Todos los países del mundo han resentido el impacto económico del coronavirus (Covid-19) y México no ha sido la excepción. En pocos días, las calificadoras de riesgo S&P, HR Ratings y Fitch Ratings bajaron la nota soberana del país acercándola más a un nivel especulativo muy alto o llamado rango «basura».
- Por el momento, Gabriela Siller, directora de análisis económico-financiero de Banco Base y Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero Ve por Más (BX+) descartaron que México pierda el grado de inversión este año.
- Sin embargo, si no se toman las medidas adecuadas para salir de la crisis económica, en el mediano plazo la calificación del país podría caer en grado basura acelerando la salida de capitales, pues, por regla, algunos fondos de inversión no pueden comprar deuda de entidades/países que estén en esa categoría.
El grado de inversión es un término utilizado para referirse a emisores y emisiones con niveles relativamente elevados de solvencia y calidad crediticia, explica S&P.
“Desafortunadamente se espera un recorte de la calificación crediticia de la deuda soberana con Moody’s”, señaló Siller.
¿México puede perder el grado de inversión?
Hasta ahora la nota soberana de México mantiene el grado de inversión en S&P, Fitch Ratings y Moody’s.
“Las calificadoras han estado dando los mismos riesgos que presentaron las finanzas públicas desde hace un año. Por un lado les preocupa el bajo crecimiento actual, y esperado. Por otro lado, que Pemex pudiera necesitar más apoyos por parte del gobierno federal”, expuso Alejandro Saldaña.
Ambos especialistas coinciden en apuntar que, por lo menos en 2020 México no perderá el grado de inversión.
“Por el momento se ve legano el tema que nos bajen la calificación debajo el grado de inversión, pero si no mejoran las condiciones en los próximos años esto podría ser un riesgo. Por el momento no lo vemos así, pero no lo descartamos para los próximos años”, aseguró el economista de BX+.
- El panorama no es igual para Pemex. Fitch ya tiene a la petrolera en zona de bonos basura (especulación), lo que podría convertirse en un riesgo para la calificación soberana del país.
- “Si dos agencias calificadoras colocan la deuda de una entidad en grado especulativo, por regulación algunos fondos de inversión tendrían que vender la deuda de Pemex. Moody’s podría recortarla a la baja, dejándola en grado especulativo y que esto ocasione una venta masiva de los bonos de Pemex y, obviamente, mayores salidas de capitales del país”, anticipó Gabriela Siller.
El grado especulativo se refiere a los instrumentos de deuda en los que el emisor tiene la capacidad de pagar, pero enfrenta incertidumbres importantes tales como circunstancias financieras o empresariales adversas que podrían afectar su riesgo crediticio, precisa S&P.
¿Qué pasaría si se pierde el grado de inversión?
Si México pierde el grado de inversión, junto con la salida de capitales se vendría un encarecimiento en caso de que el gobierno quisiera salir a buscar financiamiento en el extranjero. Habría una depreciación del peso frente al dólar y un encarecimiento en los productos de importación.
- Si México quisiera hacer frente a la salida de capitales y a la presión en el tipo de cambio, podría subir la tasa de interés de referencia. “Esto generaría, por un lado que el tipo de cambio se presione y tenga efectos en la inflación –mercancías importadas- y esto afecte a los hogares mexicanos en términos de un mayor costo financiero en la economía”, señaló el economista en jefe de BX+.
“Veríamos una mayor salida de capitales. Hasta ahorita ha salido el 9% (2,000 millones de pesos) de valores gubernamentales en manos de extranjeros. Creo que esto se puede ir, fácil, al 17 o 20%. Puede darse presión hacia arriba en la inflación, que, por la holgura la inflación podría terminar a la baja. Esto hace que haya productos que no se posible comprarlos porque baja el poder adquisitivo de los consumidores”, agregó Siller.
Los bonos M, son bonos de desarrollo del gobierno federal, con tasa de interés fija. Se emiten a 3, 5, 10, 20 y 30 años, de acuerdo a un calendario publicado por la SHCP periódicamente.
¿Qué hacer para mantener el grado de inversión?
México debe aplicar una política fiscal expansiva (contracíclica) y mantener la disciplina en las finanzas públicas.
- ¿Cómo lograrlo? “Invertir en el corto plazo para poder obtener mayores ingresos tributarios en el mediano y largo plazo”, expuso Gabriela Siller.
- “Lo que preocupa es qué tanto se puede regresar esta métrica a niveles de crisis. Para garantizar que haya un regreso en esta métrica es importante generar condiciones favorables para la inversión y condiciones que ayuden a una rápida y sostenible recuperación económica. Sería positivo utilizar los recursos que se tienen, e incluso aumentar ligeramente el endeudamiento –como porcentaje del PIB- dentro de lo que se pueda, considerando el espacio fiscal que se tiene, para estudiar ciertas estrategias para fomentar una rápida recuperación en la economía”, propuso Saldaña.
“Si no vemos esto, la economía se va a recuperar de una manera lenta y marginal”, añadió.
Recuperación de México sería más débil de lo esperado: BM
El Banco Mundial (BM) advirtió a México que la recuperación económica que estiman para el 2021 de 2.5% puede ser mucho más débil, “si no se elimina la incertidumbre persistente que tienen los inversionistas sobre las políticas públicas en sectores estratégicos como el de energía”.
“La incertidumbre en torno a la trayectoria de algunas políticas sectoriales, particularmente en el sector energético, desaceleró la inversión privada”, sostuvieron economistas del organismo.
- Al interior del análisis titulado “La economía en tiempos del Covid-19”, el organismo que preside David Malpass plantea que sin una estrategia interna de apoyo a las empresas, empleadores y trabajadores en el país, aumentará la pobreza en México.
- Los especialistas advierten que ahora, el motor de la recuperación para México está en la reactivación de Estados Unidos. “Una desaceleración más pronunciada de lo esperado en el crecimiento global y de Estados Unidos representa un riesgo significativo a la baja para la recuperación gradual de México y su estabilidad financiera”, refirieron.
En el documento, los economistas del BM explican que si México no consigue fortalecerse en el mercado doméstico, “la crisis económica se extenderá en el empleo, en los ingresos de los trabajadores formales y en quienes se ganan la vida en la informalidad”.
Sostienen que el deterioro de la capacidad de compra de la gente debilitará aún más a la economía, a través de un menor consumo, lo que sin duda puede dificultar la recuperación.
En el apartado para México, consignan que “los hogares pobres y vulnerables, así como los trabajadores en los sectores formal e informal, requerirán un sólido y contundente apoyo del sector público”.
Aseguran que las ayudas para garantizar liquidez en el sistema financiero y los apoyos para micro, pequeñas y medianas empresas son muy importantes.
Desplome con impacto fiscal
Los expertos del organismo resaltan que “la consolidación fiscal entre el 2017 y el 2019, permitió la estabilización de la deuda pública”.
- Destacaron que a pesar del estancamiento económico, tanto el crecimiento del ingreso laboral como la creación del empleo aumentaron en el 2019, lo que junto con las generosas transferencias sociales, ayudó a reducir la pobreza en el 2019.
- Anticipan que la prudencia fiscal se mantenga este año “a pesar de que se proyecta un deterioro del rendimiento de los ingresos en el 2020”.
“Se espera que los ingresos disminuyan, mientras que aumenta marginalmente el lado del gasto, a partir de que el gobierno priorizará atender las necesidades del sector salud y canalizar la asistencia social a los grupos vulnerables.
Aumento excepcional de la deuda
En el mismo análisis, los economistas del banco sostienen que el desplome de la economía motivará “un aumento excepcional en el déficit general del 2020, y en la deuda pública. Lo que también responderá a la depreciación del tipo de cambio”.
- Adicionalmente esperan una “contracción significativa” de 6%, es de anticiparse una caída en los componentes clave de la demanda agregada.
- Las exportaciones más lentas sólo se mitigarán en el 2020 mediante una compresión mucho más aguda de las importaciones.
- Una recuperación en el 2021 y el 2022 en México, enfatizaron, se basa en la suposición de un rápido repunte en la economía estadounidense.
El presidente del Banco Mundial, David Malpass, dictará una conferencia de prensa esta mañana, en el cierre de las reuniones virtuales de primavera./Agencias-PUNTOporPUNTO