteros a no tomar imágenes en las que puedan ser identificados, y a pesar de cumplir con estas reglas impuestas se han dado varias ocasiones en las que han quitado el equipo a los reporteros gráficos.
Mientras que la Policía Federal despojo de su teléfono celular a un reportero que grabó cómo los uniformados utilizaban armas de fuego en los graves altercados que dejaron al menos seis muertos en la localidad de Nochixtlán, Oaxaca.
Por lo anterior la organización Artículo 19 inicio el seguimiento dichos acontecimientos y emitió alertas a través de su cuenta de Twitter, de las violaciones cometidas contra los periodistas que se encontraban ejerciendo su labor.
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