MÉXICO lleva 43 meses consecutivos de INFLACIÓN FUERA de la META; a septiembre tiene acumulado de 4.58%

Durante el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador la inflación acumulada ha sido una de las más elevadas de los gobiernos recientes, un periodo en el que las presiones se avivaron tras la pandemia del COVID-19, y aunque se han suavizado, en meses recientes significaron un impacto al bolsillo de los mexicanos.

Tras la pandemia y con la guerra entre Rusia y Ucrania, las economías de todo el mundo sufrieron un aumento en los precios de alimentos y servicios. En la primera quincena de octubre, México llevaba 43 meses consecutivos con índices de inflación fuera de la meta de Banco de México (Banxico) que es de 3% con un rango de tolerancia de un punto porcentual al alza o a la baja. El contexto global y local ha impedido que la institución a cargo de Victoria Rodríguez Ceja cumpla con ese mandato.

  • El periodo inflacionario más largo de la historia contemporánea inició en abril de 2021, cuando apenas llegaban las vacunas para proteger a la población y la actividad de los comercios empezaba a normalizarse. En la primera quincena de octubre de este año, la inflación fue de 4.69%.

“Hemos tenido tres brotes inflacionarios del 2000 para acá. El primero fue a raíz del incremento de los precios de los commodities a nivel internacional, el segundo, por el famoso gasolinazo en enero de 2017, y el tercero, el actual, yo le llamo la inflación pandémica, pues surge de un fenómeno global que afectó a México y a todos los países del mundo, y todos hemos estado batallando el tratar de regresar la inflación a su nivel”, explicó Jonathan Heath, subgobernador de Banxico, durante una reunión con medios de comunicación e integrantes del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) a mediados de agosto.

Esteban Polidura, director de Inversiones para las Américas de Julius Baer, refiere que la elevada inflación “es un problema que es todavía global”, y no exclusivamente de México o de Banxico.

  • Apenas, la inflación anual en Estados Unidos cayó en agosto a 2.5%, la menor tasa desde febrero de 2021, refiere la Oficina de Estadísticas Laborales. Mientras que México desacelera su inflación a menor ritmo que países como Brasil, Chile y Perú, que cerraron junio con 4.2, 4.2 y 2.3%, respectivamente.
  • Hasta septiembre de este año, Brasil ha bajado su tasa de referencia 300 puntos; Chile, 625 puntos base, y Perú, cerca de 250; México la ha reducido 75 puntos, con respecto a los máximos alcanzados entre 2022 y 2023, refieren cifras de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y los bancos centrales.

“Todos los países estamos sufriendo por el mismo reto para poder mantener la inflación dentro de los rangos objetivo. Hay temas que están sorteando más países, como el cambio climático, que genera que los productos alimenticios sean más escasos y caros, pero algo que es particular de México es que tenemos factores internos, como el crimen organizado, que cobra derecho de piso, y ya tenemos a los limoneros sufriendo las consecuencias”, explica Víctor Manuel Herrera, presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del IMEF.

Las consecuencias del cambio climático

El alza de los productos agropecuarios afectados por el cambio climático es también cada vez más frecuente.

  • “A mediano plazo, el cambio climático es uno de los factores que han incidido en el ambiente de mayor incertidumbre. El aumento de las temperaturas se ha traducido en sequías, lo que afecta la producción de insumos muy importantes para los mexicanos, como el jitomate y la cebolla. Tenemos también lo que pasó con huracanes como Otis, que fue devastador e inesperado”, afirmó Galia Borja Gómez, subgobernadora de Banxico, en un encuentro en la UNAM.

La producción de hortalizas se ha visto afectada este año por la sequía y lluvia en exceso, explica Juan Carlos Anaya, director general de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA). El clima extremo está dejando menos cosechas y más importaciones desde otros países para atender la demanda.

  • “Tienes una presión sobre los alimentos desde el insumo: muchos vienen de otro país y hay que pagarlos en dólares. Y, obviamente, cuando lo haces bajo un peso más debilitado, cuesta más, como el trigo y el pan”, explica Polidura. Además, es necesario contemplar que México es el principal comprador de Estados Unidos de productos como carne de cerdo, pollo, maíz para alimentar ganado, y combustibles, refiere la Secretaría de Economía.

Dólar más caro

  • Con una moneda mexicana más fuerte, las importaciones de alimentos, combustibles y bienes de consumo se abaratan, lo cual ayuda a reducir las presiones inflacionarias. No obstante, los analistas consultados ven lejano que el peso vuelva a fortalecerse frente al dólar en lo que resta del año, luego del resultado de las elecciones del 2 de junio y el avance de las propuestas de reformas del presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, sumado a las turbulencias que se esperan derivadas de las elecciones en Estados Unidos.

Banxico considera el tipo de cambio como una de las principales variables de ajuste en una economía abierta, como la mexicana. “Ante la ocurrencia de choques tanto internos como externos, los movimientos en el tipo de cambio inducen cambios en los precios relativos de los bienes y servicios comerciables respecto a los no comerciables”, señala en su reporte del segundo trimestre.

El costo de la inseguridad

La inseguridad y el crimen organizado también son factores en la ecuación. Este año, el precio del limón ya tuvo incrementos por los paros de productores como protesta por el cobro de derecho de piso, comenta Anaya, del GCMA.

  • “A principios de julio, llegué a la Central [de Abastos] y el lugar donde usualmente se estacionan dos tráileres de limón estaba vacío. Prefirieron que el limón no se vendiera a pagar lo que les pedían”, cuenta un comerciante que pidió guardar el anonimato. “Antes les cobraban por camión, ahora tienen que pagar por caja”, agrega.
  • De acuerdo con el presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del IMEF, diario se realizan 50 robos con violencia al autotransporte en México. El monto acumulado por pérdidas era de 4,500 millones de dólares hace un año. “Son montos cada vez más grandes, si te pones a pensar quién paga esos 4,500 millones de dólares, los pagamos nosotros a través de mayores precios”, explica.

Más consumo

Otros factores locales presionan el alza de precios en el país, como la solidez de la fuerza laboral y el consumo, que ha crecido de manera sostenida en los últimos meses impulsado por la llegada de remesas al país, refieren los especialistas consultados.

  • Gabriel Casillas, jefe para América Latina de Barclays, explica que la masa salarial en el país ha tenido un crecimiento por encima de la inflación general. Este factor, más una baja tasa de desempleo, provoca que los consumidores hagan compras y no se cumpla la teoría económica de que ante un entorno de altas tasas, los precios bajen.
  • Del lado de los salarios, agrega Carlos Capistrán, economista en jefe de Bank of America en México, el aumento al salario mínimo ha provocado una “rigidez” para que la inflación en servicios aminore, pues las empresas y comercios trasladan el gasto de los salarios a los productos o servicios que ofertan.

Casillas destaca también el incremento en el consumo constante debido a las remesas que recibe el país, que ya representan cerca de 4% del producto interno bruto, cuando en 2017 era 2%.

La tarea de Banxico

Polidura sostiene que el banco central ha hecho lo posible para contener la inflación, pero factores externos e internos hacen ver que es poco efectivo en su mandato. “Ha hecho lo posible por contrarrestar la inflación con las tasas altas que ha tratado de mantener, pero, evidentemente, hay temas que Banco de México no puede influenciar ni controlar”, agrega.

En esta última ola inflacionaria, los conflictos geopolíticos, como el de Medio Oriente, empujaron los precios del petróleo, lo que se vio en el precio de los energéticos.

  • Capistrán no comparte la buena opinión sobre la labor de Banxico y destaca que, tras su decisión de bajar la tasa de interés de referencia a 10.75% desde 11% en agosto, existe un riesgo de que las expectativas de inflación se contaminen por culpa de los alimentos, que son volátiles en el precio.

Solución a medias

  • El gobierno lanzó en mayo de 2022 el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC). Aunque ayudó a contener precios, como los de los energéticos, desde agosto del año pasado, el Banco de México dejó de considerar este programa como una de las medidas que podría ayudar a contener la inflación.

Los descuentos a las cuotas por el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) ayudaron a aminorar el impacto en los combustibles, por el alza del crudo en 2022, pero en la mayor parte de este año no ha habido estímulos a la gasolina Premium y al diésel. Para la Magna ha sido mínimo, mientras que en las dos primeras semanas de septiembre no se ha registrado subsidio.

“Viene un inicio de sexenio difícil. Si llega a registrarse un descontrol [en el precio de los energéticos] por cuestiones geopolíticas que no permitan contener los precios o bajarlos, va a ser muy complicado que la canasta básica se pueda mantener asequible. En 2025 será difícil tener un ajuste salarial que mitigue precios tan altos”, advierte Ramsés Pech, analista de Energía y Economía de Caraiva y Asociados-León & Pech Architects.

¿La última esperanza?

  • Ante las variantes que están fuera de control del banco central, el menor dinamismo de la economía aparece como el factor que podrá bajar los precios. Banxico y el consenso de analistas esperan que la economía mexicana sufra una desaceleración este año. Las estimaciones apuntan a un crecimiento del 1.5% desde el 3.2% que se registró en 2023.

No obstante, Heath advierte que las presiones fuera del control del banco central, como el cambio climático y la inseguridad, serán “efectos cada vez más estructurales”.

  • “Yo creo que siempre vamos a estar viendo un efecto de este tipo a precios y cada vez va a ser mayor. Yo diría que podríamos hablar ya de efectos más estructurales y no simplemente coyunturales.
  • Cuando tenemos problemas de falta de seguridad y de extorsión, que se tienen que combatir, pero no hay nada del Banco de México, porque no le toca eso, simplemente tenemos que enfrentar ese problema, pero no podemos solucionarlo realmente”, explica el subgobernador.

Mientras tanto, en los mercados de Santa Fe y Escandón, jefas y jefes de familia rondan los pasillos y puestos en busca del kilo de jitomate y de limón menos caro. “Hablando de la canasta básica, con que esté estable el jitomate, el tomate y el chile, podemos decir que estamos a salvo”, dice Sari Romero, una de las comerciantes del mercado, mientras despacha a sus clientes.

Inflación se elevó en octubre

  • El incremento en los precios de productos agropecuarios hizo que, en octubre pasado, la inflación cambiara su rumbo y volviera a acelerarse, de acuerdo con la información divulgada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
  • En octubre, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró una variación de 0.55% respecto al mes de septiembre, mientras que a tasa anual la inflación a los consumidores se ubicó en 4.76 por ciento.
  • Con este dato, la inflación interrumpió los tres meses consecutivos de desaceleraciones que había reportado previamente, y continuó por arriba del rango objetivo del Banco de México (Banxico) de 3% +/-1 punto porcentual.

“El repunte de la inflación general no sorprende, ya que en lo que va del año el componente no subyacente ha experimentado severos choques de oferta, y era prematuro anticipar una tendencia bajista sostenida. En nuestro reporte de riesgos inflacionarios para el cuarto trimestre del 2024 y el 2025 habíamos señalado esta posibilidad, considerando la importante volatilidad que han exhibido los precios de frutas y verduras debido a las diversas afectaciones climáticas”, indicó un análisis de Monex.

  • Aunque continúa por arriba del objetivo del banco central, la inflación a los consumidores este año ha empezado a desacelerarse para regresar al objetivo de Banxico, lo cual ha llevado a que recorte su tasa de interés en sus últimas reuniones de política monetaria.
  • En su última reunión, de septiembre, la Junta de Gobierno del Banco de México recortó su tasa en 25 puntos base, con lo cual quedó en 10.50%, en una decisión de cuatro contra uno, donde el subgobernador Jonathan Heath votó por dejarla sin cambios. Con ello, la tasa se recortó por segunda vez consecutiva y, en lo que va del año, ha acumulado un ajuste a la baja de 75 puntos base.

La próxima decisión de política monetaria se llevará a cabo el próximo 14 de noviembre.

  • “Si bien se encuentra muy por debajo del pico de septiembre del 2022, la inflación ha dejado de presentar una clara tendencia a la baja este año. Asimismo, todavía enfrenta un panorama incierto y la volatilidad financiera puede tardar en disiparse. Esto en principio limitaría el margen de maniobra de Banxico.
  • Por otro lado, en su última reunión, menos miembros de la Junta de Gobierno de Banxico se opusieron al recorte en tasas de interés y el comunicado presentó una guía futura más laxa (…) prevemos que Banxico la próxima semana vuelva a bajar la tasa objetivo en 25 puntos base”, señaló Alejandro Saldaña, economista en Jefe de Ve por Más (Bx+).

No subyacente se acelera

Al interior del informe del Inegi se observó que el Índice No Subyacente fue el que se aceleró durante el décimo mes del año, pasando de una tasa de 6.50 a 7.68% en comparación anual.

  • Dentro de este índice, los precios de los productos agropecuarios se encarecieron en 10.92% anual, debido principalmente a un alza de 15.90% de las frutas y verduras.

“Los productos agropecuarios –especialmente frutas y verduras– retomaron su tendencia alcista, interrumpida entre agosto y septiembre y exhibieron variaciones de doble dígito”, indicó el analista de Bx+.

  • Del lado de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno, la inflación que se observó en este rubro fue de 4.62 por ciento.
  • Por su parte, el Índice Subyacente, que elimina de su cálculo los bienes y servicios con precios más volátiles, volvió a desacelerarse en octubre, al pasar de 3.90 a 3.80% anual.
  • Dentro de éste, el rubro de las mercancías mostró un incremento anual de 2.81% en sus precios, mientras que los servicios se encarecieron en 4.98 por ciento.

“Las mercancías se volvieron a moderar y crecieron a su menor ritmo desde mediados del 2016, probablemente reflejando menores presiones de demanda y a pesar de la depreciación cambiaria de los últimos meses, si bien ésta suele reflejarse con un rezago. Los servicios cedieron un poco y su variación bajó de 5.00% por primera vez desde julio del 2022”, detalló Alejandro Saldaña.

¿Por qué hubo tanta inflación en el sexenio de AMLO?

Durante el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador la inflación acumulada ha sido una de las más elevadas de los gobiernos recientes, un periodo en el que las presiones se avivaron tras la pandemia del COVID-19, y aunque se han suavizado, en meses recientes significaron un impacto al bolsillo de los mexicanos.

  • De finales del 2018 a septiembre de este año, la inflación acumulada fue de 33.02 por ciento, la más alta desde Ernesto Zedillo, cuando fue de 225.32 por ciento de noviembre de 1994 a noviembre del 2000, de acuerdo con datos del INEGI.
  • En comparación con el gobierno anterior, el de Enrique Peña Nieto, la inflación acumulada fue de 27.27 por ciento; con Felipe Calderón de 28.96 por ciento y con Vicente Fox, de 30.43 por ciento.

Cuando inició el sexenio de AMLO, la inflación estaba en 4.72 por ciento anual y el último dato de su gobierno fue de 4.58 por ciento anual, según el INEGI.

  • En promedio, la inflación general fue de 5.17 por ciento anual, de igual forma la más elevada desde Zedillo por 22.13 por ciento, cuyas tasas de 1995 al 2000 fueron en su mayoría de doble dígito ante la crisis económica de ese periodo. Del sexenio de Peña Nieto, la inflación promedio fue de 4.03 por ciento; con Calderón de 4.35 por ciento y con Fox de 4.78 por ciento.
  • En el sexenio que recién concluyo destacó la pandemia en 2020, que provocó una irrupción en las cadenas de suministro, y las mercancías comenzaron a ejercer presiones aunado al gran confinamiento, al tiempo que en las actividades en servicios estaban limitadas. Una vez que se reanudaron las actividades, los servicios tuvieron mayor demanda y por tanto se observó un aumento en los precios.

De los productos de la no subyacente, los episodios de mayor presión se vivieron en este año, cuando las frutas y verduras repuntaron con fuerza ante las adversidades de las condiciones climáticas.

La tasa de inflación general más alta en este periodo se reportó en agosto y septiembre del 2022 por 8.70 por ciento anual y la más baja en abril del 2020 por 2.15 por ciento.

Los cambios en Banxico

Además, en el sexenio de AMLO se designó a cuatro de los cinco integrantes de la junta de gobierno de Banxico: la gobernadora Victoria Rodríguez Ceja que entró en el 2022; Jonathan Heath (2019); Galia Borja (2021), y Omar Mejía (2023).

La subgobernadora Irene Espinosa entró a la junta de gobierno en el 2018 y concluye el 31 de diciembre de este año, pero con opción de mantenerse en el cargo, decisión que estará a cargo de la presidenta Claudia Sheinbaum./Agencias-PUNTOporPUNTO

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