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Autoridades hondureñas impidieron hoy salir del país al activista mexicano Gustavo Castro Soto, que fue testigo del asesinato de la líder indígena hondureña Berta Cáceres, informó su organización.
“Seguimos sin conocer con claridad cuál es su estatus o bajo qué fundamentos sigue retenido por las autoridades hondureñas y cuáles serán los procedimientos a seguir”, indicó el grupo Otros Mundos Chiapas en un comunicado.
Castro Soto, que resultó herido en el atentado que le costó la vida a Cáceres el jueves, fue interceptado en el Aeropuerto Internacional de Tegucigalpa cuando pretendía abordar el avión de regreso a México la madrugada del domingo.
Personal de la Embajada de México en Honduras lo llevó de regreso a la sede diplomática resguardado en un automóvil oficial, según su organización.
“Pedimos a las organizaciones y a los defensores de derechos humanos que vigilen la situación, ya que Gustavo Castro fue víctima de un intento de asesinato en este país”, señaló Otros Mundos Chiapas.
La Secretaría de Relaciones Exteriores mexicana había informado el viernes que Castro estaba atendiendo las diligencias de las investigaciones, apoyado por personal de la Embajada, y que sería repatriado lo más pronto posible.