RITA MAGAÑA TORRES
La Ley de Amnistía de autodefensas en Michoacán, que permitiría liberar a 383 policías comunitarios, como a Juan Manuel Mireles, enfrente al PRI y PVEM contra el PAN, PRD y PT, gresca donde salieron acusaciones directas a perredistas por la violencia desatada en la entidad.
Incluso, los priístas les recordaron a los del sol azteca el hecho inédito y el mayor escándalo que provocaron al meter en la cajuela de un automóvil al ex diputado, Julio Cesar Godoy Toscano, al Congreso para que tomara protesta, cuando pesaban sobre él indicios de que estaba coludido con la delincuencia.
En reunión de la Comisión de Justicia y el PAN, PRD y PT reactivaron ese dictamen congelado y se puso sobre la mesa, pero senadores del PRI y PVEM manifestaron su rotundo rechazó, bajo el argumento de que se liberaría a criminales.
En su oportunidad, el panista Javier Corral responsabilizó al gobierno federal de ser un “traicionero”, al utilizar a las autodefensas, para luego encarcelarlos de manera injusta, “los usaron, como a perros de rancho, los amarraron para las fiestas y los soltaron para la pelear”.
De su lado, la perredista Dolores Padierna, aseguró que expedir esta ley a favor de autodefensas no significa perdonar delitos, sino asumir facultades del Legislativo para una acción jurídica a favor de los pueblos olvidados por las autoridades encargadas de brindar seguridad.
Hizo un llamado a los demás legisladores a no sumarse a la criminalización de una acción de sobrevivencia, de legítima defensa.
Recordó que una de las iniciativas enviadas por el Ejecutivo federal reconoce la infiltración del crimen organizado en las corporaciones policíacas, por lo que una alternativa de la sociedad para defenderse ha sido crear los grupos de autodefensa.
“Las autodefensas fue el último recurso que ocupó la gente para salir de este problema”, destacó.
Aseveró que la amnistía a las autodefensas puede ayudar a buscar la tranquilidad de las comunidades y como legisladores es su responsabilidad coadyuvar a que la paz, la reconciliación y la armonía en el país pueden alcanzarse.
Sin embargo, la embestida del PRI no se hizo esperar, y fue el político michoacano José Ascencio Orihuela quien afirmó que no podían aprobar esta ley, de paso les recordó a los perredistas que los más altos índices de criminalidad en Michoacán se alcanzaron desde las administraciones del PRD.
“No se les olvide el más grande escándalo de haber llevado al ex diputado federal, Julio Cesar Godoy Toscano, al Congreso cuando resultó estar coludido con el crimen”, les recriminó.
En apoyo al priísta, el senador del PVEM, Luis Alberto Puente, afirmó que aprobar esta reforma es abrir la puerta de la prisión a integrantes de la delincuencia organizada como los Caballeros Templarios.