Redacción
Familiares de Norma Alicia Escalante, de 42 años de edad, denunciaron que médicos del Hospital General de Zona número 5 del Instituto Mexicano del Seguro Social IMSS, en Nogales, Sonora, perforaron por error el intestino grueso de la mujer durante una cirugía para extraerle la matriz, el pasado 12 de febrero.
María Teresa Mercado Hernández, madre de Norma explicó que el daño ocasionó que la mujer sufriera de fuertes dolores y de una severa hinchazón corporal, debido a que el cuerpo no desechaba fluidos, y, cuando agravó, llegó a obrar por la vagina.
María de los Ángeles Herrera, media hermana de la víctima, también contó que al ver que la salud de Norma empeoraba se le programó una cirugía de emergencia en la misma clínica donde la intervinieron por primera vez, pero cuando estaba en el quirófano los cirujanos cancelaron la operación bajo el argumento de que el procedimiento no tenía prioridad.
Los días pasaron y el personal de la clínica no le reprogramó la intervención, en vez de eso le entregaron una orden para que fuera atendida en el Hospital General de Zona número 2 del IMSS, en Hermosillo, al que arribó en pésimas condiciones de salud, y en donde también le negaron el servicio, porque, dijeron los especialistas, la paciente “estaba muy infectada y esta condición contaminaría el quirófano”.
Asimismo exigieron a los familiares que se llevaran a la enferma de inmediato, porque ya estaba desahuciada y la clínica no se haría responsable de atender a una mujer en esas condiciones.
La madre de la víctima también denunció que, pese a que la salud de su hija imermó rápidamente, los médicos que la atendieron nunca le informaron el tipo de lesión que le habían causado en la cirugía, ni tampoco les ayudaron a resarcir el daño. Motivo por el cual la señora Teresa exige justicia, y que el caso de Norma no quede impune.
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