RITA MAGAÑA TORRES
El líder del PRD en el Senado, Miguel Barbosa, consideró un paso importante la definición del jefe de gobierno capitalino, Miguel Angel Mancera, de querer ser candidato presidencial, pero no es suficiente para construir una definición política, la cual se encamine a un proyecto exitoso de aquí a tres años.
Expresó que si el gobernante local pretende materializar su aspiración, debe tomar decisiones, como el impostergable rediseño de su administración en tres áreas: la Secretaría General de Gobierno, en la Secretaría de Desarrollo Social y en el Sistema de Transporte Colectivo Metro.
Indicó que llevar a cabo cambios no es un acto de debilidad política en un gobierno, sino es la adecuación propia cuando las circunstancias han cambiado.
Llamó a la dirección del PRD a no postergar y a encabezar la transformación del partido, a no enconcharse en el argumento de que los resultados electorales obtenidos son favorables, porque nos sitúan como la tercera fuerza política del país y la más votada dentro de la izquierda.
También, añadió, a ser sensibles a la opinión de la sociedad sobre la situación actual del Partido y del país.
“Rumbo al 2018, el PRD no deberá formar parte de alianzas en elecciones locales con el Partido Acción Nacional, de hacerlo el costo político frente a la sociedad sería su desdibujamiento absoluto como partido de izquierda”, alertó.
En su oportunidad, la vicecoordinadora de los senadores del PRD, Dolores Padierna, prevé de Mancera sí competirá por la Presidencia de la República, pero no bajo el emblema del sol azteca, sino como candidato independiente, aunque no desestimó su aspiraciones futuras.
Precisó que para un cargo fundamental para la vida de los mexicanos hay que tener atributos, capacidad administrativa y firmeza en los principios, además haber cumplido con la sociedad en sus otras responsabilidades de gobierno, como es el caso de Miguel Mancera.
Mencionó que el jefe de gobierno capitalino debe dar un viraje a su administración, pues en los primeros tres años de su gobierno las cosas no se hicieron bien.
Expresó hay tres años más para poder remontar y hacer lo que no se hizo, el voto en el Distrito Federal de rechazo al PRD, que es el partido que lo llevó al poder, una calificación negativa y calificando mala a la gestión de Mancera.