EL UNIVERSAL
El historiador Enrique Krauze pidió al Presidente Enrique Peña Nieto que comparezca ante la Nación y ofrezca disculpas al pueblo de México.
«Nada da más nobleza a una persona en el poder de reconocer su propia humanidad», menciona el autor en un artículo publicado en The New York Times.
El escritor afirmó que el Presidente Peña Nieto ha demostrado un notable liderazgo tras la aprobación de reformas clave para la economía y el desarrollo de México.
Sin embargo, subrayó que ahora el Mandatario debe actuar con rapidez para restablecer su credibilidad política ante la crisis actual.
Puntualizó que la popularidad del Mandatario ha caído en los últimos meses ante la lentitud de la respuesta al caso Ayotzinapa.
Krauze hizo alusión a las manifestaciones en las que miles de jóvenes se han expresado en las calles de México desde que ocurrió, el 26 de septiembre, el secuestro de los 43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa, en Guerrero y el asesinato de algunos de ellos.
Refirió que aunque la Procuraduría General de la República (PGR) sostiene que el crimen fue cometido por un cártel, bajo las órdenes del ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca, detenido igual que su esposa, las manifestaciones estudiantiles culpan al gobierno de Peña Nieto y exigen su renuncia.
Igualmente, Krauze sostuvo que si bien ha habido incidentes de violencia durante las manifestaciones, la mayoría han sido pacíficas.
El autor de «Siglo de Caudillos» citó el estribillo de la famosa canción de José Alfredo Jiménez: «No vale nada la vida, La vida no vale nada», cuyas palabra, afirmó, reflejan tristemente la realidad del país.
Destacó el elevado número de asesinatos cometidos en los últimos años en el país a causa de la delincuencia organizada, y que en Tamaulipas la autoridad civil es casi inexistente.
También señaló que periodistas, bloggers y tuiteros son asesinados en forma rutinaria.
En Guerrero, expuso, opera más de una docena de bandas criminales, y las autoridades municipales a menudo colaboran con los delincuentes.
En tanto, en estados como Michoacán, Morelos y México, los secuestros, los asaltos y las extorsiones van en aumento.
El 98% de los crímenes han quedado impunes, lo que muestra que la impunidad es un problema de gran importancia en el país, concluyó.
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